Dream a Little Dream

Capítulo 3

Cuando Scott se reunió con Stiles a la entrada del instituto, después de haber recibido 100 mensajes pidiéndole que se vieran antes de clase, tuvo claro que algo serio pasaba. Sobre todo al ver que su mejor amigo estaba más nervioso de lo normal: A diez metros de distancia podía notar su corazón acelerado y cómo era incapaz de dejar las manos quietas.

En teoría, Stiles le había dicho que la última crisis ya estaba superada. Que ya no tenía problemas para despertar cuando estaba soñando, y que sobre todo había recuperado su capacidad de leer estando despierto.

Pero estaba claro que algo más le preocupaba.

El nuevo Alpha de Beacon Hills aparcó la moto y se reunió con Stiles en uno de los bancos que había a la entrada del instituto. Todavía no habían empezado a llegar los alumnos, y Scott intuyó que prefería que hablaran al aire libre... De lo que fuera que quería que hablaran.

- ¿Estás bien? – preguntó nada más sentarse a su lado.

- No estoy del todo seguro... - explicó Stiles un tanto nervioso - Quería saber si has vuelto a tener problemas con... Ya sabes. ¿Tu "actuación" como Alpha?

- ¿Te refieres a si puedo transformarme y volver a ser humano sin problemas?

- Sí.

- Sí – asintió Scott, más que aliviado – Todo va bien ahora.

- Oh. Eso es... Estupendo.

- Me parece que no es lo que querías oír.

- No. Quiero decir, sí. Pero... Pero no es mi caso.

- ¿Sigues confundiendo realidad con sueños?

- No. Bueno, no exactamente. Ya no tengo dudas cuando estoy despierto. Ahora mismo sé que estoy despierto – señaló a su alrededor – Y puedo leer perfectamente.

- ¿Pero?

- Pero estoy teniendo una serie de sueños y...

- ¿Son pesadillas?

- ¡No! – negó al tiempo que soltaba una risita tonta – Créeme, es todo lo contrario a una pesadilla.

- Entonces qué problema hay – preguntó, mirando de reojo la mano de Stiles y que no dejaba de apretar su rodilla.

- Supongo que ninguno pero... - tragó y miró a todos lados, por temor a posibles oídos curiosos – Pero está empezando a ser más común de lo que pensaba. Como si fueran sueños recurrentes.

- Pero dices que no son pesadillas. Con qué sueñas entonces.

Stiles se quedó callado unos segundos, indeciso.

Sabía que aquella sería una de las primeras preguntas que Scott le haría.

Pero no por ello sería fácil de responder.

- Verás. Es que esos sueños tienen que ver con... Ya sabes – entrecerró un poco los ojos – Cierto amigo común que...

- Oh – por fin comprendió – Te refieres a Derek.

- Sí – susurró - Y por favor, baja la voz – miró a todos lados con pavor.

- Pero tú siempre sueñas con Derek – rió Scott, sin bajar la voz al saber que no había nadie cerca – No hay nada de raro en eso – puso una mueca entonces – Ni en que luego me los vengas contando como si me interesara.

- Ya – tuvo la decencia de sonrojarse – Pero en este caso es distinto.

- Por qué. ¿Has soñado que te daba calabazadas? – volvió a reír – Eso si que es triste, tío. Incluso en tus sueños pasa de ti.