Después de tomar una ducha de unos 10 minutos, salgo envuelta en una tohalla para ir a vestirme.
-Alexander..- dije al salir del baño, pero vaya sorpresa que me llevo
Alexander no esta en la cama, ¿donde demonio esta?, tal vez esta en el closet, fui hasta ahí y no, no esta ahí.
Me vestí con una polera blanca sin mangas y con un estampado, unos shorts rojos, zapatillas del mismo color.
Me seque un poco el pelo con la tohalla y me amarre un mechó para el lado con un moñito rojo y salí a buscar a Alexander.
-Dona, ¿donde esta Alexander?- dije al entrar a la cocina
-esta en el jardín- dijo mirándome
-¿me puedes llevar donde el?- le Sonreí
-claro señorita- dijo secándose las manos en un mantel
Caminamos y llegamos al jardín, caminamos por un camino de piedras que había ahí y pude observar el jardín, este era hermoso.
-allí esta señorita- dijo apuntando hacia una carpa de jardín de color blanco, muy linda por sierto.
Camine hasta llegar ahí, Alexander estaba dándome la espalda.
-¿se puede saber que estas asiendo aquí?- dije caminado hasta estar frente a el
-estaba aburrido en la habitación necesitaba aire libre- dijo
-Alexander estad herido necesitas guardar reposo- dije un poco molesta
-pequeña estoy bien- me sonrió
-eso mismo decías antes que te desmayaras- lo mire
-estoy bien ¿si?, además ya me reviso el doctor- se acomodo en su lugar
-el mismo dijo sobre el reposo- este hombre que es porfiado debería cuidar su salud
-no te comportes como su fueras mi madre- hizo una mueca
-pues me preocupó por ti- me encoji de hombros
-así que te importo- sonrió
-no me cambies de tema Alexander- frunci el seño y a la vez intente evadir su pregunta
-no te comportes como una vieja amargada- arrugo su nariz
-pues así soy, te recuerdo que tu fuiste el que me trajo aquí para "ser su mujer"- hice comillas con los dedos- y si no te gusta es mejor que me deber ir- Sonreí
-eso jamas, ahora ven para aca- me acercó a su cuerpo y me abrazo
-con cuidado- dije apoyando mis manos en su pecho para alejarlo
-estoy bien- bufo
-tal vez sea muy aburrida al repetirte muy seguido esto pero es por tu bien Alexander- lo mire
-si tu me cuidas lo estare- me sonrió
-entonces has me caso- con mi dedo toque su nariz
-te vez hermosa- me acercó más a él
-gracias- sentí como mis mejillas se colocaban rojas
-te vez mas hermosas con tus mejillas rojas- sonrió
-ya basta- desvíe mi mirada
Con su mano hizo que lo mirara
-no te avergüences, sabes me encanta tu inocencia- tomó mi mano y la besó
Demonios este hombre me esta haciendo que mis mejillas hiervan en este momento, no me imagine que este hombre podría ser así de tierno.
-jefe aquí esta el desayunó- hablo Dona, la mire y traía una bandeja con diferentes tipo de alimentos.
-gracias Dona- dijo Alexander
Ella asintió y se fue.
-bueno mi pequeña ahora a desayunar- dijo Alexander
-se ve todo muy rico- dije
-mande a prepara todo esto para ti- dijo
-gracias- dije y me dispuse a ver todo lo que había traído Dona.
-adelante cariño come lo que quieras- me sonrió
Después de terminar de tomar desayuno con Alexander nos quedamos en silencio, yo estaba atenta viendo como jugaban dos mariposas
-¿te gusto?- habló Alexander
-¿que?- dije mirándolo
-¿te gusto el desayuno?- me sonrió
-si estaba todo riquisimo- le sonreí
-Dona cocina muy bien- dijo
-la verdad es que si- dije
Nos quedamos mirando por unos minutos y me sentí un poco incomoda su mirada era muy intensa.
-No me has dicho tu nombre- me dijo Alexander
-es verdad- dije
-¿cual es?- me miro atento
-me llamo Nicole- contesté
-Nicole, mi Nicole- dijo Alexander
-no empieces- dije y desvíe mi mirada
-¿empezar que?- dijo
-Lo de que te pertenezco- dije mirándolo
-Es que así es- subió un poco su tono de voz
-Alexander yo no soy de nadie- dije comenzando a enojarme
-Lo eres, eres mía- dijo enojado
-yo no soy un objeto Alexander!- dije bueno casi grite
-a mi no me hablas así niña- dijo parándose
-si no te gusta como te hablo dejame irme- dije cabreada
-eso ni lo sueñes- me miro enojado
-como quieres que pasemos toda una vida juntos si hace un día que nos conocemos y ya hemos discutidos miles de veces- dije
-me da lo mismo si peleamos un millos de veces tu eres mía- dijo apretando sus puños
-deja de tratarme como un puto objeto- grite
Su expresión era de enojo, su ceño fruncido y su cara roja, note que su cuerpo estaba tenso, debo admitir que me causó miedo.
Vi su mano derecha levantarse, me causo mucho miedo, me va a golpear!, mi primera reacción fue cerrar mis ojos y esperar el golpe.
Pero este nunca llego, sentí como sus manos me tomaron de mis mejillas y me beso!.
Me besaba con desesperación, yo no sabia que hacer, seguía en schok, creí que me golpearía.
El al ver que no le correspondía el beso mordió mi labio y gruño al hacerlo, de inmediato abrí mi boca y el rápidamente introdujo su lengua en mi boca explorando cada parte de esta.
El cambia de posición sus manos una queda en mi cintura y la otra en mi cabeza, yo coloco mis manos en su cuello.
Nos separamos por falta de aire, él junta nuestras frentes y solo se escucha nuestras respiraciones agitadas.
Vuelve a unir nuestros labios pero esta vez es un beso tierno.
-Mía solo mía- susurró
Bueno estos 3 últimos capítulos serian los que prometí en el maratón... Antes iba pensando subirlos todos juntos pero para mas tarde, pero este finde estuve inspirada y escribí así que gracias por leer y votar...
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Propiedad De Alexander (En Edición)
Hombres LoboTodo empezó cuando su madre sufre un accidente, su padre acude a Alexander para pedir un préstamo de dinero. Pero no resulta muy bien y Alexander va para que le pague el préstamo pero el no lo consiguió en totalidad. Ese día para ella cambia su vida...