Hijo de la luna (Sasuhina)

Hijo de la Luna 🌛15🌜

Hijo de la luna
(Sasuke & Hinata)

🌛Capítulo🌜

"15"

Los días en Suna eran difíciles pero no imposibles la hermosa ojiperla vivía día a día al máximo su hermoso embarazo pero tenía que admitir que ver a Itachi ahí la ponía realmente nerviosa aunque la novia de este Ayumi la hacía sentir cómoda con ellos, aunque por eso no dejaba de entrenarse junto a Gaara hasta que su ya abultado vientre no se lo permitió más.

A lo lejos Itachi la miraba entrenar con atención y tenía que admitirlo, la admiraba ni una Uchiha hasta este momento, ni su misma madre había hecho lo que está Hyuga hacía por su hermano y sobrino.

A los últimos días de los ocho meses de embarazo Sasuke llegó a Suna sorprendiendo no solo a la ojiperla si no a sus amigos Sabaku-no, los días transcurrían lentos y la pareja disfrutaba sus momentos juntos aunque, siempre en una temporada cálida las tormentas llegan.

Contaban los días para la esperada llegada del hermoso bebe y una noche en la caravana de la joven pareja un Shikamaru tocaba desesperado la puerta para despertarlos.

-¿Qué te pasa Nara?- decía furioso el Uchiha menor mientras Hinata los veía atentos.

-Hinata, la caravana de tu padre se acerca llegará en pocos minutos - decía un muy preocupado Nara.

Hinata solo cubrió su boca y Sasuke pudo ver terror en sus bellos ojos.

-Pelearé por ti...- decía seguro.

-¡¡No!!, no amor mío, no por favor, vete con tu hermano dejemos que la luna haga lo suyo os lo suplico - decía una ojiperla asustada.

Y así suspirando derrotado al ver como su amada chica temblaba de miedo asintió y besando su frente salió detrás de shikamaru para alertar a todos, en pocos segundos Temari y la misma Ayumi disfrazada con ropa de Suna la acompañaría y protegerían.

Gaara se había levantado para dar la bienvenida al jefe Hyuga, quien solo llegaba él con su hermano gemelo y su sobrino Neji.

-Sean bienvenidos a Suna señor Hyuga, ¿Que lo trae por acá?.

-La deshonra de mi hija y sobrino joven Sabaku-no, pido resguardo en sus tierras hasta la llegada de ese pequeño o pequeña - decía Hiashi.

-Por supuesto pero con mis reglas señor Hyuga, aquí las embarazadas son primero que todo y no verá o lastimara a la joven Hinata, ni usted ni usted joven Neji. Segundo no pelearan con mis otros invitados o serán exiliados a las tierras oscuras del desierto donde solo aquellos que son dignos son capaces de soportar y mantener la cordura para vivir.

-¿Que, como es posible?, Hinata lleva a mi hijo!!!- reclamaba Neji.

-Esas son mis reglas las acatan o regresan por el camino del que llegaron - finaliza el pelirrojo dando la espalda a sus recién llegados.

-Es un presumido - gruñía el joven Hyuga llamando la atención de Kankuro - con sus reglas y esas tonterías del desierto.

-No son ninguna tontería Hyuga, no por nada mi hermano es conocido como El demonio del desierto y es acompañado por Shukaku el señor de esas tierras, padre exilio a Gaara para hacerlo un digno sucesor y él es único hasta ahora que a regresado con vida, nadie sabe cómo lo logró pero piensa bien tus palabras Hyuga, no por nada desde ese día Gaara no duerme y en cada batalla el desierto está de su lado - finaliza Kankuro dejando solos a sus recién invitados.

Como se les dijo lo acataron, no por nada el señor Hiashi era un firme partidario de las reglas y ni él ni su sobrino se acercaron a la Hyuga aunque esta si había recibido la visita de su amado tío.

Una noche al descansar todos Hinata despertó con un fuerte dolor en el vientre y aunque intentaba soportarlos un fuerte jadeo hizo que la hermosa aguamarina Uchiha se despertara.

Al ver el hermoso rostro de porcelana de la Hyuga perlados por su esfuerzo y dolor supo que el momento había llegado.