Same Mistake (Camren)

Capitulo 4.-

Lauren Jauregui estacionó la motocicleta en la acera, justo frente a la casa de Normani después de haber estado dando vueltas sin fin. Con ayuda de su madre, había conseguido la dirección de la chica pero aún se le dificultaba un poco la tarea ya que no recordaba mucho las calles. Ahora, todo estaba distinto a lo que Lauren recordaba, las casas eran un poco más lujosas en comparación a las que guardaba en su mente. Había estado debatiéndose en ir durante toda la tarde pero ahora, que se encontraba frente a la casa de dos pisos de su amiga, no podía dar marcha atrás. Ya estaba ahí y aunque los nervios la estuvieran consumiendo por dentro, se bajó de la moto y enganchó el casco en su antebrazo luego de quitárselo. No estaba muy segura si quería enterarse de todo lo que le iba a decir Normani; pero de algo sí estaba muy segura: tenía que tener estar conversación con alguien para aclarar un poco la confusión que tenía en su cabeza.

Sin esperar más, y sabiendo que si se detenía a pensar en que estaba haciendo lo correcto se arrepentiría, tocó la puerta color marrón con la mano hecha puño. Estaba completamente nervioso y la ansiedad le estaba mordiendo los sesos. Quería saber que había hecho en el pasado, solo quería que su amiga le aclarara la verdadera razón por la cual ella había matado a un muchacho de su edad, pero le temía a la respuesta que podía darle.

La puerta se abrió y una mujer usando un delantal de cocina apareció frente a Lauren. Ella la abrazó, dejando a la chica más confundida de lo que estaba. Cuando le iba a devolver el abrazo, ella se apartó, posando un mano sobre el hombro tenso de Lauren.

—¡Que bueno es verte por aquí de nuevo, Lauren! —saludó ella con efusividad. Dio un paso al lado, y la ojiverde ingresó a la casa —¿Cómo has estado? Espero que mejor que la última vez que te vi.

—No tiene de que preocuparse, señora. Estoy perfectamente bien, aún no he recordado algunas cosas, pero estoy trabajando en ello.

—Me parece perfecto. ¿Buscas a Normani? —inquirió y Lauren  asintió— Está en su habitación. La segunda puerta a la derecha.

–Gracias.

Lauren subió las escaleras de dos en dos, mientras que su cuerpo era recorrido por los nervios. Había estado diciéndose que debía mantenerse tranquila pero, la idea de recordar cosas de su pasado, y hacer que varias piezas de su rompe cabeza que en ese momento era su memoria encajaran la mantenía bastante ansiosa. Más de lo que ella podía  y quería admitir.

Sin tocar a la puerta, entró en la habitación de su amigo. Normani se encontraba recostado en la cama, con su computador portátil sobre los muslos. Cuando se dio cuenta que Lauren había entrado en su habitación, sonrió de manera cómplice y cerró la computadora para prestarle completamente atención a su amiga y aclarar cada una de las dudas que la ojiverde tuviera.

—¿Te costó llegar? —le preguntó Normani y Lauren negó inmediatamente. Normani se acomodó sobre la cama, sentándose de manera correcta— ¿Cómo estás?

—Estoy jodidamente nerviosa —declaró Lauren, tomando la silla de escritorio. Se sentó con las piernas abiertas a ambos lados, y recargó sus codos sobre el respaldo — así que, comienza a contarme de inmediato.

—La pequeña Lauren, siempre tan ansiosa —se mofó Normani—. ¿Qué quieres saber?

—¿Qué clase de pregunta es esa? —espetó Lauren Jauregui—Quiero saberlo todo. Quiero saber porqué todos dicen que gracias a Ariana perdí la memoria, y porqué maté a una persona.