| Amame | | Crepusculo | #2

Capitulo 29

POV NARRADOR

-Vinimos a ver a los nuevos bebes de la familia.- Dijo Isabella sonriendo mientras entraba a la habitación con globos y un par de osos en una mano.- Pero mira que ternuritas.- Se hacerlo a ver a los bebes que estaban en sus cunitas.

Y paso lo que habían estado esperando por unos largos nueve meses, Marina había dado a luz a su bebe, más bien a sus bebes, en las ecografías salía que solamente era un bebe, cuando en realidad había dos bebes. Dos pequeños angelitos, Esteban y Marcos, Marina se sentía tan feliz de tener a sus hijos y cada vez se hacia la idea de que su pequeño Rodrigo le había mandado a esas criaturitas que ahora le alegraban la vida.

-Menudo susto amor.- Damian le beso la frente.- Enserio me diste un susto en la noche.

-Fue tu culpa por haberme dejado embarazada.- Rio para luego hacer una mueca.- Aun me duele.

Luego de semanas en que iban a visitarlos al fin le dieron el alta a los gemelos y Marina, Bella se emocionaba cada vez que veía a los pequeños.

-Precioso Marcos.- Bella cargo al pequeño.- Se parece a Damian.- Rio mientras besaba la frente del bebe.

-Felicidades.- Christian apareció por la puerta y abraso a Marina.- Bonita decoración.- Habían armado una mini fiesta para festejar el nacimiento de los mellizos.

POV INDEFINIDO

Mocosos, ¿Acaso tanta mala suerte tengo? ¿Dos? ¡Enserio! Planeaba secuestrarlos, matarlos o tirarlos en algún lado, Marina tiene muchísima suerte pero pronto se le va a acabar.

No estoy sola, hay alguien conmigo, esta vez saldrá bien el plan, Marina prepárate para sufrir una vez más. Y esta vez es para siempre.

POV BELLA.

La fiesta iba de maravilla, habían invitado a pocas personas pero eran las que siempre están con Marina, Edward estaba terminando de poner algunas mesas con Damian, el cual se encontraba nervioso porque se acercaba el momento en el que iba a pedirle matrimonio a Marina.

-¿Crees que se ve bien?- Pregunto Edward abrazándome.

-Hmm... para ser hombres lo hicieron bastante bien.- Reí besando su mejilla.

-Pero que dices mujer.- Me miro serio.- Si hicimos un gran trabajo ¿A que no Damian he?

-Creo que sí, hmm espero que este todo bien, na-nada tiene que fallar.

-¿Nervioso?

Damian me miro rodando los ojos, me reí fuertemente sabiendo que el pobre chico estaba más que nervioso, iba a dar un gran paso, uno que les cambiaría la vida. Ojala pasara lo mismo conmigo y con Edward, ojala llegáramos a casarnos y vivir lo que queda de nuestra vida juntos, hacernos viejitos y ver a nuestros nietos correr en el jardín, ver a nuestros hijos crecer, (Solo tenemos a Reneesme, pero quiero tener más hijos.) una vida juntos. Suena muy sentimental en mi cabeza, debería calmarme antes que comience a llorar.

-¿Qué sucede?- Susurro Edward en mi oído.

-Solo estoy pensando, no pasa nada.- Bese sus labios rápidamente.- ¿Damian se lo dirá ahora?