No Todo Es Lo Que Parece

''La llamada''

¿Qué pasó? ¿Oli está bien? Eso espero, estoy demasiado preocupada por lo que acaba de pasar, debo ir al aeropuerto de inmediato y saber qué pasó, me escaparé porque mis padres no me dejarán ir a verlo. Me escapé por la ventana de mi habitación y tome la metro, al llegar habian las típicas cintas amarilla de polícias que decían 'PELIGRO' trate pasar pero no me dejaban, así que le pregunté a un polícia que estaba por ahi que había pasado.

-¿Disculpe, sabe que ha pasado?

-Hubo un tiroteo.

-¿Las personas que estaban ahí? ¿Están bien?

-Hay personas heridas y otras muertas, pero los responsables ya están tras las rejas.

¿Al escuchar qué habían personas muertas, me recorrió un escalofrío por todo el cuerpo, no sabía que pensar, y si Oli está muerto? ¿Estará bien? ¿Estará herido?

-¿Disculpe, sabe si se han llevado a las personas heridas a un hospital?

-Me dijeron que en el 'Hospital General de San Francisco'.

-Muchisímas gracias.

Fui lo más rápido que pude a ese hospital, llegué y había una recepcionista a la cuál le pedí que me ayudará a saber si se encontraba ahí.

-¿Disculpe, puedo saber si aquí hay algún paciente?

-¿Nombre?

-Oliver.

-¿Apellido?

El problema era que no me había dicho su apellido. ¿Como iba a saber si estaba ahí?

-¿No lo sé, no puede buscar por Oliver?

-Hay 5 Olivers en el sistema.

-¿Cuál fué el más reciente en llegar?

-Hoy, 11:56.

-¿Me podría dar su habitación por favor?

-¿Quién es usted?

-Soy Livis Pasquerilli, la novia de Oliver.

-Está bien, su habitación es la #57.

-Gracias.

Si, mi apellido es medio italiano por mis ancestros pero nací en Reino Unido, fuí lo más rápido que pude, y lo encontré, en su camilla, con los ojos cerrados, por favor que esté dormido y no sea algo peor.

-¿Oli?

-...

Comenzé a llorar porque no me contestaba, hasta que abrió los ojos.

-¡¿Oliver?!

-¿Liv? ¿Eres tú?

-¡Oh dios mío! ¡Estás vivo!. Lloré de la felicidad, y lo abrazé mientras estabá acostado en la camilla.

-¿Qué haces aquí? Me dijo.

-Estaba preocupada por ti. Le apartaba un mechón de su cabello desordenado de su cara.

-Liv, no sabes lo feliz que me haces.

-Oli, estoy enamorada de ti.

-Yo tambien lo estoy, y mucho.

Nos acercamos para besarnos, y nos besamos mientras ponía mis manos es su rostro y el hacía lo mismo en mis mejillas, mientras me susurró.

-¿Liv, cuál es tu apellido?

-Pasquerili, y el tuyo?

-Burcatti.

Cuando nos estabamos besando alguien entró en la habitación del hospital.