Sentimientos que Trascienden

El beso de Thranduil

Después de saber que Loki era el impostor que se hizo pasar por Kim, Thranduil estaba más decido a no dejarla, él sabía que como la reencarnación de Fairiel, Kim posiblemente sentía lo mismo por él, solo que Loki impedía que lo recordase, tenía que recordarle esos sentimientos que tenía de alguna forma u otra.

Kimberly se sentía cada vez más segura de querer estar siempre con Loki, no importaba si solo
eran amigos, lo único que quería era permanecer a su lado. Con Thranduil era diferente, él era
hermoso, era natural que le gustara, eso la confundía un poco, especialmente porque él había dicho que se parecía a Fairiel, su esposa fallecida, Lenni le conto que era la reencarnación de ella, pero Kim no estaba segura, porque si ese fuera el caso, porque no sentía con Thranduil lo que sentía por Loki.

Loki se había enamorado de Kim, pero no quería reconocerlo, aunque el hecho de decirle que la protegería, era como haberle dicho que estaba enamorado de ella, necesitaba aclarar las cosas, así ella no pensaría que él sentía lo mismo, tenía que alejarse un poco, el solo hecho de sentir celos al verla con Thranduil le molestaba, el no solía ser así, especialmente con una humana.

Thranduil le pidió a Kimberly que se vieran en el bosque, necesitaba decirle algo de suma
importancia, ella sospechaba sobre la propuesta que le había hecho, pensó que ya era tiempo de darle una respuesta, pues sabía lo que sentía por él. Cuando llegó, Thranduil se encontraba frente al árbol del tiempo, Kimberly lo noto pensativo.

- Hermoso día, majestad – dijo Kim

- No más que tu presencia – dijo galante

- ¿Sucede algo Thranduil? ¿Qué es eso tan importante que tienes que decirme?

Kim se colocó a lado de Thranduil, quién observaba el árbol, le dijo en tono suave, y algo nostálgico.

- Kim, han pasado cientos de años – dijo Thranduil

- ¿De qué hablas? ¿En qué estás pensando? – pregunto curiosa Kim

- Hace mucho tiempo yo… perdí a Fairiel en una batalla con los orcos, ella significaba todo para mí, su sonrisa podía hacerme olvidar las cosas malas que había en el mundo, desde que nos conocimos… supimos que éramos el uno para el otro.

Thranduil se volteó con Kim, la miró a los ojos, su mirada era tierna, reflejaba un amor puro, y le dijo.

- Kimberly… siento lo mismo cuando te veo, me enamore de ti, de Kimberly no de Fairiel, quiero que estés a mi lado, no tienes idea de cuánto te amo – Se acercó a Kim, la abrazó, y le dio un beso en los labios, ella se sentía como en otro mundo, aquel beso era tan tierno, tan suave, que por un instante sintió que el tiempo se detuvo, Thranduil dejó de besarla y nuevamente la abrazó, mientras le decía.

- Lo que más deseo es que permanezcas conmigo para siempre, no quiero alejarme de ti.

Esto hizo que ella no le confesara lo que sentía por Loki, no era un buen momento, pero ese beso,
ese beso le removió los sentidos, no sabía que era realmente. Quizá por ser la reencarnación de Fairiel tenía los mismos sentimientos por Thrandui que habían despertado, ella correspondió al abrazo de él, ambos se quedaron abrazados.

Loki los observaba de lejos, sus ojos se cristalizaron, sintió como si algo dentro de él se rompiera, Kim le había contado sobre Fairiel y Thranduil, como era su reencarnación era natural que ella tuviese los mismos sentimientos por el elfo. Al verlos juntos no sintió esos celos que normalmente tenía, se veían como una pareja enamorada, como si sus almas separadas por un trágico destino por fin se habían reencontrado, Loki estaba triste pero no podía hacer nada, habría sido una tontería. Así que se fue de aquel lugar.

A lo lejos unos ojos observaban.