Guerra de Squads

7. Preguntas.

AL FIN PUBLICAMOS CHICOS
DISFRUTEN LE KAP ( ͡° ͜ʖ ͡°)

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Tengo al squad completo mirándome fijamente a los ojos, sentadas en una mesa en la cafetería. Emily come de su lonche con queso extra mientras que Gina se acomoda esperando una respuesta. Cada una con una expresión distinta, a la vez impacientes y algo confundidas.

—¿Pepo? —Pregunta Gina, a lo que yo suspiro frustrada.

—Verán, si les explico ahora las voy a confundir el doble. —Me llevo las manos a la sien y cierro mi ojos con fuerza. ¿Cómo hacerlas saber que el nombre completo de ese chico es Pelo de Popote? No creo que sea el momento...

—Yo puedo explicar. —Olivia capta la atención de todas, incluso la mía, así que levanto la cabeza y la miro expectante. Ella está segura, parpadea un par de veces y comienza—: Pepo es un chico del instituto. Su nombre es Pelo de Popote.

Él squad entero —menos yo— se ríe, esperando a que digamos que se trata de una broma mal hecha. Pero no es así, y pronto lo descubren, a lo que dejan de reírse (a excepción de Gina, que sigue partida de la risa mientras Olivia continúa).

—No es broma, y no sé cómo es posible, pero ese es su nombre. ¡No es el punto! A lo que voy es que él ha hecho la campaña. Trabaja de Elmo en Plaza Sésamo, aunque muy a menudo se le ve ausente. La verdad es que nadie sabe muy bien quién es él en realidad, está en todas partes. —Pone la mirada más seria cuando intentan reír de nuevo, Gina sí lo hace—. No es broma.

—Va, va —dice Gina entre carcajadas—. ¿Y cómo podemos saber que lo que dices es verdad?

—Porque lo es. —Contesta alguien detrás nuestro. La otra mitad del squad que se encuentra frente a Gina, Olivia y yo, abre los ojos como platos y se queda mirando al individuo, atónito.

Yo reconozco la voz a duras penas, pero no es necesario haber llevado una vida entera con el muchacho para saber que se trata del mismísimo Pepo.

Cuando Gina se da la vuelta y ve al chico, suelta un grito agudo y se estalla en carcajadas. Olivia solo rueda los ojos con una sonrisa y después ríe un poco.

—Hola, chicas. No me he presentado —Pepo se sienta entre Gina y yo, apretándonos e incomodándonos—. Pero a estas alturas del año ya deben conocerme como la planta de su pie.

Gina no puede con la risa, Rena, Nia y Emily ahora se encuentran riendo con fuerza, la última atragantándose en su lonche.

Nia le hace el favor a Gina.

—¿Cómo te llamas? —Pregunta. Él se muestra indignado.

—Soy Pepo, por supuesto. ¿No me conocen? Soy el que da stickers a los maestros cuando les hacen falta. ¿Ya? Por cierto, Joleen, ¿te gustó la campaña? Me enorgullece decir que la rivalidad está siendo todo un éxito.

Rena suelta una carcajada sarcástica y lo mira directamente a los ojos tapados por mechones de cabello.

—Estoy segura de que va fantástica.

Sé a lo que se refiere. El instituto entero no se calla sobre el tema, a penas y podemos escucharnos entre nosotras a un volumen civilizado. Aun así, Pepo es la excepción, ya que no necesita gritar para que la cafetería —tal vez escuela— entera lo escuche. ¿Podría ser eso considerado un don?

Hay círculos de personas en todas partes, la mayoría pregunta a menudo "¿quién rayos es Joleen?", los demás llevan un broche con el nombre de Liam al igual que una capucha. Entonces alguien llama mi atención y noto en seguida que se trata del mejor amigo de Liam.

El chico de piel oscura se acerca a paso firme y decidido. Lleva, probablemente, más mercancía de Liam que todas las animadoras juntas. Me mira directamente a los ojos y se para en un punto en el que todas podemos verlo.

—Tú —me apunta con un dedo—. Llevo meses buscándote —finge limpiarse una gota de sudor en la frente—. No te atrevas, ni siquiera lo pienses, acercarte a mí compinche. Él y yo somos amigos desde la era de la canica no sabes con quién te estás metiendo, porque si te metes con él te metes con todos nosotros.

El chico saca su celular y manda un mensaje mientras nos mira sospechoso. Después... ¿sonríe a Olivia?

—Hasta luego Ollie.

—Bye Timmy.

¿Pero qué está pasando? Está siendo éste el día más extraño de toda mi vida. ¿Resulta ser que Olivia conoce a todos en el instituto? ¿O solo a Pepo y ese chico cuyo nombre es, supuestamente, Timmy? Preguntas, preguntas. ¿Acaso lograrán ser contestadas antes de que me dé un paro cardiaco aquí, ahora?

Emily mira a Olivia con los ojos entrecerrados. Ésta sólo se encoge de hombros y contesta.

—Ya saben, él va a Apokliptic conmigo... es genial, deberían venir.

Olivia habla de un curso al que asiste los sábados, principal razón por la que no puede acudir a las excelentes pijamadas del squad los viernes. Por lo menos dos tercios del instituto sabe lo que es Apokliptic y un cuarto asiste.

—Ni lo pienses —contesta Rena—. Jamás volvería a ir ahí. Es un infierno.

—Ash —murmura Olivia.

—¡¡Un momento!! —Exclama Gina, sorprendiéndome un poco—. ¿Dónde está Pepo?

Todas nos miramos a los ojos, atónitas. Porque, es verdad. No se le ve por ningún lado.

—Ni siquiera noté que se fue... —susurra Nia.

—Ni yo... —contesto mientras lo busco entre el gentío.

—Toma clases de ninja —espeta Olivia indiferente.

Las seis nos miramos entre nosotras con una expresión cómica y algo confundida.

—¿Cómo sabes e–?

Alguien golpea la mesa en la que estoy sentada con sus esqueléticas manos y uñas pintadas. Me mira con sus ojos verde pasto.

—Por fin te encuentro —susurra con odio y desprecio—. Joleen Vertmont.

Esto no indica nada bueno.

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