Dedicado a Kat-MG por ser mi lectora más fiel. Gracias de corazón.La tensión en la sala se cortaba a cuchillo.
Desde que había interrunpido aquella conversación el duelo de gatas estaba servido.
Con la b.s.o. de " El bueno, el feo y el malo" resonando en su cabeza, Lucía lanzaba miradas asesinas a aquella "lagarta" que había puesto en duda su honorabilidad ante Diego.
¿Quien se creía aquella para acusarla si no la conocía de nada?.
La respuesta estaba clara al desviar su mirada y ver la mano de esa víbora posada con total familiaridad en el hombro de Diego.
La sangre le hervía, la bilis le subió hasta la garganta y un helor le invadió el cuerpo por completo.
Estaba a punto de explotar y arrancarle la mano a aquella rubia oxigenada y dejarla manca para el resto de su vida.
Exhaló poco a poco la rabia y procuró mantenerse fría ante aquella mujer que, al darse cuenta de su mirada, bajo más su mano acariciando a Diego con aquella maldita sonrisilla en sus labios.
A punto de ebullición desvió la mirada hacia él que la observaba con el ceño fruncido.
-¿No me vas a presentar?-.
Las palabras surgieron de su boca en un tono crispado que no pudo disimular.Éste la observaba sin mediar palabra con una oscura mirada en su rostro.
Por fin su profunda y erótica voz resonó en el tenso silencio de la sala.- Estamos en una reunión Lucia. Vuelve a tu habitación y descansa. Es tarde.
El muy gilipollas la reprendía por la interrupción cuando estaban hablando de ella. ¿Pero que se creía, que se iba a estar calladita mientras la barbie la ponía a parir?.
Con todo su descaro apartó lentamente la silla y se sentó frente a Diego.
--Ya que estabais hablando de mi , no os importará que me quede por si hay algún error que pueda enmendar-retó con la voz cargada de sarcasmo.
-Creo que no has entendido -le contestó con voz chillona la arpía rubia. -Esto es una reunión privada y tú -hizo una teatral pausa mientras la miraba con media sonrisa -no puedes estar aquí.
El corazón de Lucia se le iba a salir por la boca.
La saliva se le espesaba por momentos y se imaginó que de un momento a otro se lanzaría contra ella cuán Zombie para morderle la yugular.
Todo alrededor desapareció de su visión y una neblina roja entelaba su vista centrada en aquella mujer.Y...estalló.
-Mira "rubita" -dijo mirando de soslayo a Diego, que en aquel momento levantó su ceja -no se quien eres ni me importa. No suelo hacer caso a rubias tontas y hoy no va a ser una excepción. Estáis hablando de mi y de mi vida. Quiero saber que pasa y a que me arriesgo. Es justo que me quede -argumentó esta vez paseando la vista por todos los presentes.
Grandullón, que había permanecido observando la escena carraspeo incómodo.
- Creo que está en su derecho de....
Diego se levantó de repente y cogió del brazo a Lucia levantándola de la silla y arrastrándola hacia el pasillo.
Una vez cerrada la puerta del salón la enfrentó enfurecido.
-¿ Quien demonios te crees para intervenir de esa manera?- le preguntó furioso. - Te has comportado como una niña enrabietada allí dentro. Estas interfiriendo en mi trabajo. No te permito que me ridiculices delante de mi unidad - y la soltó de repente como si quemara.
ESTÁS LEYENDO
LABIOS DE FRESA (Corrigiendo)
RomansaHabrá gente que piense que la vida se compone de casualidades y otras que a las casualidades les llaman destino. Para Lucia tener una noche plagada de pesadillas para a continuación levantarse con una vieja canción en la mente (la cual le trae los p...