Ella, Madison Black, dejo sus sueños por un accidente
Él, Zach Davies, dejo a su familia atrás por un accidente
Ella llega,
Él regresa
El destino quiso que bailaran juntos
Muchos se oponen
Muchos los apoya...
— ¿No estás contenta? ahora que lo pienso hace un par de semanas deberías estar que brincas de felicidad— mire a Oliver, que se había ofrecido a traerme a la Universidad
—¿Contenta? Cómo podría estar contenta si estoy hasta la coronilla de trabajo, además Stefan no quiere alejarse de mí ni un segundo y los dos tenemos trabajo en exceso— vi como mi primo fruncía el ceño
—...Y además la presentación con Zach ¿no? Todos queremos verla— me callé al instante y desvíe la mirada
— Yo... no bailaré en el solo de Zach... lo hará Eileen— de pronto me vi propulsada hacia enfrente, si no fuera por el cinturón mi rostro sería papilla de Maddie— ¡Que te sucede! ¡Estas loco! ¡Podríamos haber muerto!
— ¿No vas a bailar con Zach?— mire ofendida a Oliver ¿todo esto por eso? —Dime por favor que no es por el idiota de Stefan
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— Yo...— Oliver se veía realmente furioso — no quería más problemas ¿vale? Todos estamos demasiado estresados y no quería problemas entre ellos dos
Oliver ya no dijo nada, era obvio que estaba muy enfadado pero sólo se limitó a llevarme a la Universidad.
Hoy tendríamos que dejar todo listo pues mañana sería el recital y dentro de dos semanas terminaría el ciclo escolar.
El edificio de danza estaba lleno y era un completo hervidero de emociones, todos me saludaban al pasar pero yo sólo tenía prisa por llegar a mi propio salón.
— ¡Has llegado!— Chelsea me abrazo, Eileen, Natalie y ella se veían realmente nerviosas — ¡Tranquilas! La presentación es mañana y todo está listo, comencemos a ensayar en lo que Stefan llega
Y así pasó todo el día y cuando llegó Stefan tuvimos que ir al auditorio donde tendríamos que fijar los sitios para la coreografía, ahí pude ver a Zach también preparando sus cosas para su solo y presentación con Nathan y Ryan.
Aunque él ni siquiera me miró, trate de no sentirme mal, él parecía muy concentrado en unas partituras que leía con vehemencia junto con Nathan.
Lisa se le acercó pero él sólo le respondió sin siquiera mirarla y eso... eso me hizo sonreír
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