Un encuentro inesperado

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Loki estaba en la tierra tratando de no matar a nadie, lo cual le era algo difícil, pues a veces las
personas pueden llegar a ser fastidiosas, y algunas insoportables.

- Pasare unos días aquí, quizá pueda divertirme un rato.

Se ve una habitación color rosa, con posters de anime, suena la alarma del despertador, la joven que duerme apenas abre un ojo, y al ver la hora, sale disparada de la cama.

- ¡No puede ser! ¡se me hizo tarde!

Como puede se da un baño, se viste tan rápido como puede, y sale corriendo hacia el instituto
donde estudia, en su camino golpea a uno que otro peatón que va muy lento.

- Lo siento, lo siento. – dice mientras corre a toda prisa

En su carrera se topa con un joven ojiverde con quién se estrella, solo se disculpa con un – Lo siento, lo siento – y sale corriendo nuevamente sin detenerse. Él joven solo se queda mirando como continua con su carrera.

- Pero que chica tan extraña.

Said se encuentra reunido con Chris y Nick, dos amigos suyos que viven en la misma casa.

- Said, dime que no tuviste nada que ver con el incendio de la biblioteca – pregunto Chris

- Amigo mío, ese no es tu asunto.

- Entonces si tuviste que ver – replico Chris a Said

- Era necesario, solo les diré eso.

- Chris ya déjalo, nadie salió herido, eso es lo único que importa, Said no hagas algo así de nuevo.

- Descuiden, no lo haré

Antes de comenzar las clases Said habla con su amiga quien entra al salón justo a tiempo.

- ¿Se te hizo tarde? Eso es extraño.

- Ya lo sé, mi despertador se descompuso, fue horrible.

- Kimberly debiste llamarme, habría ido por ti.

- Bueno pero llegue, además hoy es el último día aquí, y vacaciones.

- ¿Vacaciones? Yo diría tiempo para pensar en nuevas historias, estuve pensando y me iré a
las pirámides de Egipto, ¿y tú que harás Kim?

- Me quedare aquí, no tengo planes para salir. Quisiera descansar, relajarme.

Por la tarde Kim caminaba hacia su casa, las calles comenzaban a oscurecer y las luces de los
establecimientos la iluminaban, comenzó a sentirse frío que anunciaba una tormenta, aceleró el paso para no mojarse, pero no logro pues apenas pudo refugiarse en un establecimiento, algunas otras personas que caminaban también llegaron allí, Kim esperaba que la lluvia se calmara para poder ir a casa, pero el agua estaba cada vez más fuerte, eso la preocupo un poco.

- Hay no… ¿qué voy a hacer? ¿Cómo llegare a casa? – pensaba

- No se quitará, por lo menos hasta mañana. – le dijo un joven que está detrás de ella.

- Yo espero que sí, tengo que llegar a mi casa, o mi familia se preocupara.

Él joven la miró y la analizo, recordó que era la chica extraña que choco con él por la mañana.

- Vaya… eres tú – dijo el joven ojiverde a Kim

- ¿Cómo?

- Sí, eres la chica que llevaba prisa en la mañana, me golpeó y salió corriendo.

- Lo siento, se me hacía tarde, discúlpame no fue mi intención.

- Descuida. ¿Cómo te llamas?

- Kimberly, pero mis amigos me dicen Kim, ¿y tú?

- Loki, vengo de Asgard.

- Sí claro. – al ver que hablaba en serio, se quedó sorprendida y apenada al mismo tiempo –
vaya, eso no me lo esperaba. ¿y porque estás aquí?

- Vacaciones, así es como dicen ustedes, pasare unos días aquí.

- ¿Tienes donde quedarte?

Sentimientos que TrasciendenDonde viven las historias. Descúbrelo ahora