Las semanas habían pasado y las cosas volvieron a la normalidad, supongo. Me alegraba por eso.
Supuse que Izzie me había perdonado por lo que había hecho aquella noche..., o tal vez aprendió a vivir con eso.
Nunca logré recordar lo que había hecho esa madrugada.
Sin embargo, ambos habíamos logrado mantener varias conversaciones agradables, y hasta había llegado a deducir que nos habíamos hecho más cercanos.
Ayer, a pesar de que eran más de las once y media de la noche, jugábamos tranquilamente a aquel juego de "las veinte preguntas".
Todo iba tan bien hasta que llegó a "la pregunta".
—De acuerdo, ahora es mi turno. ¿En este momento, tienes novia?-preguntó tímidamente mientras que sus mejillas se tornaban de un color rosado.
—N..No — tartamudeaba por los nervios; no esperaba para nada esa pregunta.
Probablemente yo estaba igual de rojo de la cara que ella...o peor.
Pero ésta era mi oportunidad de saber si algún día podría ser sólo mía, no podía desperdiciarla.
— ¿Y qué hay de ti, Izzie?— sonreí de lado —¿Acaso estás disponible?
Me devolvió la sonrisa.
—Totalmente disponible.
ESTÁS LEYENDO
Hospital lover.
Short StoryProméteme algo: siempre creerás en la frase: "Si fueron hechos para estar juntos, el destino de encargará de unirlos.", porque amigo, es jodidamente cierto eso. No importa la mala vida que tengas, el destino siempre se encargará de juntarte con la p...
