No creo que los Minamoto nos atacaran tontamente, no, es imposible, han de tener un motivo por el cual atacarnos de esa forma.
—¿Pero cuál es ese motivo?—
No tengo ni la menor idea de su porqué, mas no es algo prioritario, tenemos que seguir, seguir luchando.
No sé qué contaros, creo que se está haciendo repetitivo hablar tanto de batallas, pero no hay otro tema del cual hablar, asique prosigamos, pero esta vez no será la guerra el tema principal, será el pueblo, la movilización de todas las poblaciones.
Empecemos, seguramente no os acordéis, pero una vez tuve que forzar a 5 provincias a producir armas como locos, pues bien, de esas 5 provincias 2 son nuestras: Suruga y Shinano. Os dije que nos jugarían una mala pasada, y sí, lo hicieron.
—¿El qué?—
Pues veréis, en Suruga se producen los mejores arcos de todo Japon y en Shinano los mejores caballos.
—¿Qué pasó?—
Muy sencillo, de manera secreta los civiles de nuestras provincias comerciaron con el enemigo, estableciendo así un punto de apoyo para nuestro enemigo. Aquello fue fatal, debido a que el verdadero guerrero es aquel que maneja el arco y el caballo. Lo tienen todo, arcos y caballos, todo de elite, os podéis imaginar la situación que se presenta ahora.
Continuando con lo comentado anteriormente os añadiré una valiosa información, el ejército del general Yoshitsune se encamina hacia Shinano y hacia Hitachi. Cuentan con un valiosísimo contingente de más de 20000 hombres. Hitachi está perdida y Shinano también.
Estamos perdiendo mucho terreno por momentos, el general Yoshitsune es un gran estratega, no existe rival para él. Pero también el general y jefe del clan Minamoto, Yoritomo, ha decidido entrar en combate. No sé qué será lo siguiente, pero no pinta nada bien la situación en la que nos encontramos.
Y para colmo, nuestros civiles se están empezando a sublevar en Shikoku. Esto se pone cada vez peor, ahora la guerra es a dos bandos.
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Taira
Historical FictionHace mucho tiempo el nacimiento de un niño marcó el destino de una civilización, este es el destino que le aguardaba a Japón y a todos sus habitantes. Antigua portada realizada por Hiswel