—¿Cómo que vas a ir con Pepo? —Olivia me mira directo a los ojos, molesta.
—Sí, ¿qué está pasando? —Gina se lleva las manos a su cadera y eleva las cejas.
—Ya estábamos de acuerdo... —Emily murmura.
—¿Estábamos de acuerdo? ¿O estaban? Pepo me invitó, puede que ahí descubra quien tomó la fotografía. De no ser que alguna de ustedes la haya tomado. —Me cruzo de brazos y las miro con el ceño fruncido.
Estamos en los pasillos del colegio, listas para irnos. Al mencionar Nia la fiesta yo tuve que explicar que iré con Pepo. Si me hubieran dicho con tiempo que iríamos todas juntas, tal vez habría dicho a Pepo "no gracias", pero es bastante tarde, y la verdad preferiría ir con ellas.
—Miren, él me va a llevar, pero estaré todo el tiempo con ustedes. No hay ningún problema.
—Bueno —dice Olivia con los ojos entrecerrados—. Que no se repita.
Como si fuera a ir a otra fiesta, de todas formas.
Le entrego a mis profesores las tareas que tenía pendientes y después camino hacia la camioneta roja, la misma que Liam pateó. Mis padres me pidieron que tuviera más cuidado con ella, así que la mantengo lo más lejos de Liam posible.
Cuando voy a abrir la puerta me encuentro con un trozo de papel con un número y un dibujo de un popote.
Manejo a casa y le envío a Pepo mi dirección.
El viernes estoy aterrada.
¿Por qué dije sí? ¿Por qué dije sí?
Me lo repito una y otra vez mientras aplico una capa de rímel a mis pestañas. Mis manos están temblorosas, así que no me esfuerzo mucho con mis ojos.
Mi cabello lo aliso y me pongo un pequeño moño celeste en un lado. Llevo un vestido del mismo tono del moño, unos zapatos blancos y un bolso marrón largo.
Al bajar las escaleras, papá cierra su libro con cuidado y me mira a travez de sus gafas de aumento.
—¿Quién te va a llevar, otra vez? —Pregunta sobre sus lentes.
—Pepo —digo, porque no quiero ponerme a explicar ahora su nombre completo—. Volveré temprano, lo prometo.
—¿Es una chica?
—¿Te suena a nombre de chica?
—No me suena a nombre en general.
Aprieto mis labios en una línea. Tiene razón.
—Frank —mamá sale de la cocina para mirar a mi padre—. No digas esas cosas.
—Pues ya, diviértete —dice papá.
—Sí, es tu primera fiesta en meses, ¿no? Y nunca te había invitado un chico. ¡Esto es emocionante!
—Mamá...
Que diga eso hace que mi vida suene un tanto deprimente, aunque así lo sea.
Se escucha de pronto el sonido de un claxon afuera. Y no suena para nada lujoso.
—¡Es él! —Mamá sale corriendo de la casa y se queda parada en el marco de la puerta. La veo congelada desde dentro, y cuando se gira para verme, está aterrada—. ¿Ese es Pepo?
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Guerra de Squads
Teen FictionGanadora del tercer puesto en el concurso FranBaraAwards. - Joleen Vertmont y Liam Turner son todo menos parecidos. Es por eso que cuando, por accidente, se topan después de años compartiendo clase, las vidas de ambos se tornan de cabeza. Charlas i...