6 meses antes
Clarke se había mudado con Finn después de irse de casa de su madre, los recuerdos de su padre la torturaban y que su madre estuviera con otro hombre la había dejado totalmente hundida. De salud, Clarke seguía bastante débil y eso no ayudaba a su estado de ánimo. Decidió comentarle a Finn si se podía ir a vivir con él, ya que este era un par de años mayor que ella y tenía su propio apartamento. Él aceptó sin ningún problema, a pesar de que sólo tenían cinco meses de relación. Era precipitado, sí, pero él era la única salida que veía, además siempre la había tratado bien y confiaba en él.
Decidió llevarse sólo una maleta, no quería incomodar demasiado a Finn. Las primeras semanas pasaron tranquilas, Clarke tenía que tomar un montón de medicaciones para los dolores y para poder dormir, lucía como un cadáver en ocasiones, muy pálida y con ojeras, a pesar de que tomaba las dichosas pastillas para dormir se notaba que no era suficiente. Esa mañana Finn la había tratado de convencer para que saliera a tomar el aire pero la rubia no salía de su propio reclutamiento, tanto interior como exterior.
"No puedes seguir así toda tu vida Clarke, no te hace bien y tienes que empezar a aceptar la realidad que te ha tocado vivir". Fue lo que dijo el joven en un intento desesperado de hacerla salir, pero no funcionó y decidió salir él solo a dar una vuelta con sus amigos.
La rubia en su interior sabía que no podía seguir así, la estaba matando por dentro, pero lamentablemente había caído en una depresión y no tenía fuerzas para salir de ella. Su madre cada día la llamaba para que regresara a casa, pero Clarke era incapaz de responderle a las llamadas, simplemente decidía apagar el móvil.
Pasaron otro par de semanas y aparentemente la rubia se animó un poco y salió de su reclutamiento. Quedó con su amiga Raven para tomar algo en una cafetería relajadamente mientras se ponían al día. Obviamente la chica riñó a la rubia por el modo en que estaba haciendo las cosas.
" Sé que debes estar pasando por un infierno Clarke.. pero no puedes seguir así, no puedes tirar tu vida por la borda... Clarke, conseguiste sobrevivir a un grave accidente y prácticamente sin secuelas, al menos fisicas... -cogió la mano de la rubia- todos estamos preocupados por ti.. verás, tu madre lo está pasando muy mal Clarke, no puedes culparla por todo, ella no tuvo la culpa."
"Si que la tuvo, sino fuera por ella mi padre seguiría vivo, el estaría bien.. vivo, no tuvimos que salir ese día, pero el insistió porque no quería estar en casa, estaba destrozado por la separación.. él -decía entre sollozos- dios, mi padre -el llanto se hizo presente- no se merecía esto, no se lo merecía."
Pasaron la tarde entre lágrimas, la rubia por fin sacó todo lo que tenía dentro y eso en parte ayudó a su estado de ánimo, sin duda el haber quedado con su amiga le hizo bien. También se la pasaron discutiendo, Raven quería que su amiga dejara de culpar a su madre, pero no obtuvo grandes resultados. Finalmente dejó de insistirle, pensó que con el tiempo se daría cuenta de que todo lo que pasó fue un trágico accidente, uno en el que el destino se encargó de que una serie de circunstancias fuera en contra de la familia Griffin.
Finalmente se despidieron y ambas regresaron a sus respectivas casas.
Al llegar, Clarke se encontró con Finn, el cual yacía tumbado en el sofá viendo la televisión con cara de aburrimiento. Al verla se levantó enseguida y fue hacia ella, le preguntó cómo se encontraba y si quería algo de comer, pues a la rubia no le venía mal recuperar los kilos que había perdido.
Se sentaron a cenar tranquilamente, el joven apenas conseguía sacarle una frase completa a su novia, y sinceramente esa situación empezaba a cansar al chico, quería a su novia pero estaba desesperado. No quería verla así y la chica no ponía mucho de su parte por mejorar, sentía que sólo el estaba intentando mantener su relación y eso le suponía un gran peso que lo estaba derrumbando.
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Don't be Afraid
RandomHistoria alternativa sobre Lexa y Clarke. Habíamos perdido a alguien importante en nuestras vidas, nos habían traicionado y luego, luego nos conocimos.