Hola. Después de mucho tiempo, esta historia continuará, PERO... habrá modificaciones, estoy intentando mejorar la novela.
CONSEJO: aún no la lean, iré actualizando de a poco, solo este capítulo esta listo.
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Hoy salí al mediodía de clases, sin nada que hacer, decidí ir directamente a casa. Me encontraba a una cuadra de distancia cuando vi dos camionetas negras estacionadas frente a mi hogar. No tenía idea de a quiénes pertenecían, ya que ninguno de mis vecinos o conocidos poseía vehículos como esos.
Abrí la puerta de mi casa y me encontré con dos hombres corpulentos vestidos completamente de negro. Nunca los había visto antes.
—¿Quiénes son ustedes? —pregunté de inmediato.
—¿Quién eres tú? —respondió uno de ellos, pero en ese momento escuché la voz de mi padre.
—¡Hija! —gritó.
Rápidamente me abrí paso entre los dos hombres hasta llegar donde estaba mi papá. Se encontraba sentado frente a uno de los sillones individuales y, en el otro, un joven con un arma en la mano. ¿Pero qué mierda?
—Pero hombre, no me habías dicho que tenías una hija tan bella —dijo el hombre sentado.
—Hija, yo... —mi papá, con los ojos llorosos, intentó hablar. ¿Qué estaba pasando?
—¿Qué pasa, papá? ¡Dime! —dije confundida, pero el hombre del arma se adelantó y habló antes que él.
—Lo que pasa es que tu papá me pidió dinero —dijo. Inmediatamente miré a mi padre— Y como no me lo ha pagado, vine a visitarlo. La fecha límite ya pasó —
—¿Pero, no pediste un préstamo al banco? —le pregunté a mi papá, necesitando una explicación. Se suponía que había pedido un préstamo al banco, no a este hombre.
—Era urgente, tu mamá necesitaba la operación —dijo, y en su voz noté que estaba a punto de llorar.
—Pero tú descuidaste la fecha de pago y no juntaste el dinero —dijo el hombre.
—Es mucho para reunirlo en tan poco tiempo, pero tengo una parte —dijo mi papá, visiblemente nervioso.
—Hicimos un acuerdo y no lo cumpliste, ya sabes lo que va a pasar —
—¿Qué pasará? —pregunté.
—Aunque hay otra opción —dijo el hombre con una sonrisa maliciosa.
—¿Cuál? —pregunté.
—Tú, hermosa, te vienes conmigo y olvidamos la deuda —me señaló con el dedo—. O él muere y te llevo de todas maneras conmigo —dijo apuntando a mi papá.
—Eso no —dijo mi papá con voz firme, poniéndose de pie, pero fue obligado a sentarse por los dos hombres al lado del jefe, parecen gorilas, son muy corpulentos.
—¿Para dónde vas? —dijo uno de los gorilas. Era moreno, con ojos celestes, y los tatuajes en sus brazos se notaban gracias a la musculosa que llevaba.
—¿No hay otra opción? —pregunté.
—No —dijo el jefe, el hombre con el arma.
—No puedo dejar que mates a mi papá, ni tampoco puedo irme con un desconocido, a quién sabe a dónde —dije con los ojos aguados y un nudo en la garganta.
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Propiedad De Alexander (En Edición)
WerewolfTodo empezó cuando su madre sufre un accidente, su padre acude a Alexander para pedir un préstamo de dinero. Pero no resulta muy bien y Alexander va para que le pague el préstamo pero el no lo consiguió en totalidad. Ese día para ella cambia su vida...