Todo era una locura, las enfermeras corrían de un lado a otro. La curiosidad por saber que estaba pasando comenzaba a ganarle al sentido común.
Sentía como la culpa y el miedo se apoderaban de mí. Aun podía recordar las malditas palabras que habían salido de mi boca y habían causado todo esto. Necesitaba saber que estaba pasando. Así que sin pensarlo camine hacia la sala en donde estaba Alex.
Al dirigirme hacia allá pude sentir a alguien jalárme hacia atrás. Al mirar quien era pude ver a Max.
- Qué haces?
Dije alejándome de ella.
- Tienes que dejarla ir Nathan..
- Hablas de Alex?
Dije mirándola confundido.
- Los doctores creen que es muy tarde para la transfusión de sangre.. solo hay que dejarla ir..
Dijo apoyando su mano en mi hombro.
- No, no..
Dije caminando hacia la sala, al entrar pude ver al Doctor cerrándole los párpados a Alex con su mano. Su rostro estaba pálido y sin vida.
- Alex..
Dije muy bajo.
- Señor Prescott usted no puede estar aquí!
Dijo el Doctor llevándome con sus manos hacia atrás.
- Suélteme!
Dije alejándome de el con mi mirada aun fija en el cuerpo sin vida de Alex.
- Vamos Nathan..
Dijo Max poniendo sus manos en mis brazos.
- No Max, no puedo dejar esto así.
Dije levantando mi mano con la intención de retroceder el tiempo y revertir esta pesadilla, pero fue inútil. No pasaba nada.
- Qué hace señor Prescott?
Dijo el Doctor mirándome extrañado.
- No, no resulta Max..
Dije mirándola con pánico.
- Quizás sea una señal, tienes que dejarla ir..
Insistió Max mientras que el doctor nos miraba confundido.
- No puedo Max, mi hija necesita tener una madre.
Dije fijando mi mirada a la de ella.
- Quieres.. que lo intente?
Dijo Max tomando mi brazo.
- Por favor..
Dije buscando su ayuda. Por lo que Max levanto su mano e intento retroceder en el tiempo.
De pronto ambos pudimos sentir como la realidad en la estábamos cambiaba, nuestros cuerpos seguían allí pero todo lo que estaba a nuestro alrededor ya no.
Al volver a estabilizarnos en el tiempo pude ver como la maquina que marcaba las pulsaciones de Alex estaba funcionado y marcaba sus signos vitales nuevamente.
Al mirar a Max pude notar que estaba muy pálida, su nariz sangraba y apenas se sostenía sobre el marco de la puerta.
- Te sientes bien Max? estás sangrando.
Dije acercándome a ella.
- Estoy bien..
Dijo Max limpiando con la manga de su polera la sangre que salia de su nariz. De pronto ambos pudimos escuchar a Alex tosiendo, por lo que nos acercamos a ella de inmediato.
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Sigues Siendo Mi Obsesión (Caulscott fancic, 2da parte de Eres mi obsesión)
Fanfic"Aunque pase el tiempo, aunque todo este resuelto en mi interior sigo necesitando tu calor, tus besos al despertar. Me gustaría pensar que simplemente eres una obsesión que vive en mi cabeza, pero como le explicó a mi corazón que eres una obsesión q...