Capítulo 21: Votos de amor

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Ya había pasado un año, exactamente un año desde la muerte de Alex. Un año desde que Max y yo decidimos formar una familia. Las cosas no habían sido fáciles, pero juntos habíamos sabido luchar contra la adversidad.

Junto a Max y Alice hicimos un viaje repentino a Portland para recordar el día en que Alex nos dejo para siempre, fuimos a dejarle flores a su sepulcro. Era duro pensar que el mismo día en el que ella había muerto había sido el mismo día en que nuestra pequeña había nacido.

Alice empezaba a parecerse mucho a ella, al mirar su ojos podía encontrar la mirada de Alex en ellos, pero además Alice comenzaba a parecerse a Max, aveces podía llegar a ser retraída y extrovertida a la vez. Tal como lo era mi futura esposa.

Me sorprendió de forma grata que la primera palabra de Ali (como le decíamos de cariño) fuese mamá. Así llamó a Max y así lo ha hecho hasta ahora. Alice sabe que ella es muy afortunada al tener dos madres. Desde su primer año de vida supo que era así, una que estaba aquí con ella y otra que la cuidaba desde el cielo.

Junto a Max hicimos un viaje repentino a Los Angeles, le dije que tenía algunas cosas que atender allí. Cosas de trabajo, pero en realidad le tenía preparada una sorpresa. Por lo que dejamos a Ali junto a Chloe y tomamos el primer vuelo disponible a Los Angeles.

Al llegar nos dirigimos directamente al hotel donde había reservado una habitación, Max no se había sentido bien durante el vuelo, había sufrido de nauseas durante todo el camino hacia acá. Por lo que al llegar a la cuidad solo quería descansar. Y así lo hizo, ya era de mañana y seguía durmiendo como si no lo hubiese hecho en siglos. Se notaba que estaba muy cansada. Quizás era por la carga de ser madre, que aunque fuese algo innato en ella, no significaba que no la agotara, por lo que la deje dormir. Pasado los minutos me dio ganas de ir al baño, así que delicadamente quite la mano de Max de encima de mi pecho, me levante de la cama y me dirigí hacia allá.

- Dónde vas?

Pude escuchar de pronto, era Max su voz sonaba muy baja debido a que aun seguía durmiendo.

- Al baño.

Le respondí mirándola de reojo.

- Sabes, me despertaste.

Dijo Max escondiendo su rostro en la almohada.

- Lo sé, lo siento. Puedes tratar de retomar el sueño?

Dije sentándome en la cama mientras acariciaba su cabello con mi mano.

- Lo intentaré..

Me respondió Max levantando su cabeza dándome una pequeña sonrisa.

Por lo que deje que siguiera durmiendo, pero fui inútil, ella no pudo retomar el sueño. Así que después de ir al baño pedí desayuno a la habitación, pedí huevos y tostadas. El desayuno favorito de Max, pero al llegar ella no quiso comer. Dijo que el desayuno le provocaba náuseas, hasta que el olor le provocaba asco por lo que prefería no comer.

De pronto Max se levantó repentinamente de la cama y corrió al baño, por lo que fui tras ella. Ninguno de los dos tenía buenas experiencias con los baños, así que corrí lo más rápido que pude. Al llegar al baño la encontré vomitando, por lo que tome su cabello para evitar que se ensuciara.

- Amor, estás bien?

Dije mientras acariciaba su espalda con mi otra mano.

- Si, lo estoy..

Me respondió mientras se levantaba del suelo y tomaba una pedazo de papel para limpiarse la boca.

- Hablo en serio, me preocupa que estés así.. ya no falta nada para nuestro matrimonio, no quiero que estés así en nuestro gran día.

Sigues Siendo Mi Obsesión (Caulscott fancic, 2da parte de Eres mi obsesión)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora