Capítulo 18.

12 0 1
                                        

Me sentía completamente perdida, sucia, sabía que no era la mejor novia, pero hacía lo que estaba a mi alcance para que él sea completamente feliz. Tal vez era yo la que fallaba ahí, la que no encajaba en ningún lado y arruinaba todo, tal vez yo era la intrusa en todo este lío, tal vez yo me metí en su relación con Candela, Con Abby, Luciana, y más.

Había caminado hasta un pequeño muelle improvisado, habían varios chicos ahí, y un olor fuerte llamó mi atención: estaban fumando porro. Los miré desde lo lejos, observé cada movimiento de cada uno, me senté en una roca que había por ahí, mis pies me dolían horrores, había caminado por prácticamente una hora.

- ¿Quieres fumar? - dijo un muchacho a mi lado, éste me hizo asustar ya que no lo había escuchado llegar, estaba completamente perdida en mis pensamientos, que ahora mi mente, sólo pertenece a una sola persona.

- No sé fumar- respondí.

- Fuma.- dijo él, no lo pensé dos veces y fumé, me había fumado casi un porro entero y me sentía volando. Había perdido completamente la cabeza.

Ningún pensamiento que me dañaba se había cruzado por mi mente así que estaba bien, hasta que el chico preguntó:- ¿Qué haces a estas alturas de la noche caminando sola por el costado del Río? Es muy peligroso.

- Quise huir de mis problemas.- dije manteniendo la postura de niña firme, los parpados me pesaban y casi me costaba hablar, pero sabía que era efecto de la marihuana.

- Los problemas te perseguirán siempre, amiga.- dijo él riéndose.

- Lo sé, sólo que me siento tan agobiada que no sé que hacer, me siento en un pozo oscuro, sin fin, no tengo en donde dormir, en quien confiar, a quien confesarle mis problemas, no tengo nada, y odio eso, te juro..- en la última palabra rompí en llanto, y él me abrazó, el abrazo sólo logró que llore aún más, pero necesitaba descargarme.

- Oye, puede que me conozcas recién pero puedes confiar en mi plenamente, me gusta escuchar a las personas, soy bueno haciéndolo. Y no te preocupes, que al final siempre todo está bien. - lo escuchaba hablar, él tenia su mentón apoyado en mi cabeza mientras acariciaba mi cabello.

- Siempre termino arruinando las cosas, no es recomendable que te quedes a mi lado, no merezco ni la compañía de una rana.

- Nadie merece la soledad a pleno, las personas somos como somos y debemos aceptarnos, si algún defecto no nos gusta lo cambiamos, pero tampoco es para estar cambiando por la gente, las personas que nos quieren nos aceptaran tal cual somos, si les gusta bien y si no también. - dijo él, mientras miraba hacia adelante.- al final todo está bien, y si no está bien, es porque aún no es el final.

- He estado haciendo las cosas mal desde un principio, y yo creyéndome buena persona, cuando soy todo lo contrario.- le pegué una piña a la roca en la que estaba sentada.

- No te conozco, así que no puedo opinar eso, pero por lo que veo eres buena persona.-

- Las apariencias engañan pequeño.

Terminé la noche recostada debajo de un árbol, hacía muchísimo frío y lo único que llevaba puesto era una campera negra de jean y debajo una musculosa. Me había bajado la presión más de una vez en toda la noche, tenía hambre a pesar de que había comido una simple barrita de chocolate, no quería gastar el poco dinero que tenía en comida, quizá me servía para algo más.

Me dolía la nunca por la mala postura en la que me encontraba, me despierto asustada debido a una pesadilla que acababa de tener. Escuché un ruido como si pisaran las ramas esparcidas en el suelo.

Comenzaba a asustarme, eran más de las cuatro de la madrugada y estaba sola en un parque casi abandonado, era el lugar menos transitable para poder dormir, pero el más peligroso. El sonido de las ramas rompiendose se acercaba cada vez más a mí, y mi corazón latía con rapidez debido a la tensión del momento, un hombre corpulento y alto apareció frente a mí, su mirada esyaba fija en mi rostro, tenía una especie de arma en su mano, pero por la oscuridad no podía ver bien que es lo que tenía.

Amor enfermizo.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora