Cartas bonitas para la chica bonita

UNA SORPRESA UN TANTO EXTRAÑA (parte dos)

Salimos corriendo. Cuando estábamos apunto de llegar me frene en seco.

-¿Qué haces Marta? Vamos.
-Me da vergüenza. Hay mucha gente.
-Eso no importa.

Caminemos hacia la puerta que nos dijo.

-A partir de aquí vas tu sola. Suerte.

Vi flechas que daban a una especie de carpa pequeña. Sandra me dio unas palmaditas en la espalda, coji aire y entre donde las flechas señalaban.
Al entrar había una mesa con una caja y la abrí. Era una pista de donde tenía que ir.

Dirijete al lugar mas viejo de este parque, es alto y duro.

-¡El árbol! -grité.

Dejé allí la caja con la nota y salí de allí. Al salir no estaba Sandra, no había gente paseando ni coches aparcados ni pasando por allí, la gente que estaba comiendo en los bares no estaban y estos estaban cerrados.

-¿Qué a pasado aquí?

Me fui hacia donde estaba el árbol.

Si viniste hasta aquí es que eres lista y supiste que es el árbol. Ahora no te entretendré y ve al tobogán.

Corrí al tobogán. Cuando llegue cojí la pista.

Siento marearte. Aquí tienes un ramo de rosas que no se pueden comparar con tu hermosura. Y ahora ve al balancín.

Coji el ramo, era precioso y olia muy bien. Fui al balancín. Seguía sin ver a nadie, me estaba empezando a asustar.

Ya queda poco linda, pero toma aquí tienes un osito de peluche para que cuando lo veas te acuerdes de mi. Dirijete a los arbustos que hay casi al lado.

Coji el osito. No me cabía nada más en las manos. Me estaba empezando a cansar.

Se que estas cansada y para recuperarte aquí te dejo una caja de bombones. Ahora tienes que volver a la puerta principal hay tendrás tu ultima pista.

Casi no podía con todo pero me las apañe y fui otra vez al principio, supongo que es otra vez a la carpa esa rara. Me lo podría haber dicho antes que me canso, pero a merecido la pena.
Al entrar y ver de nuevo la mesa con la caja empezé a buscar la última pista.

-¡La encontré! Ah no que es la primera.

Coji la caja y le di la vuelta y hay estaba, la última pista.

¡Ya encontraste la última pista! Ahora solo tienes que ir al lugar más bonito de este parque, que como su propio nombre indica es el estanque.

Coji de nuevo todos los regalos y fui corriendo al estanque y... allí estaba Austin, con un traje y de espaldas. Que lindo va, y yo en zapatillas.

-¿Austin? Ho... hola -dije sonriente y temblorosa.
-Hola bella -dijo girándose.
-Me e divertido mucho y los regalos son preciosos.
-Todavía queda uno -dijo poniéndose delante mía.

Sacó algo del bolsillo.

-Se que te gusta cantar y... bueno uno tiene sus contactos. Aquí tienes dos entradas para la final de 'La Voz Kids'.
-¿¿¡¡QUEEE!!?? ¿¡En serio!?
-Si, aquí tienes.
-Muchisimas gracias -dije mientras soltaba los regalos y le abrazaba.
-Eso es poco, tu te mereces lo mejor -me dijo al oído.

Me separé de el y empeze a saltar contenta.

-Puedes ir con quien quieras. Ya tu te lo piensas.

¿Con quién voy? ¿Alberto? ¡Ni pensarlo! ¿Sandra? ¿Austin?

-Quiero ir contigo.
-¿Conmigo?
-Si. Eres quien a organizado todo esto por mi, has comprado todo esto por mi.
-Y a convencido a todo el pueblo por ti -dijo riendo.
-¿Qué?
-Que he convencido a todo el pueblo para dejar las calles desiertas.
-¿Cómo los convencistes, a todos?
-Eso no te lo puedo decir y a todo a todo el mundo no.
-¿A quién no?
-A Alberto -dijo Sandra mientras salía de detrás de unos arbustos que había allí.
-¡Sandra! ¿Tu sabías todo esto?
-Si -dijo riendo.
-¿Y tu hermano no tendrá curiosidad de saber donde estamos?
-No le dije nada, solo salí y punto.
¿Y quién nos asegura que no venga aquí a buscarte?
-Tu siempre poniendo pegas.
-Y con razón -dijo Alberto mientras saltaba la valla del parque.
-¿Qué haces aquí? -dijo Sandra un poco enfadada.
-Porque puedo. ¡Y tú, mocoso! Ven aquí que te voy a decir un par de cosas.
-¡No! -dije poniendome en medio de los dos. No os enfadeis.
-Como que no, solo te quiere alejar de mi -dijo Alberto furioso.
-¡Si no te importo! Que vas por hay besando a todas.
-¡Eso es mentira, yo solo te quiero a ti!
-A mi no me dijeron eso... -en sus ojos veía que decía la verdad.
-Te mintieron y ahora deja que le parta la cara a aquel.
-¡No! -grité mientras Alberto me cojía de los brazos y me quitaba de enmedio.

Alberto se abalanzó sobre Austin. Se calló al suelo y Alberto aprovechó para ponerse encima de el y empezar a pegarle. Yo corrí y coji a Alberto y lo tire hacia atrás.

-¡Austin! ¿Estás bien? Levanta.
-Hermano te has pasado. No deberías haber hecho eso.
-¡Lo siento, siento quererla, siento haberle pegado, lo siento! -se fue corriendo.
-Lo siento mucho de verdad Austin -dije llorando.
-No te preocupes -dijo mientras se intentaba levantar.
-Mi hermano a veces se pasa.
-¡Ah! -susurró Austin mientras se tocaba el labio.
-Te esta sangrando el labio. Ven a mi casa a que te cure -dije secandome las lágrimas.
-Bueno adiós -dijo Sandra.
-No, ven con nosotros y si puedes coje los regalos por favor.

Sandra cogió los regalos y nos dirigimos a mi casa. Lleguemos y Sandra dijo.

-Toma, aquí dejo los regalos, me voy que tengo que hablar con mi hermano.
-Quedate un poco si quieres.
-No. Aparte os quiero dejar solos para que hableis de vuestras cosas.
-Bueno, pues adiós.

Sandra se fue y Austin y yo fuimos al salon.

-Sientate, yo voy mientras a por algodón y agua oxigenada.
-No hace falta de verdad.
-Si, aun que sea dejame que te cure que tu has hecho demasiado.

Cogi las cosas que estaban en la cocina y volví al salón.

-Haber estate quieto.
-¡Ah!
-Lo siento, se que escuece pero eso es que te cura.
-Gracias.
-¿Por qué? Gracias a ti por soportar todo esto.
-A ti, por estar a mi lado...

Estábamos muy cerca, nuestras narices se rozaban.

-Bueno esto ya está -dije separándome de él.
-Me voy a mi casa, gracias de nuevo.
-No es nada. Si te quieres quedar un poco más.
-No, mi madre ya mismo se preocupará.
-Vale. Dejame que te acompañe a la puerta.

Le abrí y salió, ya iva a empezar a caminar cuando digo.

-Austin, espera.
-Dime.

Le abraze fuerte.

-Lo siento, de verdad por todo -dije al oído.
-No te preocupes.

Le di dos besos en la mejilla y se marchó.

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Aquí tienen su segunda parte.

Alberto la quiere de verdad...

Se que al final esperaban un beso pero no porque soy malota JAJAJAJAJ okno, mejor paro.

Dedicado a... ¡¡TODOS USTEDES QUE ME ANIMAN A SEGUIR!!

Se os quiere♥