Capítulo 9.

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Me desperté por el sonido del timbre, fui a ver de qué se trataba.
- ¿Paquete para la señorita Ritcher? - dice el repartidor
- Sí, gracias - digo
Tomo el paquete y voy a mi cuarto.
Lo abro y me encuentro con pelucas, fajas especiales una cejas postizas y un par de ropas.
Encuentro una nota:

"Señorita Ritcher:
Esto es para su primer día de trabajo, le espero en mi oficina a las 10:00 am. Aquí le entregaré su uniforme, mientras use ese par de ropa que le envié.
Carl Fletcher"


Hoy empiezo a trabajar, me recuerdo.
Voy al baño. Me desvisto, me coloco la faja para que no se noten mis senos, la peluca y las cejas falsas.
Me coloco una remera que dice I Love NY.
Y unos jeans, que me mandó el señor Carl.
Junto con mis converse negras.

Miro el reflejo de un chico en mi espejo, estoy muy diferente. No parezco yo.
Tomo las cosas necesarias y bajo a desayunar.
Mi hermano ya estaba despierto, sirviéndose leche y cereal.
- Hola Luke - digo sonriente
- Aaaa!!!- grita él
- Tranquilo, no te asustes - digo
- ¿Quién eres? - dice mirándome raro
- ¿Acaso he cambiado mucho? - pregunto
- No lo sé, no te conozco ¿cómo sabré si cambiaste? - dice agarrando un cuchillo.
Realmente yo le dije que hiciera eso si un extraño entra en casa, pero...ya le tengo miedo.
- Oye Luke, tranquilo, soy Silvia - digo tomando el cuchillo y abrazándole como de niños para que me reconozca.
- Ese perfume...y tu suave abrazo en forma de mono, ¿Silvia? ¿ En verdad eres tú? ¿ Qué te has hecho? - dice él confundido
- Sí, soy yo, tuve que hacer un cambio en mí - le respondo
- ¿Por qué? - pregunta más tranquilo
- Porque así podré conseguir trabajo, pero nadie lo debe saber, sólo te lo digo a ti porque es necesario que lo sepas, si Max pregunta por mí, dile que estoy en la otra ciudad y que ya he conseguido trabajo como limpiadora, si mamá pregunta di  que estoy en la universidad, y si otras personas preguntan sólo di que no estoy presente. Pero nunca digas nada al respecto. Si me ven en mi forma de hombre junto a ti, o en esta casa, diremos que soy un amigo de la familia nada más. Entendido? - digo  seriamente
- Sí hermana, digo, sí amigo de la familia..- dice riéndose.
Mi hermano es el único con quien puedo confiar, a pesar de que sea chico, es muy inteligente y audaz. Y siempre nos ayudamos mutuamente.
Así que le plancho la ropa del colegio y me dirijo hacia la parada de buses.
En media hora llego a la oficina, saludo a la recepcionista y subo al piso 15 para ir a la sala tres a la derecha.
Sentí como el ascensor se detenía, entonces a penas se abrió la puerta me dispuse a salir.
Pero como en la primera vez, choco con alguien.
- Disculpe, ¿me puede dar el paso? - digo sin mirar a la persona
- Lo siento este piso es para personal autorizado,¿ no ha visto el cartel? - dice esa voz que en estos pocos días se me ha hecho familiar. Max.
- Disculpe, no lo había visto. Debo ir al piso 15 - digo sonrojada.
- Me haces recordar a una chica que conocí hace unos días. - dice riéndose.
- ¿En verdad? - pregunto disimuladamente, mientras apreto el botón del ascensor para subir.
- Sí, si la hubieras visto, tan hermosa y especial. Nunca pensé que me enamoraría de alguien en tan poco tiempo. - dice él.
Apenas termina eso, y yo me atraganto con mi saliva, ¿en verdad se había enamorado de mí?.
- Oye, ¿estás bien? - pregunta, a lo que yo asiento- no sé por qué te he dicho eso, siento como si ya nos conocíamos antes y que te puedo contar lo que sea. ¿Te he visto alguna vez? - pregunta
- Lo dudo Señor...- Digo como si no conociera su nombre
- Oh, disculpe, no me he presentado, soy Max Fletcher, mucho gusto - dice sonriente
- El gusto es mío señor - le sonrío también
-¿ Y por qué te vas en el piso 15?- Pregunta
- Vengo por trabajo, debo hablar con el señor Carl.- respondo
- Ah, que bien. - se vuelve serio
No se dijo una palabra hasta llegar al piso correcto.
Él salió del ascensor, se fue rápido hacia otra oficina y yo me dirijí a la de Carl.
Golpeé la puerta.
- Pase - dice El Señor desde su despacho
Entro a la oficina.
- ¿Qué desea joven?- pregunta, no me reconoce, en verdad he cambiado.
- Señor, soy Silvia - digo riéndome
- Silvia! Wow, has cambiado de verdad! Estás irreconocible!! - dice saliendo de toda formalidad.
Yo sólo me río, él me pasa una caja y me indica el baño.
Me voy al baño, cierro la puerta con llave, aún no confío mucho en el Señor Carl. Aún no entiendo por qué es tan amable conmigo. Pero debo aprovechar la oportunidad.
Abro la caja y está un traje, una camisa blanca, un corbatín negro y unos zapatos.
Me cambio y salgo.
El señor me analiza con la mirada.
- Debo reconocer que te ves muy guapo de hombre, hasta puedes ser más lindo que mi hijo - Dice soltando una pequeña risa - Vamos. Hoy será un día muy largo para ti. Ah, y trata de que tu voz sea un poco más masculina, es decir, no uses términos que utilizan las chicas. - continúa él.
Yo asiento.
- Señor, ¿ahora cómo me llamaré? - pregunto
- Es verdad, ya me olvidaba de ese detalle, te llamarás Luke Skywalker - dice él
- Señor, ¿ a usted le ha gustado Star Wars verdad? - Pregunto con risas
- ¿Es demasiado obvio?- Yo asiento- entonces serás Leonardo...-mira el vidrio - Cristal, serás Leonardo Cristal. - continúa
- Está bien - Digo
- Ahora vamos ya, que se nos hace tarde- Me estira del brazo y me conduce hacia el ascensor para ir al restaurante.

Hombre Por Un Año  [SIN EDITAR]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora