Capitulo 11

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Sandra me paso unos papeles en donde venia la foto del sujeto que intento secuestrarla ademas de los nombres falsos que usaba. Venia la descripción de lo que hacia y para quien trabajaba, solo que no venia el nombre de su jefe.

-¿Para quien trabaja?- pregunte.

-No lo sabemos, este sujeto a dicho al menos 7 nombres diferentes y ninguno concuerda con la base de datos de la policía- dijo John.

Asentí y pase mis manos por mi rostro, estaba frustrado al no saber con certeza que demonios pasaba.

-Crees que este sujeto... allá... allá secuestrado a ¿Daphne?- pregunte a nadie en especifico, solo quería saber su opinión.

-No podemos asegurarlo amigo- dijo John -Tenemos la ventaja de tener a este hombre, el teniente me aseguro que tratarían de sacarle la mayor información, pero...-

-No es suficiente- dije mientras me levantaba y caminaba hasta el escritorio para tomar el teléfono.

-Vas a llamar ¿A quien creo?-

-No tengo otra opción, ademas me debe favores- dije mientras marcaba el numero.

-Sera difícil explicarle lo de tu esposa-

-Lo se, pero ¿La sangre llama no? Bueno al menos eso es lo que dicen-

-¿De que demonios hablan? No es el momento de palabras claves- gruño Sandra.

-Quiero hablar con el Director Asistente al Mando por favor- dije cuando la operadora me contesto - Si, es Fernando Montemayor-

-¿Ahora piensas que es un buen momento para hablarle a tu hermano?- pregunto Sandra.

-Si- Suspire -Se que cuando le cuente lo ocurrido, primeramente me gritara y tal vez me golpee pero se que no dejara pasar esta oportunidad-

Me quede en la linea esperando a que Fernando respondiera. Pasaron varios minutos hasta creí que me dejaría colgado, pero al final contesto.

-Bueno- contesto una voz parecida a la mía, pero mas grave.

-Hola hermano- respondí un poco nervioso.

-Vaya, esto si que es una verdadera sorpresa, cuando me dijeron que me buscaban, honestamente no creí que fueras tu- dijo un tanto sentido.

-Lo se- dije mientras me sentaba nuevamente en la silla -Dime algo, ¿Qué sabes sobre la trata de mujeres?- la linea se quedo en silencio por unos segundos, solo escuchaba su respiración.

-Es un gran problema que, aun estando en pleno siglo 21, no ha desaparecido, se intensifica cada día que pasa, pero la pregunta correcta es ¿Qué sabes tu de la trata de personas?-

Respire profundamente, este no es un tema sencillo, sobre todo para decirlo por teléfono.

-Escucha bien lo que te voy a decir Fer, necesito que vengas a NY cuanto antes-

-¿Porqué?- pregunto en ese tono que usaba para intimidarme cuando eramos niños.

-Hay un hombre, que necesita ser interrogado de la forma correcta y eres el único que puede hacerlo-

Oí como movía papeles y tecleaba en su computadora, se que esta analizando la información que le estoy dando.

-¿Ese hombre que es para ti? ¿Un viejo amor tal vez? ¿Estas enojado porque no te hizo caso?- me reí, así era mi hermano, a pesar de que hablábamos de temas serios, siempre decía algo que me hacia reír.

-Algo así, el hombre puede que este relacionado con la desaparición de... de... de... - Dios porque es tan difícil decirlo, pensé -De mi esposa, la cual esta embarazada-

Apostaría una gran cantidad de dinero que a dejado caer la taza al suelo, al oír lo que le decía.

-Llegare mañana por la tarde, en tanto no hagan nada estúpido- y colgó.

-¿Qué te dijo?- pregunto Sandra.

-Llegara mañana por la tarde-

-Excelente, eso nos dará tiempo para juntar algo de información, hay que imprimir los mensajes y las fotos que te han mandado Sandra, ademas de la declaración de ese sujeto-

Asentí, al menos es lo único que podemos hacer por el momento.

Al día siguiente.

Estamos en el aeropuerto esperando que todos los pasajeros bajen, pero hasta el momento no hemos visto a Fernando.

-¿Lo vez?- le pregunte a Sandra que me acompañaba, ya que John estaba ocupado en la comisaria.

-No, aun no. Dios de donde sale tanta gente- es cierto a estas horas de la tarde hay un enorme flujo de gente.

Pasados unos minutos apareció mi hermano mayor. Hace varios años que no lo veía y sonreí al ver como las mujeres se lo comían con la mirada, algunas mas discretas que otras, incluso una lo detuvo para darle su tarjeta.

-Asqueroso- dijo Sandra al percatarse de lo que pasaba yo me reí.

Iba lo mas cómodo del mundo, con un pantalón de mezclilla, camisa blanca y una chamarra de mezclilla y botas negras, daba el aspecto de ser un chico malo y mas con esos lentes de aviador que traía.

Se detuvo ante nosotros y se quito sus lentes.

-Vaya hermanito creo que el matrimonio te a envejecido- dijo con una enorme sonrisa y dándome unas palmadas en la espalda.

-Es una larga historia hermano, pero me da gusto verte- dije mientras le regresaba el golpe.

-Hola prima, que guapa estas- dijo con una de sus irresistibles sonrisas.

-No empieces Fer y no lo digas ta fuerte, vamonos ya que es tarde- subió su bolso al hombro y comenzó a caminar.

La seguimos por el amplio pasillo sin decir nada aun, se que tendría muchas preguntas pero para ser sincero quería retrasar la charla el mayor tiempo posible.

Llegamos hasta mi camioneta y los tres subimos. En pocos minutos estábamos en la avenida principal.

-Resumelo- dijo Fer.

Me sorprendí de lo que dijo pero asentí.

-El hombre que quiero que interrogues puede estar implicado en la desaparición de Daphne- trague saliva, aun me era difícil pronunciar su nombre sin problemas.

-Y ella es...-

-Mi esposa- vi asentir a mi hermano y comenzó a sacar unos papeles de su portafolio.

-Daphne Montemayor, se reporto desaparecida hace una semana en Nueva Zelanda- dijo el mientras analizaba los papeles.

-Lo sabias verdad- le dije.

-Si hermano, Acaso ¿Olvidaste que trabajo para el FBI? Yo lo se todo, sabia que te habías casado y aunque al principio me enfurecí de que no compartieras eso conmigo al final comprendí porque lo hiciste-

-Supongo que ellos lo saben-

-No hermano, no les dije nada- asentí, creí que Fer les diría a mis padres que había hecho mi vida con una mujer que, en palabras de ellos, no era de mi clase.

Tiempo después llegamos a la comisaria pero en el momento en que Sandra yo bajamos mi hermano saco su arma de la espalda y se puso en estado de alerta.

-Quédense aquí- dijo y comenzó a subir los escalones que estaban cubiertos de escombro.

-Pero que demonios...- Sandra no termino la frase ya que vimos como mi hermano salia del edificio cargando a un oficial. Detrás de el venia John -Oh dios- exclamo Sandra al verlo ensangrentado.

Fer dejo al policía en la banqueta y camino hasta nuestro lado.

-¿Qué paso?- pregunto Fer a John.

-Estaba en la oficina esperando a pasar para ver a nuestro hombre cuando oímos una explosión en la planta baja, todo sucedió tan deprisa que cuando fuimos a la celda, él ya no estaba-

-Quieres decir que...- dijo Sandra.

-Sus amigos se lo llevaron, no tenemos nada-

Un Error del AmorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora