Amor En Cuatro Patas | Frerard

11. Y la colisión de tu beso lo hizo más difícil

>> Viendo a su esposo recostado en la cama se levanto con cautela, procurando no despertarle, la plática de hacia una semana con Ray le había servido para darse cuenta de todo el daño que le hacía las personas que más amaba. Para empezar estaba su pequeño hijo, Matthew, le prestaba muy poca atención y ya no jugaba con él y para colmo le había gritado haciéndole llorar. Después estaba Gerard, su relación se había enfriado y cuando por enojo e impotencia le grito a su hijo, este había salido en su defensa, alegando que tan solo era un niño, más su frustración estaba en los límites y sin escuchar razones comenzaron una gran pelea que termino cuando se atrevió a ponerle una mano encima a su Gee, en el momento simplemente había reaccionado por inercia mas cuando la mirada dolida de su esposo regreso a él mientras sostenía un mejilla afectada para después propinarle un buen golpe dejándole en el suelo se sintió una mierda. Ese día se había dado cuenta de todo lo malo que estaba haciendo y decidió arreglarlo. Fue hasta donde Ray buscando a su familia, buscando su perdón el cual no dudaron en darle.

Una semana después trataba de no llevar nada de trabajo a su casa, eso era lo que estaba complicando su vida familiar pero no podía evitarlo, ¡aquel sujeto estaba loco! No dejaba de molestarlo sin importarle que él tuviera el poder para despedirlo, además sospechaba que estaba haciendo algo ilegal.
Cuando termino de bañarse salió esperando encontrarse a su esposo dormido, como le había dejado, mas no era si, ya no estaba en la cama. Al entrar a la cocina el delicioso aroma del café recién hecho invadió sus sentidos
- Te hacia durmiendo
- No iba a dejar que te fueras sin desayunar... y menos hoy - miró entrañado al pelinegro ¿Qué tenía de especial ese día? - ¿Vas a llegar temprano? - asintió con la cabeza - ¿Me lo prometes?
- Si - vio los ojos de Gerard brillar como no lo hacían desde hace mucho. Sintió su pecho inflarse de felicidad cuando Gerard lo abrazo como hacía tiempo no lo hacía ¿era tan importante esa promesa?
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Su cabeza dolía, y mucho, estaba atado de manos y piernas a una silla, a su alrededor no había mas que una mesa con muchas botellas y mas alejado estaban unas jaulas con algo durmiendo en ellas. Sin tomarle importancia a ello comenzó a removerse, tratando de liberarse de sus ataduras. A su mente regreso un recuerdo, estaba discutiendo con el idiota de McCracken cuando le pego... y despertó así. El muy idiota le tenía amarrado en quiensabedonde
- Veo que ya has despertado, te dije que no te metieras donde no te llamaban
- ¿Qué mierda estas haciendo? Cuando logre liberarme lo lamentaras
- No lo creo... hasta donde todos saben estas en tu trabajo... además no vivirás por mucho - le sonrió retorcidamente
- Maldito hijo de... - pero el sujeto le propino un buen golpe en el estomago, robándole todo el aire para después darle otro en la cabeza, dejándolo mareado.

Ahora no podría llegar temprano como lo había prometido, de seguro Gerard lo odiaría cuando lo volviera a ver, porque lo volvería a ver, de eso estaba más que seguro; las palabras de McCracken era vacías y sabía con certeza que si le quisiera muerto ya lo habría eliminado. La inconciencia comenzó a apoderase de él, todo comenzó a volverse borroso. Por un segundo cerro los ojos viendo en su mente una fotografía que tenía en el escritorio de su oficina de Gee y Matty, recordando de repente porque era tan importante que llegara temprano. Era su aniversario <<


Abrió los ojos lentamente. Hacia una semana que vivía con su familia, de una extraña manera. Todos los días había dormido con Gerard, no de la manera que le hubiera gustado e igualmente jugaba con su pequeño. Desde hacía una semana no había recordado nada más y odiaba que pasara eso, no había dejado de recordar desde que había visto a Gerard casi morir y ahora, después de una semana había tenido un nuevo recuerdo, aunque este no le dijera mucho.


Si había algo de lo que debiera estar seguro era que ese tal McCracken había jodido su vida y que él no era precisamente un santo, pero ¿Cómo había terminado así? Con la ayuda de Darko habían ideado un plan que llevaría acabo desde ese momento, solo esperaba que funcionara.


Sintió a Gerard removerse, atrapado entre las cobijas de la cama. Gracias a su pelaje no las necesitaba, y agradecía que lo tuviera ya que estaba seguro que Gerard no le dejaría dormir con él bajo las mantas. Se levanto y sacudió, no sabía porque pero le agradaba hacer eso, sentir sus orejas moverse y pegar contra su cabeza era la cosa mas extrañamente genial del mundo. Una vez bien despierto y moviendo la cola se acercó a Gerard dándole un lengüetazo para despertarle
- ¡Te he dicho que no hagas eso! - replicó Gerard limpiándose la baba de su travieso perro. Frank únicamente comenzó a ladrar y a un par de vueltas sobre la cama para después bajarse e ir a despertar de la misma manera a Matty, solo que este no le recriminaba el dejarlo todo babeado

Después de haber despertado a su familia dio inicio a su plan, yendo a la habitación de Gerard por su objetivo "Debe de estar sobre ese buro café" Se alzó en dos patas tratando de alcanzar su objetivo. Cuando al fin lo logro con un golpe de su nariz le hizo caer en el suelo, por suerte no se había roto.

Vio la fotografía con mucho cariño, recordando aquel especial día en que se habían casado con el amor de su vida. Ambos llevaban un traje negro, el de él tenía una corbata roja mientras la de Gee era blanca. El traje hacía resaltar aquellos hermosos ojos verdes que Gerard poseía, se veía tan hermoso en esa foto, con aquella inigualable sonrisa y esa mirada verdosa llena de amor, el fondo era un verdoso bosque, era de esas fotografías en las que te ponen un fondo y ellos habían escogido una escena verde "Espera... ¿verde?"

Con emoción salió de la habitación y fue directo a la de Matty, este tenía un montón de carritos de colores ¡podía ver todos los colores! Regresó a su habitación corriendo encontrándose a Gerard saliendo, ya vestido, del baño. Su emoción era tanta que se arrojó sobre Gerard, haciéndole caer al alfombrado suelo mientras lamía su cara
- ¡Quítate de encima Punky! - trataba de alejar al perro de él, incorporándose, viendo como este daba brinquitos y ladraba - ¡Shhh! Despertaras a los vecinos... ¿Qué mosca te ha picado? - se arrodillo acariciándole y sonriendo ante lo mimoso que, a veces, solía ser su perrito.


Se levantó con una sonrisa para irse a la cocina y comenzar con su rutina, dejando a Frank celebrando hasta que recordó que tenía una misión pendiente. Tomó la fotografía con su hocico para ir con Gerard
- ¿Qué traes ahí Punky? - Matty le sorprendió rumbo a la cocina - ¡¿Es la foto de mis papas!? - exclamó el pequeño en un susurro para no ser escuchado - Dame eso o papá Gee nos regañará - trató de quitarle la foto mas Frank, aprovechando que era más fuerte que Matty, pudo quedarse con ella - No puedes jugar con eso Punky, es especial, ahora dámela - renovó sus intentos de quitarle aquella fotografía
- ¡¡Matty ven a desayunar!! - la voz de su padre le asustó, haciéndole soltar la foto cuando este se asomó - ¿Qué tanto haces pequeño? - trató de acercarse mas su pequeño no se lo permitió
- ¡NADA! Ya... ya voy - trató de sonar convincente mas por la mirada que su papá le dirigió sabía que no se lo creyó - Punky ensució el pasillo - fue lo único que se le ocurrió cuando vio a Gerard avanhzar hacia él "¿¡QUÉ!? Pero si no he hecho nada"
- ¡Oh!... ve a desayunar que se hará tarde, yo limpio
- ¡NO! Digo... yo lo hago.... Es mi mascota - le sonrió tratando de convencerlo de una vez para que se fuera a la cocina, no quería que viera que Punky estaba mordiendo esa fotografía. Gerard únicamente asintió y se fue, para su alivio
- ¡Nos meterás en problemas si no me das esa foto Punky! - le reprocho volviendo a batallar por la foto
- ¡Matty se hace tarde! - soltó un largo suspiro dándose por vencido, no le podría quitar la foto, solo esperaba que no le hiciera nada o se ganaría un boleto a la perrera cuando su papá Gee se enterara.



- ¿Ves a colores? ¿Pero como? - le interrogaba Darko. Hacia una hora que Gee y Matty se habían ido y ahora se encontraba contándole todo a su amigo, cuando llegara Gerard continuaría con su plan, solo esperaba que Matty no le obstaculizara su objetivo. Tenía que hacer hablar a Gerard, tenía que saber que había pasado con él
- No lo se, pero mira - dijo mostrándole la foto - Esta es de nuestra boda... ¿puedes ver la corbata roja de Gee y el fondo verde? ¡Fue un día maravilloso!
- ¿Verde? ¿Rojo? No sé de que hablas Frank... seguro te sientes bien?
- ¡Que si! ¡Estoy bien! ¿Por qué crees que pueda ver más colores que tu? Ambos somos perros...
- No lo sé, eres raro quizá... ¿no hay una foto donde estés tu solo? Tal vez se moleste si te ve mordiendo ese bonitomarco
- Ammm... Iré a buscar

Fue directo al cuarto de Matty donde, por suerte, encontró una foto donde solo estaba él. Una extraña sensación le embargo al contemplarse; tenía una gran sonrisa en esa foto y si bien recordaba, quien la había tomado había sido Gerard cuando eran novios... tenía tantos buenos recuerdos, había sido tan feliz ¿Por qué ahora era castigado? ¿Por qué había descuidado tanto a su familia, siendo que eran tan importantes para él? El sonido de la puerta abriéndose le distrajo y sorprendió ¿había regresado tan temprano? Salió de la habitación de su hijo y fue a la sala con su nuevo objetivo bien sujeto, encontrándose a Gerard sentado en el gran sillón con el portátil sobre su regazo.
- ¡Hola Punky! ¿Te sorprende verme tan temprano? - alzó la vista, que hasta ese momento se encontraba sobre el portátil, para ver a su perro frente a él con algo en su hocico - ¿Qué traes ahí? - Frank dejo su fotografía sobre el teclado del portátil, dejando a Gerard pasmado - ¿De donde lo tomaste? - pregunto alarmado y tomando la fotografía se levantó.

Frank no pensaba dejar escapar esa oportunidad, por lo que siguió a Gerard a su habitación donde estaba por dejar su fotografía en el buro cuando se percato de algo
- ¿Dónde esta la foto de...? - no continuó con su pregunta, se volteo encontrándose con un alegre Frank moviendo la cola, el cual al solo verlo huyo - ¡VEN ACÁ! - le siguió hasta la habitación de Matty.
En ella Frank sostenía la fotografía para después, cuando Gerard se acercó lo suficiente a él, dejarla en el suelo, señalando con su nariz su imagen pasada. Gerard le miro con duda, no comprendiendo muy bien que quería decir. Volvió a tomar la fotografía y salió corriendo por la otra.

Gerard simplemente le siguió, observando detenidamente sus movimientos, viéndole tomar la foto de Frank para señalarlo con la nariz de nuevo mientras aullaba quedamente "¡Vamos Gee! ¿Por qué no lo entiendes" Al final este se acercó lentamente pero sin mirarlo, su mirada estaba concentrada en la fotografía a sus patas
- Frankie - su el quedó susurro que dio Gerard para después sentarse en el suelo, junto a él. Por un momento le vio mientras se mordía los labios intentando contener sus sollozos, mientras, varias lágrimas ya habían escapado de sus ojos. Las limpió para después dirigirse a él - Mira Punky, él es mi Frankie - es nombrado sonrió internamente a pesar de que viera en aquel estado a su Gee, pero debía saber. Para sacarle más información apoyó su cabeza en los muslos y le miro, tratando de comunicarle que quería que continuara
- Mi Frankie - soltó un suspiro - Nos casamos cuando teníamos 22años... pero nos conocíamos desde niños. Es la persona a quien más he amado en mi vida, junto con Matthew. Lo adoptamos cuando llevábamos tres años de casados, él insistía en tener muchos perros peor yo quería un hijo... al final lo convencí - sonrió al tiempo que sus mejillas eran cubiertas por un tono rojizo "Y que manera de convencerme" recordó Frank moviendo su cola. Gerard suspiro una vez más al tiempo que varias lágrimas volvían a escapar de sus ojos - Hace unos seis meses y algo más... las cosas entre nosotros no iban del todo bien... llegue a pensar que... que me engañaba... pero lo dudo, siempre dijo amarme y siempre he creído en sus palabras, a pesar de todo - limpio sus mejillas, mas nuevas lágrimas volvieron a mojarlas - Hace... hace cinco meses... él... no regresó a casa... era nuestro aniversario - cada vez se le dificultaba hablar más - Pensé que lo había olvidado... y-y por eso se había retrasado... pero pasaban lasa horas y él no llegaba... ni siquiera al día siguiente llegó
Hizo una pausa viendo a la nada para después ver los ojos de la única creatura que le estaba escuchando, a la única con la que había hablado después de tanto tiempo de cómo se sentía - Ha pasada ya mucho tiempo y él no ha regresado... no se absolutamente nada de él... si esta vivo o... o si... si esta - encogió sus piernas haciendo que Frank quitara su cabeza, para así poder abrazarlas, abrazarse a sí mismo y tratar de consolarse, calmar un poco el dolor que desde hacia cinco meses no le dejaba en paz - Solo quiero que este bien...

"¡Aquí estoy Gee! Estoy bien y te cuidare, no debes de sufrir por mi" No sabía exactamente como consolarlo, lo único que se le ocurrió fue lamer las lágrimas de las mejillas de su Gee y después poner su cabeza en su hombro derecho
- Gracias Punky - sorbió su nariz - Me recuerdas mucho a él.... Tal vez debimos ponerte así - le acaricio la cabeza - ¿Pero sabes? Sé que esta bien... no sé como... pero él esta bien... y cuando regrese - soltó un largo suspiro acabando de limpiar todo rastro de lágrimas y con una pequeña sonrisa añadió - Cuando regrese lo castrare por dejarme solo y preocupado.


A pesar de tales palabras no pudo evitar sonreír internamente, sabía que cada una de esas palabras las decía con todo el amor que le tenía y sin ninguna mala intención, solo el anhelo de volverlo a ver, saber que estaba bien
- Bien - dijo Gerard levantándose por fin del suelo - Mira como pasa el tiempo... debo ir por Matty - Frank bajo la mirada y sus orejas, ya no quería separarse ni un segundo de Gee, ahora sabía parte de lo que había pasado - ¿Quieres ir conmigo? - como única respuesta recibió varios ladridos para después ser jalado del pantalón y del tenis para comenzar a caminar.