Capítulo 7

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Una semana fue todo lo que necesitó para comprender que Scott tenía razón.

Una semana en la que no dejó de soñar con Derek Hale cada minuto que dormía... Lo que le convertía en un auténtico zombie cuando volvía al mundo de los vivos.

Al principio, aun sabiendo que se le estaba yendo de las manos (sus notas habían empezado a bajar y su aspecto físico era peor de lo normal), no le dio importancia. No quiso que tuviera importancia.

En cuanto a las notas, sabía que con que repasara un día antes del examen final, podría recuperar el curso sin problemas. Y en cuanto a su aspecto físico... Bueno, digamos que eso ya no le preocupaba. Para qué iba a querer estar presentable y no parecer un cadáver andante, todo pálido y con ojeras, si no había nadie a quien interesar. No lo había habido cuando era un chico sano y preocupado por ligar y tener un poco de vida sexual, como para que fuera a hacerlo ahora que el único que le importaba siempre estaba disponible en el mundo de los sueños.

Y en ese mundo, las marcas dejadas por el agotamiento no existían.

Pero todo eso cambió cuando ocurrió algo que le hizo ver las cosas desde otro punto de vista.

Desde el punto de vista de las personas que había a su alrededor: sus amigos, su padre y los padres de sus amigos.

Era absurdo que pensara en ello ahora, como si nunca lo hubiera sabido. Pero la verdad era que ellos dependían de él más de lo que creía. Lo que significaba que no podía dejarles de lado para disfrutar de sus sueños.

Pero un día lo hizo.

Al principio, ni siquiera pareció algo grave: Sólo un par de tipos sospechosos que llegaron al pueblo un día, y que todos apostaban a que eran cazadores... Stiles no podía estar seguro de ello, porque nunca llegó a verles.

Porque cuando Scott le llamó para pedirle que fuera con Allison a dar una vuelta al motel donde se habían alojado, a ver si encontraban algo; Stiles estaba durmiendo y con el móvil apagado.

Y cuando Scott le mandó un mensaje al día siguiente, diciendo que Allison había desaparecido y que creían que la habían secuestrado; Stiles seguía durmiendo, después de haberse tomado una copa de whiskey por la que tuvo una bronca con su padre.

Y cuando, tres días después, supo que Isaac había caído en una trampa al intentar rescatar a Allison, Stiles estaba tan cansado y borracho, que no pudo hacer otra cosa que esperar a que Scott le llamara para saber qué había pasado.

Lo supo por la noche. A las 22:30.

Estaba sólo en casa pero se negaba a dormir de nuevo. Sabía que nada de aquello habría pasado si hubiera ayudado.

Si hubiera ido con Allison, al menos uno de los dos habría conseguido escapar para avisar a los demás de que había más cazadores de los que creían. Y si hubiera sido Stiles quien hubiera escapado, habría ideado un plan donde los humanos hubieran sido la primera avanzadilla del rescate, porque a ellos el acónito no les afecta.

Y resultaba, quién lo habría imaginado, que el sitio donde estaba Allison encerrada, era un auténtico polvorín de acónito. Por lo que cuando Isaac fue a por ella mientras Chris distraía a los cazadores (haciéndose pasar por pobre padre preocupado), cayó de lleno en la trampa.

Y casi no lo cuentan.

Y cuando Scott consiguió sacarle a tiempo, gracias a la ayuda de Derek; todos volvieron a casa con unas cuantas heridas de guerra.

Eso fue lo que le contó Scott cuando le llamó. Y teniendo en cuenta todo lo que pasó pero la llamada no duró ni tres minutos... Decía mucho de las pocas ganas que su amigo tenía de hablar.

Dream a Little DreamDonde viven las historias. Descúbrelo ahora