—¿Feliph? —Anne se frotó los ojos luego de soltar a Chloe, quien había permanecido abrazada a ella como un oso polar varios minutos.
—Anne... —susurró, acercándose a ella de a cortos y lentos pasos. Ambos se observaron sin decir palabra alguna, atónitos—. ¡Anne!
Feliph la estrechó entre sus brazos, dejando escapar algunas lágrimas de felicidad, le dio caricias en los hombros y aspiró el olor de su cabello. Se separaron para poder conectar sus miradas unos minutos, y así se quedaron.
—Supéralo Richard. —le murmuró Chloe al oído—. Ella solo quiere a mi papá. Puedes ir preparando tus cosas e irte, allí está la puerta. —ladeó la cabeza hacia la misma y el sonrió.
—Quizás tengas razón pequeña... —le desordenó el cabello—. Quizá él es quien en verdad hace feliz a tu madre.
—No es un quizás, lo serán. —la pequeña sonrió con autosatisfacción al verlos abrazados.
—Nos vemos pronto Chloe, luego hablaré con tu madre. —ella asintió y el salió de ahí con una sonrisa en su rostro. Sabía que algún día eso ocurriría, sabía perfectamente lo que pensaba, necesitaba, y haría feliz a Anne. Y con tal de ver que ella era feliz, el lo sería.
—Feliph, Dios mío. —la mujer le sollozaba en el hombro y recibía constantes caricias por parte de su ex marido—. Creí que estabas muerto.
—Siempre fuiste tan sutil. —le acarició la mejilla con el pulgar, humedeciéndolo por completo a causa de las lágrimas de Anne—. Te extrañé mucho, cariño. —murmuró en su oído.
Chloe estaba dando saltitos en su lugar, orgullosa de su padre. Ansiaba ese día, el día en que se reencontrasen. Sabía y estaba completamente segura de que ellos estarían juntos, toda su vida. Sonrió con ternura mientras los observaba y desvió su vista a la puerta que acababa de rechinar. Matt se encontraba allí con sus padres, observando con atención a aquella pareja... ¿Cómo llamarla? No emparejada por completo.
—Oh, Feliph. —sonrió con pesadez el padre de Matthew, rompiendo el tierno momento que había entre Anne y él.
—Anthony. —saludó Feliph nada más que por cortesía—. Qué lástima me da tener que decir que no es un placer verte. —le gruñó observándolo mal.
—¡Feliph! ¿Qué atrocidades dices? —le preguntó Anne, quien le sujetaba el hombro apoyándose en él.
—No es buena gente. —lo miró con desprecio y estrechó a la mujer entre sus brazos mientras Chloe también se unía.
—¿Quién es él Anne? —preguntaron Matt y Jenna, ambos confundidos.
—Mi papá. —Chloe respondió sin pensar—. Mi papá y el de Jordyn.
Matt palideció instantáneamente y recordó que ella no estaba en buenas manos, o eso creía. Tensó la mandíbula y apretó sus puños, relajó un poco su movimiento ya que tenía en sus manos su móvil.
—Ansiaba ver al hombre con el que mi novia tenía pesadillas. —dijo sin rodeos, frustrado, con rabia y tristeza en su voz.
—Matt, no le hables así. —intervino Jenna. Matt hizo un ademán restándole importancia y se acercó hacia Feliph.
—¿De dónde se conocen? —Jenna y Anne estaban totalmente desconcertadas.
—Él, tu queridísimo padre. —observó a Anthony con desprecio—. Fue quien me obligó a dejar a mi familia. —negó con tan solo recordarlo. Anne lo observó confundida, Feliph le depositó un beso en la coronilla.
—¿De qué hablas? —murmuró Jenna.
Chloe comenzó a atar los pocos hilos que quedaban sueltos. Resolvió el acertijo. Todo en su mente estaba completamente claro, todo estaba resuelto.
—Anthony, tú hiciste todo ésto... —murmuró ganándose todas las miradas confundidas—. ¡Tú fuiste quien amenazó a mi papá! ¡Lo apartaste de nosotras! —gritó mientras lloraba desconsoladamente—. Tú arruinaste la vida de mi hermana.
La mirada del hombre se posó en el suelo como si mostrara arrepentimiento, pero no fue así. Alzó la vista con una incrédula sonrisa observando fijamente a la niña.
—Parece que eres lista, pequeña. —le sonrió y Chloe desfiguró su rostro.
—No le hables a mi hija. —interrumpió Feliph, furioso—. Bastantes cosas destruiste, lárgate de aquí. Tú y toda tu familia.
Anne sollozaba en silencio, escondida en el pecho de su ex marido.
—Anne, te juro que yo no sabía nada... —habló Jenna dolida.
—Cállate. —la miró a los ojos por primera vez—. Cállate y vete de mi casa.
—Papá... —Matthew aún estaba perplejo—. ¿QUÉ DEMONIOS TE OCURRIÓ A TI? —le gritó mientras movía sus manos exasperado.
—Cálmate niño, en casa está Lía cuidando a tu hermana, ella es mucho mejor que Jordyn. No puedes estar con la hija de esa basura. —repuso con asco, y se encaminó hacia la salida.
—No hables así de mi familia. –advirtió Feliph acurrucando a Chloe en sus brazos. La pequeña se mantuvo callada por un buen tiempo.
—¿Dónde está Jordyn? —le preguntó enojado—. ¿Dónde está mi novia? —repuso mirando mal a su padre.
—Está aquí. —contestó James que yacía en la puerta, calmando los llantos de su hermana quien le daba la espalda a todas esas personas.
—¿Quién demonios eres tú? —Matt le gruñó, desesperado. Aunque por otro lado, la felicidad también lo había invadido. Por esos mensajes él no había estado el cien por ciento seguro que ella estaba bien, pero ahora, lo comprobó con sus propios ojos.
—Su nuevo novio, vámonos Matthew, en casa te espera la tuya.
Un desgarrador sollozo se escapó de la boca de Jordyn, captando la atención de todos. Se cubrió con las manos mientras pellizcaba sus brazos.
—Sh... Cálmate pequeña. —susurró James, dándole caricias en la espalda—. No hagas eso, ven aquí bebé. —le besó el cabello mientras le daba a la otra familia su peor mirada de desprecio.
—¡Deja de tocarla! —Matt caminó hacia ellos, pero el padre de Jordyn se interpuso en su camino.
—Él tiene más derecho a tocarla que tú, Mathhew. —lo miró negando con la cabeza y se acomodó al lado de Anne.
—Todos ustedes, fuera de mi casa. —los corrió Anne y sin rechistar Jenna y su esposo se fueron.
—¿Qué tal besa Lía? —preguntó mirando a Matt sobre el hombro de su hermano. Pequeñas lágrimas bajaban por las mejillas de su chica y se le estrujó el corazón.
—Yo no la quise besar, Jordyn. Ella...
—¿Qué? ¿La besaste? —alzó la voz—. Se suponía que era una estúpida palabra sin sentido lo que dije, no pensé que era cierto. —poco a poco bajó el tono de su voz, con incredulidad y fastidio.
—Cariño...
—¡Cariño nada! ¡Tu padre arruinó toda mi jodida vida! Se llevó a mi papá, me crié sin él, lo apartó de toda mi vida y de la de mi hermana. —la señaló—. ¡Y tú! —se acercó a él soltándose del agarre de su hermano—. Eres de la misma basura de familia. Me das asco, vete de aquí. No me hables nunca más. —se tiró los cabellos con frustración. Alzó los ojos y pestañeó varias veces intentando ahuyentar las lágrimas cosa que no funcionó.
—Jordyn, yo no... —se acercó pero James lo impidió, sujetándola de la cintura y fulminando a Matt con la mirada.
—Odio a cada maldita persona que tenga tu apellido. ¡FUERA! —sin quejarse, se marchó, dispuesto a tener una seria discusión con su padre, y una mucho mas grande duda acerca de su afición con el trabajo, de la profesión de su padre para ser exactos.
Se dio cuenta que su familia, había destruido otra, y él estaba incluido.Sigan leyendo, y encontrarán extras,
xPedra✨
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WhatsApp, My Starbucks Boy
Teen Fiction#7 Starbucks 30/09/18 Jordyn: Dime tu nombre. Chico del Starbucks: ¿Qué parte no entendiste de que me dejes en paz? Jordyn: No seas amargo cariño,sólo es una pregunta. Chico del Starbucks: ¿Y como voy a saber yo si no me quieres secuestrar? Jordyn:...