CAPÍTULO 15

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Al parecer no se lo estaba preguntando sino suplicando. Mi temor de quedarme sola esta noche, hacía que lo demás con Drew quedara en el olvido y ahora pedirle que pase una noche conmigo es atrevido pero necesario.

Al decirle esto, solo siento angustia al ver su reacción. Pero sólo me mira confundido. Si se niega, esta bien, no puedo obli...

-Claro.- Dice derrepente. Me sorprende más de lo que esperaba. Él acepta tan así como si no fuera una propuesta tan íntima. Bueno, para mi lo es. Y esto me hace recordar aquella noche que fuimos a cenar... No debería pensar en esto, lo descarto de mi cabeza rápidamente.

Lo miro tranquila ya que su respuesta es un alivio.
En ese momento Drew se dirige de nuevo hacia el lado de mi cama en el que se encontraba hace unos segundos.

Él toma asiento y me observa detenidamente, me doy cuenta de que quiere algo más de espacio en la cama. Hago el espacio necesario para ambos, y asi él se pueda recostar a mi lado. Aunque admito que pesar de que la cama es grande, lo noto demasiado cerca.

Trago saliva algo nerviosa, me siento algo avergonzada por lo que le acabo de pedir. Pero a la vez mas relajada que antes.

-Buenas noches, Charlotte.-Dice en un susurro.

-Buenas noches.-Contesto tranquilamente de igual manera.

Lo miro por unos pocos segundos y después cierro mis ojos para al fin poder dormir.

Esa noche había tenido un sueño, uno muy lindo. Donde estaba mi familia reunida, brindando por mi trabajo, el bebé de Diane y la nueva casa.

Ahora algo me molesta en la cara, algo que a la vez es un ligero cosquilleo. Abro mis ojos en respuesta, y observo finos rizos oscuros justo en mi rostro, los causantes de aquel cosquilleo, me alejo de ellos lentamente. Su cabello largo y rebelde ya era una costumbre ver cada mañana haciendo de las suyas en mi cara. Pero no podía negarlo, es un buen despertador.

Estas noches fueron las más tranquilas, y digo noches porque habian pasado un par de días desde que le pedí a Drew que durmiera conmigo.

El primer día por la mañana al despertar me había sorprendido tanto que estuviera durmiendo conmigo, ya que lo había olvidado. Y después de unos segundos había recordado que yo misma se lo había pedido. Después comenzamos el día como si nada hubiera sucedido, nada fuera de lo común. Fuimos a trabajar, al terminar visitamos a nuestros amigos, y por la tarde cenamos juntos. Todo normal, hasta que llegó la noche. Drew subió a su habitación y yo a la mia para tratar de dormir, pero fue de esperarse y no lo logré, la ansiedad y el temor invadía mi mente, hasta que no pude más y entonces fui a su habitación y toque su puerta. Nisiquiera me dio tiempo de decir algo o explicarle de nuevo lo que me sucedía, sólo abrió la puerta y salio de su habitación con su almohada, y entró a la mia, para así dormir juntos como la noche anterior.

Así que llegamos a una conclusión: siempre que él se encuentra muy cerca de mi, yo podía lograr el sueño muy rápido. Me siento más tranquila y segura. Parecía un capricho, pero había algo misterioso que lo hacía completamente real. Algo que no podía explicar. Y algo que fuera como fuera Drew lo entendía y a mi me dejaba muy tranquila que él pudiera ayudarme con eso.

Pero tenía una preocupación un poco más inquietante: temía que se me hiciera costumbre, pero veía que al parecer a él no le importaba dormir en la misma cama conmigo. Asi que...¿podría vivir con eso? aun no lo se, pero por el tiempo que fuera necesario.
Nadie más lo sabe, solo él y yo. Nisiquiera Anis y Step, Vittorio o Helena a quienes les tengo mas confianza. Ellos se han convertido en buenos amigos a pesar de las circunstancias.

En fin, hoy es un nuevo día. Miro un momento su rostro. Observo con curiosidad cada detalle mientras él mantiene los ojos cerrados, sus largas pestañas, el color de su piel, su nariz afilada, sus labios que casi se esconden en aquella barba castaña, incluso su forma de respirar tan tranquilo, en la que él se centra al dormir. Me he perdido tanto en observarlo que olvidé el tiempo y de pronto sonrío levemente.

Nuovodunia: El misterio en la oscuridad.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora