Llamando a tierra

Capítulo 18: Emma

Luego de que nos asignaran vigilantes, ellos nos condujeron a la casa que nos habían asignado, esta constaba de 2 habitaciones grandes, una para las chicas y otra para los chicos, cada habitación tenía un baño con ducha y había una sala de estar, la casa no tenía cocina porque al parecer hay un gran comedor donde todos en la comunidad comen juntos.

Al llegar, el primer lugar donde me dirigí fue el baño, para mi mala suerte al parecer Haiden y Becca también habían llegado directo a este, así que tuvimos que hacer fila.

-¿Qué piensas de este lugar?- preguntó Becca mientras esperábamos a que Haiden terminara.-Creo que es... Diferente- no sabía que palabra usar para describirlo y creo que esa es la que más se acerca.

-Diferente...- repitió Becca para ella misma.-Yo creo que es extraño, son las primeras personas que son razonables con nosotros, por un lado creo que es genial, pero por otro lado es un asco no conocer a nadie y que todos puedan ser una amenaza para ti- asentí.-Pero también es un asco ver morir a personas que quieres, saber que a cada paso que das estas en constante peligro, quizás este lugar nos pueda ayudar en esas cosas. Pero no podemos confiar en esta gente hasta que lo demuestren- me miró con una pequeña sonrisa haciéndome saber que pensaba lo mismo.

En ese momento Haiden salió de la ducha, vestía la nueva ropa que nos dieron y una toalla se enrollaba en su pelo mojado. Se encontraba levemente sonrojada por el vapor de la ducha pero la hacía lucir muy bella.

Becca entró en el baño y yo busqué a Amy, quien estaba sentada en una de las camas mirándome con esos grandes ojitos oscuros.
Me senté a su lado y la coloqué encima mío, empecé a hacer unos movimientos con mis piernas de modo que hiciera a Amy dar pequeños saltitos sobre ellas y comenzó a soltar tiernas carcajadas, eso me tranquilizaba y me hacía olvidar nuestros problemas.

Luego de unos 10 minutos, Becca aún no salía del baño y yo me quedé pensativa mientras oía los balbuceos de Amy, Haiden se acercó a nosotras, se sentó a un lado de la cama y observó a Amy con una sonrisa, al parecer, Amy causaba los mismos efectos que causa conmigo en Haiden.

-¿Quiéres tomarla?- le pregunté y ella accedió, la levanté y se la entregué con cuidado, ella la observaba con una gran sonrisa maternal, pero esta se fue borrando lentamente hasta convertirse en una mueca, quizás qué estará pensando.

Haiden's P.O.V:

Tomé a la pequeña en mis brazos, se sentía reconfortante pero me hacía recordar muchas cosas.

Flashback:

19 años atrás:
Estoy tan emocionada, no comprendo lo que pasa pero sé que es algo bueno.
Luego entra mi padre en mi habitación y trae algo pequeño en sus brazos, lo acerca a mí y puedo contemplar un pequeño bebé, una sonrisa creció en mi rostro y mis ojos brillaron.
-Es helmoso- hablé con dificultades ya que sólo tenía 2 años.
-Él es tu hermanito- me dijo papá y me dejó tomarlo en mis brazos con su ayuda, ya que era un poco pesado para mí.
Miré sus ojos cafés y su rostro perfecto, me di cuenta de que sólo lo había visto una vez y ya se había convertido en la persona que más quería.