Don't be Afraid

Capítulo VII

- ¿De verdad que no sabes cocinar nada? Pregunta Lexa a la vez que buscaba algo de música para poner.

- A ver, nada tampoco, se lo típico, un par de huevos fritos, freír filetes, alguna que otra ensalada.. aunque.. me salen sosas. - Frunció el ceño y sonrió.

Me reí por el comentario. - Una vez que le pilles el truquillo del aliñado te saldrán perfectas, sólo es práctica.

- Si tu lo dices...¿qué vas a poner de música? - La miré con curiosidad.

- Pues estaba pensando en poner...dejame ver..- buscaba en su portátil- ésta, espero que te guste, se llama Byegone de Volcano Choir, ¿la conoces?

- No, no la conozco.

- Entonces, espero que te guste. - Le di a que se reproduciera la canción. - Ya sé lo que harás ayudante de cocina, ven aquí - hice señas con mi mano para que viniera- vas a picar los ingredientes, más te vale no cortarte. - La advertí.

Caminó hacía donde le había mostrado - Teniendo en cuenta la suerte que tengo en la cocina no te aseguro nada. - Me dijo con ironía y poniendo una cara graciosa.

- Toma - le entregué un cuchillo y una tabla para que cortara en ella. - Hazlo en rodajas finas, suerte. - Y le guiño un ojo.

- Vamos allá...-empezó a cortar- por cierto, me está gustando la canción - La miré de reojo.

- ¿De verdad? ¡Me alegra que te guste!
Dije con mucho entusiasmo. - Bueno voy a ponerme con el pollo.

Un minuto después vi como Clarke seguía cortando torpemente los ingredientes, no cogía el cuchillo adecuadamente, así que me acerqué a ella por detrás - dejame enseñarte - susurré, ella asintió. - Hay una manera para que te sea más fácil y rápido - puse mi mano sobre la de ella y comencé a mostrarle el movimiento que debía hacer - Así, despacio, al principio te costará pero ten paciencia, luego lo coges así y sigues, ¿entendido mi pequeña aprendiz?

Levanté una ceja - ¿pequeña? ¿en serio?

- En las películas queda bien, además soy más alta que tú - reproché.

- Apenas un poco, que creída - niega con la cabeza.

Sonreí y me fui a seguir cocinando.

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Una hora después ya estábamos sentadas en la mesa, una frente a la otra, comiamos y hablábamos de cosas cotidianas, a veces no parábamos de reír y en algunos momentos creí que moriría atragantada. Realmente pasamos un rato muy agradable.
Muchas veces me la quedaba mirando fijamente sin que esta se diera cuenta, si que era guapa, y lo poco que estaba conociendo de ella me gustaba... Esto no va bien, a este paso me va a gustar mucho... muchísimo. Suspiré. Yo ya había terminado de comer y a ella aún le quedaba un poco, antes de dar su último bocado paró y alzó la vista para verme, me sonrió y dio su último bocado, yo simplemente me quedé atontada observándola... desvíe mis ojos a otro lado, ya estaba siendo muy descarada.

- Lexa...me ha encantado la comida, estaba riquísima, estoy sorprendida.

Sus halagos habían provocado que me entrara una vergüenza increíble, me quedé muda por unos segundos.

- Te lo dije, soy una excelente chef - sonreí de lado, con orgullo.

- Si me sigues consintiendo así, voy a estar de ocupa en tu casa por la comida.

- No me importaría - dije seriamente. Ella se quedó mirándome fijamente sin saber que responder, me pregunto que pensaría de mí en estos momentos. Le sonrio - ¿te apetece hacer algo? Ver una película ¿tal vez?

- Si, una película estaría bien, venga, vamos a recoger todo esto, te ayudaré a limpiar - dice levantándose de la silla.

- No, no hace falta, dejalo, ya lo recogeré todo después.

- Que dices, es lo menos que puedo hacer, encima que me invitas, quiero ayudarte, no acepto un no por respuesta.

Lo dijo con tanta firmeza que fue imposible para mí negarme.

- Vale, vale... Tranquila.. Tu ganas limpiemos juntas.

Tardamos media hora en terminar todo y subimos a mi habitación.

- Oh, wow.. Lexa, tu habitación es genial, que buen gusto tienes - decía mientras recorría toda la habitación con la mirada. - Estas fotografías son increíbles, ¿las has hecho tú?

- Si, es un hobbie que tengo.

- Pues se te da bien - sonreía - te felicito.

- ¡Me estas halagando mucho! Vas a conseguir que muera de vergüenza.

- Es inevitable, sabes cocinar muy bien lo cual es un puntazo y encima haces fotografías geniales, ¿qué más sabes hacer?

- Anda, que no es para tanto - le golpeé suavemente su hombro con el mío. Ya irás descubriendo poco a poco lo que sé hacer, venga, escogamos una película.

Encendí la televisión, que estaba en medio de mi habitación y justo en frente se encontraba la cama, que era matrimonial, al lado derecho estaba mi pequeño mural de fotografías en el cual Clarke aún se encontraba observando.

- ¿Qué tipo de películas te gusta, Clarke?

Despegó la vista de mis fotografías y se quedó pensativa - Mmm.. Las de acción me gustan mucho, aunque también las que son psicológicas, esas que te dejan con un cacao mental durante días pero ahora prefiero acción, si. ¿Y a ti?

- Acción igual y las de terror, zombies y esas cosas.

- Zombies, eh. Pues veamos una película de zombies.

- Me gusta la idea - sonreí - creo que tengo una por aquí, a ver... -empecé a buscar en mi estantería- aquí está, se llama Fear. Ponte cómoda - le señalé mi cama, ella asintió, se quitó los zapatos y se metió en mi cama. Yo me encargué de dejar la habitación totalmente a oscuras y me metí a la cama junto a Clarke, le di play y nos pusimos a ver la película.

Intenté concentrarme en la película pero me era difícil, tener a Clarke a mi lado me distraía y mucho, ella estaba atenta mirando la pantalla y yo..yo ahí mirándola de reojo, me llevé el pelo hacia atrás y cerré mis ojos fuertemente, que tenía esta chica que me hacía sentir así... de rara, nerviosa a más no poder y tonta, parecía una tonta, me revolvía todo por dentro.
Volví a abrir los ojos y miré la película un rato, luego el sueño empezó a apoderarse de mí, esto me pasa por quedarme hasta tarde despierta, no quería dormirme y desaprovechar el maravilloso momento que estaba teniendo, pero mis ojos se cerraban y que estuviéramos a oscuras metidas en la cama no ayudaba a mantenerme despierta.