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―Te dije que te alejaras de ella.

―Te dije que no lo haría ― contraataqué.

Tenía razón, pero no podía dejar que mi padre aplastara mi orgullo.

Estacionó el automóvil a mitad de la carretera, girándose con la cara seria.

Fruncí el ceño; no entendía lo que estaba haciendo.

Suspiró, para después decir:

―Supongo que ya tienes la mayoría de edad para saber la verdad.

― ¿Qué?

Dudó unos segundos antes de pronunciar:

―La verdad sobre la muerte de tu madre.

Abrí los ojos quedándome en shock y no dije nada durante un buen rato, por lo que mi padre prosiguió diciendo las palabras que cambiarían absolutamente todo:

―Tu madre no murió atropellada. Fue asesinad ― dijo ―. Fue asesinada por alguien con las mismas enfermedades de Izzie, pero mucho más graves. Tu madre tenía delirios, como seguramente te diste cuenta el día en que trató de hacerte daño. El día en que iban a darle de alta, el paciente con las enfermedades de Izzie, sufrió un ataque, haciendo las mismas acciones que tu amiga hizo hace unas horas. Lamentablemente la situación no pudo llevarse bajo control como nosotros lo hicimos y el paciente alcanzó a agarrar una jeringa; tu madre fue la desafortunada que le tocó recibirla. No tenían los instrumentos ni la maquinaria necesaria para curarla, y en cuestión de minutos tu madre ya estaba en el cielo.

Ambos demarrábamos lágrimas, no podíamos contenernos. Aunque ya habían pasado dos años de su muerte, necesitábamos desahogar todo lo que no pudimos hacer por el estúpido orgullo.

―Así que hijo, por favor, aléjate de ella si es que no te importa ― la furia empezaba a aparecer dentro de mí de nuevo por lo que me estaba pidiendo ―. Pero sé que no lo harás por lo terco que eres como lo era tu madre ―soltó una risilla ―, así que prométeme algo; si en verdad te importa y la amas como tanto dices, prométeme que lucharás por ella. Lucharás por hacerla cambiar a bien, le ayudarás a vivir una buena vida como la que todos merecemos, y te quedarás con ella, así como yo me quedé con tu madre.

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Ya son 1K de lecturas en Hospital Lover. ¡Muchísimas gracias a todos, de verdad! No saben lo feliz que me hace ver que a mucha gente le ha gustado las palabras e historias que salen de mi  alocada mente. Muchas gracias de nuevo.

Besos.

―K.M.


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