Capítulo 11 "¡Un sueño hecho realidad!"

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CAPITULO 11 "¡UN SUEÑO HECHO REALIDAD!"

N A R R A  M I L I

Dos días habían pasado desde que me enteré aquella trágica noticia. Apenas, cuarenta y ocho horas habían pasado desde que Amy y Carlos perdieron el bebé.

Cuarenta y ocho horas desde que dejaron de ser padres.

Todo pasó tan rápido que ya era lunes y me estaba preparando para mi primer día de clase. El primero de tantos otros. El primero del último año.

Ya arreglada, bajé al piso inferior, donde me recibió el aroma a café y a tostadas quemadas. Scott se encontraba preparando el desayuno. De eso estaba segura.

—¡Buenos días! —lo saludé, con un beso en la mejilla cuando entré en la cocina.

—Buen día, ¿cómo te has levantado?

—Bien —contesté, sentándome en una silla—. ¿Y vos?

—Bien —dijo mientras me servía una taza de café—. ¿Cuánto de azúcar?

Me parece que el que se había levantado con mal humor era mi padre.

—Dos cucharadas.

Scott se sentó en una silla enfrente de mí, después de colocarme las dos cucharadas.

Observé cada una de las caras de Scott mientras miraba su celular.

—Apúrate que vas a llegar tarde en tu primer día —dijo entre sorbo y sorbo de café.

—Bien. ¿Me vas a llevar?

Asintió con la cabeza.

❀❀❀

Primer día de clase. Primer día ante aquel edificio cuadrado y amarillo. En ese lugar iba a pasar más tiempo que en mi casa, de eso estaba segura. Lo que no me hacía feliz era que este era el primer año, después de cinco, que empezaba las clases el día que correspondía.

En Argentina pasa algo particular; las clases siempre empiezan uno o dos días después de lo previsto. ¿Por qué? Por los paros que hacen los docentes para cobrar lo que merecen. Lo que a mí concierne, no deberían darle ya que algunos profesores no enseñan nada.

En vez de estudiar, ¿por qué no nos enseñan a cómo llevar la vida? Hay cosas que no enseña el colegio que debería enseñar y hay cosas a las cuales le da demasiada importancia.

Tenía miedo, pero miedo de verdad. Mucho miedo. Había algo allí que me aterrorizaba. Sabía lo que era; nueva escuela, hacer nuevos amigos, nuevas personas que se rían de ti, todo es nuevo.

Eso no lo soporto. ¡No me gusta lo nuevo!

Con todo el miedo encima me aventuré. Me animé a entrar a aquella institución.

Cuando entré miraba a todo el mundo. No conocía a nadie. Ellos hacían como si no existiera, eso fue bueno.

El timbre sonó. Primer clase, aquí vamos.

❀❀❀

Era la última clase. A cada minuto miraba la hora. Quería que ese día se terminara YA. No lo soportaba más.

Encima, todos los profesores en la primera clase de su materia, hablan y nos damos a conocer. Ya he dicho mi nombre como cinco veces a cada profesor. Parece que Mili es un nombre difícil de recordar.

Primero tuvimos Filosofía, dos horas, estuvo pasable. Después, Antropología, dos horas. No lo soporté. Y por último, tres horas de Historia. Me gustaba Filosofía e Historia, lo que no me gustaban eran las primeras clases. Me molestaba presentarme. Ya todos sabían que era la nuevita del curso.

Amor ConfusoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora