Unos días después de que la familia real del Norte llegase a su casa después de la expedición al Archipiélago de los Mil Naufragios, Gemma subió a una torre de su palacio de hielo. Era la torre en la que se conservaba la tumba de Jeremy, donde su cuerpo se conservaba congelado por la magia de Gemma.
Gemma, recordó a su amado al ver tan feliz a su hermana Alba, que se había reencontrado con el amor de su vida, y por eso tuvo la necesidad de verle. Empezó a llorar apoyándose en la tumba y atraídos por los llantos de su madre subieron Meijia e Iván. Al subir vieron que de las lágrimas de Gemma y el cuerpo de Jeremy se empezaron a crear tentáculos negros con cristales de hielo. Cada vez crecían más y Gemma no podía alejarse de la tumba. Cuando los tentáculos chocaron con las paredes de hielo el palacio empezó a destruirse. Iván y Meijia intentaron salvar a su madre pero al ver que era imposible sacaron a todos los sirvientes del palacio.
Esta situación tan caótica llamó la atención de un joven adorador de cuervos que preguntó por la reina. Iván y Meijia le comentaron que estaba en peligro, así que éste decidió ayudar.
El joven adorador de cuervos conocía algo de magia, algo que aprendió de los hechiceros de su antigua tribu. Con sus poderes aumentó el tamaño de su cuervo con el fin de que éste le elevase hasta la torre donde la reina se encontraba. El joven sobrevoló el castillo, y al ver temblar a Gemma rodeada de miles de tentáculos oscuros decidí separarle de la tumba lanzándole una bomba mágica. Ésta consiguió separar a la reina de la tumba y los tenebrosos tentáculos se esfumaron. El joven entró por la ventana y auxilió a la reina. Su nombre era Wladimir, procedente de los adoradores de cuervos del archipiélago de los mil naufragios. Él y su hermana, Irene La Endemoniada huyeron de allí antes de la guerra, y decidieron ir a vivir al Norte.
Gemma sintió que aquel joven que le había salvado la amaba, y ella empezó a sentir lo mismo. Gemma entendió que debía rehacer su vida amorosa, estableciendo su relación con Wladimir. De momento ambos se conocieron un poco mejor, pero con el tiempo iniciarían algo más que una amistad.
Iván y Meijia subieron a la torre y abrazaron a su madre, después dieron su agradecimiento al joven Wladimir. Wladimir cada día aparecía más por el palacio, hasta que un día, la reina hizo pública su relación. Se casaron y Wladimir se convirtió en rey del Norte, aunque en caso de que Gemma muriese o relegase de su poder como reina el Territorio del Norte lo heredaría Iván.
Pasó un tiempo y el embarazo de Gemma se hizo oficial, iba a tener una nueva niña, la tercera hija del Norte. Durante el embarazo Gemma poseía más poderes que antes, no había nadie que pudiese mentirle porque podía ver la verdad. Los expertos en embarazos le dijeron que eso se debía a que su hija había desarrollado rápidamente su poder. En cuestión de meses le informaron a Gemma de que no iba a tener una hija, sino que iba a tener dos nuevas princesas del Norte. Iván y Meijia cuidaron de su madre junto con Wladimir, y un día Gemma notó que sus hijas ya iban a nacer.
Fue un parto complicado, en el que ni Iván, ni Meijia, ni Wladimir sabían como ayudar. Gemma parecía muy enferma, y hubo un momento en el parto en el que un ojo se le congeló. Eso significaba que una de las hijas poseía el poder del hielo, como su madre. El dolor que padecía la reina era inhumano, y segundos después de que se le congelara el ojo, el otro ojo se le puso blanco. Gemma gritó obligando a sus hijas, que aun no habían nacido, tranquilizarse. Como por arte de magia le hicieron caso y Gemma recuperó fuerzas. La primera en nacer se llamó Sara, y la segunda se llamó Tania.
Sara, la que supuestamente había heredado el poder de su madre, al ver a su tía Alba quemó una estatua de hielo, y al ver a su tía Guiomar creó una flor blanca en medio de la sala. En realidad sus poderes eran el de replicar momentáneamente el poder de una persona, el de ver la verdad, y el de crear ilusiones ficticias.
Tania, la menor, fue la responsable de que durante el parto, a Gemma se le pusiese un ojo blanco. Su poder era el de controlar a las personas y cuando lo utilizaba se le ponían los ojos blancos y perdía el control de su cuerpo. Si la conexión establecida entre Tania y la persona a la que controla no llegaba a producirse correctamente, su cuerpo dejaba de permanecer estático y sufría espasmos que le hacían saltar por los aires.
Sara y Tania, al ser hermanas gemelas, desarrollaron también una especie de conexión mágica entre ellas que les permitía hablar telepáticamente de vez en cuando. Esta conexión también les provocaba tener empatía la una con la otra. Otra de las peculiaridades de sus poderes era que no podían utilizarlos la una contra la otra porque eran inmunes.
Las gemelas se criaron acompañadas de su madre, su padre y su tía en el palacio real, y aunque sus hermanos estaban independizados se veían en numerosas ocasiones, aunque es cierto que Meijia no compartió tanto su tiempo con ellas como lo hizo Iván.
La hermana pequeña de Wladimir, Irene, desde que huyeron del archipiélago de los mil naufragios se volvió loca y era difícil mantenerla a raya. Hubo una temporada en la que Gemma mantuvo la paciencia, pero si no llega a ser por el poder de Tania Gemma hubiese acabado con ella. Desde que Tania supo utilizar su poder en Irene, apodada La Endemoniada, todo se calmó, e Irene pudo llevar una vida normal como hermana del rey del Norte.
Así fue como todos los territorios se volvieron a unir dejando de lado las guerras, permitiendo que Gemma pasase más tiempo con sus hijas y s marido, que Guiomar instruyese a la futura reina del Medio, y que Alba y Lidia pasaran más rato en familia junto al rey del Sur.
CONTINUARA...
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Historias Patunas
FantasyPrimera parte de una historia cargada de magia, y de fantasía. Cuenta la historia de la familia real de un reino mágico en el que aves y personas son un mismo ser. Las múltiples situaciones que viven durante su reinado son relatadas teniendo en cuen...