Caperucita Roja Y El Lobo... ¿Feroz?

Capítulo 19: "Instinto"

El trato con la anciana no me convencía pero, era la única esperanza que me quedaba. Pensar que todo fue culpa de una impostora.

Nos separamos para encontrar a la "impostora" y llevar a cabo el plan más rápido. Estaba escondido entre la maleza del bosque. Me lo sabía de memoria pues, fue el lugar dónde me crié en estos últimos años. De repente, escuché un grito proveniente del claro Suroeste. Fui lo más rápido que pude hasta que lo vi. Vi a la supuesta impostora a punto de ser violada por un cazador. ¿Qué estaba pasando? Mi cabeza no pudo procesar la información pero, antes de darme cuenta, mi cuerpo se abalanzó sobre aquel degenerado dándole un puñetazo lleno con toda mi rabia y desprecio.

-¿Qué...? ¿¡Qué demonios haces!?

-¡También podría decir lo mismo! ¡Déjala en paz!

Con este grito mostré mi más fiera mirada y mis afilados colmillos. Con eso fue suficiente para que huyese como un cobarde. Bueno... Era mejor así... Cuándo mi cerebro recapacitó, me giré inmediatamente para ver a la chica. Puede que no fuese Roseatte pero... En verdad tenían esa misma mirada gentil. La chica estaba paralizada. Le temblaban las piernas del miedo. De repente, unas lágrimas cubrieron sus hermosos ojos...

-¡Lobo!

Se abalanzó sobre mía abrazándome. Me sorprendió pero, no dude en responderle el abrazo... Debió pasarlo muy mal...

-¡Tenía tanto miedo! ¡Lobo! ¡No te vayas!

-Tranquila... Estoy aquí... Contigo...

No sabía si era la Roseatte real pero, nadie merece que le pase eso. En medio de ese tierno momento apareció la anciana.

-¡Lobo! ¡Ella es la impostora! ¡Atrápala!

Ella... Era la impostora... Si quería recuperar a Roseatte tenía que sonsacarle donde estaba. Me puse serio y escondí mi cara pues, un par de lágrimas se asomaban.

-¿Lo.. Lobo?

-Lo siento pero, necesito a Roseatte.

-¿Qué estás diciendo Lobo? Yo soy Roseatte.

En su voz se notaba la confusión y el miedo. Lo sentía... Deberas...

-Quiero a la verdadera.

-Pero... ¡Yo soy la verdadera!

-¡Lobo!

La voz de la vieja nos interrumpió.

-¡No dejes que te engañe! ¡Ella es la impostora!

"Roseatte" miró con odio a la anciana...

-Ahora lo entiendo... ¡Lobo! ¡No le hagas caso te está utilizando par deshacerse de mí! ¡Créeme!

Yo... Ya no sabía a quién creer...

-¡Vamos mátala! ¡Acaba con tu sufrimiento ya!

-No... Lobo... Yo...

Me abalancé sobre ella y puse mis garras a punto para atacar. Lo intenté con todas mis fuerzas pero, no lo pude hacer... Las lágrimas salían y no las podía esconder...

-No puedo... Yo... Yo la quiero...

Era superior a mís fuerzas... No podía matarla... Yo, después de todo la amaba.

-Ya veo... Así que resultó ser así...

De repente la anciana sacó una pistola de las medias que tenía y, me disparó en el hombro.

-Resultaste ser inútil...

Me miró como si fuese la basura más grande que existiese... Irónico, ¿no?... Porque yo en verdad... Pensaba lo mismo de ella. Todo se estaba volviendo oscuro, y lo último que recuerdo de ese momento es ver la cara de Roseatte delante de la mía con lágrimas en los ojos y pronunciando un grito desgarrador.

-¡Noooooooooooo!

Después de eso, vino la oscuridad. No sabría si volvería a ver la cara de mi amada pero, en verdad, me alegró saber que, por lo menos, lo último que contemplaría, sería a ella.

CONTINUARÁ...

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Notas de la autora: Me van a matar... Se que me van a matar... ¡Soy demasiado joven para morir! Perdonadme pero, lo tenía ya todo planeado. Pero tranquilos, esto no se acaba aquí.

Gracias por leer y... Hasta el próximo capítulo...