Un día gris

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No se donde estoy, ni como termine aquí, todo es una inmensa oscuridad, de nuevo, esa chillante voz.
-¡Yume...Yume!-era Issei
Abrí lentamente los ojos, la silueta de Issei se dibujo, Sonreí.
-Dejame dormir-me tape el cuerpo entero.
-¡Yume! Hoy iremos al parque de diversiones.
-¡No quiero ir!-aprete los ojos
-Cariño, es regalo antes de que tu abuela se lleve a tus hermanos-suspiro-vamos levantante
-Esta bien-me senté en la cama-volvió ese sueño.
-Que extraño-me miro asustado Issei.
-Entonces, ¿al parque?-trague saliva-la mascota es un calamar
-Jajaja había olvidado tu fobia, pero descuida compre pases VIP, para mirarlos en primera fila-sonrio dejando ver su par de colmillos, se veía tan sexy.
-¡Idiota!-hice un puchero
-Hasta enojada de te ves tierna-volvió a sonreír pero esta vez nostálgico.
-¿Pasa algo?-pregunte en voz baja.
-Nada,solo que hoy es cumpleaños de Issac-su mirada se dirigió hacia mi.
-Entiendo-bese su mejilla
Tomo mi mano y después me dio un tierno beso, me recoste en la cama por instinto y el prosiguió a hacer lo mismo, siguió besandome, hasta que un leve escalofrío recorrió todo mi cuerpo.
-Te amo Yume-beso mi frente
-Yo también te amo-mire sus verdes ojos.
Entro Alexia y nos miro asustada.
-Emmm llego Fukase-dijo con pena, para después salir corriendo.

Cambie mi ropa por una más cómoda, tome las llaves y el dinero que había ahorrado y así partimos al dichoso parque de diversiones, a sus alrededores había nidos de mafiosos y sucesores de estos.
Al llegar un viejo barbudo recibió nuestros pases, Alexia, Ren y Ryu, corrieron al entrar, pobre de mi padre se quedo con los mas pequeños.
Nos subimos a la afamada ruleta de la muerte, Issei termino vomitando y Alexia riendo.
Ren comió un pastel que la hizo estar en el baño por dos horas, el pequeño Ryu se quedo dormido en media vuelta del trenecito y al final del día el afamado Calamar Jhonny, yo decidí esperar afuera, de verdad me aterran.
Escuchaba música hasta que me llegó un mensaje de mi padre sobre que había problemas.
Mi corazón latió, al saber que había peligro, así que, entre en busca de Issei.
Lo mire estaba hasta enfrente, trate de llegar a él, pero parecía alejarse cada vez más. Por lo que decidí correr mas rápido, hasta que logre captar su atención, miro mi expresión vacía otra vez, tomo a mis hermanos e hizo señas de afuera. Volvi a salir.
-papá Fukase tiene problemas, debemos volver ahora-dije agitada
-Vayamos-tomamos un taxi para llegar más rápido.  Subí las escaleras del edificio y al abrir la puerta nuevamente encontré el horror.
-¡Hijos de puta!-golpee la pared hasta que me sangró la mano.
Entro Issei y mis hermanos.
-Se los llevaron otra vez, Issei cuida de ellos hasta que venga la abuela.
Tome mi chamarra y salí del edificio, esta vez, acabaría con ellos.
La noche se había puesto fría, corrí hasta llegar al viejo callejón de Kain, se había ganado ese nombre por la famosa droga.
Una silueta se dibujo.
-Tu debes ser Yume-susurro
-Soy yo, ¿Que mierda quieren?-pregunte molesta
Río levemente-Tienes algo que necesitamos enormemente.
-Hare cualquier cosa por mis hermanos, pero escucha no me ando con tonterías-lo tome por el cuello y lo pegue a la barda, sentí una carga eléctrica recorrer por mi brazo. Pude ver como la vida se le iba en un suspiro.
-La bestia-susurro para después caer sin vida.
-Sorprendente-salió un viejo hombre de la oscuridad
-Shinji-susurre, el hermano del viejo Shiro.
-¿Como estas sobrina?-quito su sombrero, quizás busques esto-tres hombres cargaban inconscientes a mis hermanos.
-No los metas en esto-Senti esa chispa, parecida a cuando mis ojos cambiaron de color.
-No fui yo, fue él-detrás de uno de los hombres salió Kenshin.
-Tu...¿Por qué haces algo así?-grite
-Escucha Yume, por ti, perdí todo-respondió calmado.
-¿Que te hace pensar que yo tengo algo?-me calme un momento-si soy un demente,pero toda mi vida la he pasado sola y a cargo de ustedes, tu tienes hermanos Ken, no debes decir que no tienes nada-cerré el puño que ya había dejado de sangrar.
-Basta de charla, Carlos, llevate a los niños-ordeno Shinji-voy a negociar con este ser, oh y Gracias Kenshin-saco una pistola para después dispararle en la pierna.
-Kenshin-grite
-Perdoname Yume-se desmayo.
-Bien, hagamos esto, me das a Jay y después te usamos de recipiente para la bestia, ¿Que dices?-sonrío.

HABITANDO CON LA CRIATURADonde viven las historias. Descúbrelo ahora