Capítulo 32

73 7 0
                                    

Al terminar, por la ventana del taxi, veo a Max corriendo hacia mi casa.
-¿Qué habrá querido?-pienso
*Suena mi celular*
- Hola?- pregunto, es un número desconocido
-buenas, Señorita Ritcher, la universidad la ha expulsado por sus ausencias sin justificar desde hace más de dos meses. Lamento informarlo, pero es el reglamento y lo sabe. Suerte. Adiós- dice de una vez el director Lorenzetti, lo supe por su inconfundible voz
*se corta la llamada*

Lo había olvidado, jamás justifiqué. Yo también he renunciado a todo, quizá más adelante me dedique a ser chef.
- Luke, ¿por qué lloras?- pregunto conmovida
- Es que, no quiero dejar la ciudad, aquí están mis amigos, mi escuela, mis lugares favoritos. No quiero volver a empezar en otra escuela, seré el único niño de mi edad en el mismo curso de este año. ¿Por qué eres tan tonta como para acceder a esa idea de ser hombre? Ahora has arruinado nuestras vidas, por completo.- dice irritado, me da la espalda y se recuesta por la ventana

Tiene razón, he sido tonta, pude haber pensado otra forma para ayudarlos económicamente. Yo y mi ansiedad siempre me juegan en contra.
Estoy cometiendo una tremenda estupidez. Mi cobardía tampoco me puede ganar.
- Pare el taxi!!- grito de repente, tan fuerte que asusté al chofer e hicimos un trompo.
- Vamos de regreso, tengo una idea- también es una locura lo que haré ahora, pero podría arriesgarme para que mi hermano sea feliz dentro de todo...

Dos horas después...

-Pare en la siguiente calle- ordeno al taxista
-Esta no es nuestra casa- dice Luke
- Pues no, es el de una vieja amiga-
Toco el timbre y espero unos minutos.
Lo vuelvo a tocar, escucho pasos apresurados, abre la puerta.
- Hola Angie!- saludo contenta
- Hola Silvia- saluda con sonrisa fingida
- Necesito tu ayuda, mientras venía para acá mi abuela llamó, me dijo que mañana tendré una entrevista de trabajo. Necesito que Luke cumpla con su año escolar, no es buena idea cortarlo en etapas finales de exámenes y para ello, te pido que lo cuides. Te lo imploro. - explico
-Y por qué no lo dejas con tus padres?- dice arrogante
- Papá falleció y mamá está con mi abuela paterna en un hospital. Me puedes ayudar?-
- Mmm. Por cuánto tiempo?-
- Por dos meses aproximadamente-
- No puedo, es mucho tiempo-
- Ay vamos Angie! Tú no haces nada. Dependes de tus padres a los 27 años. No trabajas, ni siquiera estudias. Por qué razón no podrías dejar tu flojera un lado y cuidar al hermano de tu amiga desde hace años?-
- Simplemente no puedo. Adiós- sin decir más cierra la puerta en mi cara.
Suspiro y me apoyo por la pared. - Quién era hija?- pregunta la madre, logro escuchar perfectamente.
- Era esa chiquilla de papi. Te acuerdas?- responde Angie
- Sí sí. Qué quería?- vuelve a preguntar la madre
- Quería que cuidase a su hermano. Cómo cree esa chica que le haría un favor? Siempre he fingido, jamás me interesó, la odié y lo sigo haciendo. Siempre se quiere hacer la víctima. Es una ingenua al igual que su estúpido padre. Ah por cierto, falleció!- se burló de mí
Algo que nunca había experimentado se apoderó de mí. Una sensación de calor en aumento, mi sangre hervía y por poco tiraba humos por la nariz.
Toqué el timbre, varias veces con rapidez.
- Qué quie...- no le dejé terminar
A penas abrió la puerta, mi puño se estrelló por su cara, y mi codo por su estómago. Estoy en contra de la violencia, pero no me iba a quedar así nada más.
- No soy ninguna ingenua. Traidora desconsiderada!- grité
Miré a mi hermano, estaba asustado, escondido detrás del poste.
- ¿Qué sucede?- pregunté exhalando e inhalando de manera rápida
- Señorita, está arrestada- dice alguien esposando mis manos
- No! Mi hermano! No puede ser!- por mi mala suerte un oficial vio lo sucedido
- Descuide, quedará en manos del gobierno hasta que se decida lo que se hará con usted- dice, empujándome para que ingrese a la patrulla
- Luke! Cuidate! Saldremos de esta! Te quiero!- grito por la ventanilla, lágrimas caen desesperadamente por mi rostro.
La primera vez que defiendo mis derechos y los de mi familia de una forma más impulsiva y ya me llevan presa.
Ahora definitivamente arruiné todo, no puedo ser más tonta de lo que soy.

Hombre Por Un Año  [SIN EDITAR]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora