Capítulo 3.

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Esta es la tercera o cuarta vez que Christopher y yo nos encontramos en el pasillo sin dirigirnos ninguna palabra.

Ya ha pasado poco más de una semana desde aquella discusión con Christopher, ahora mismo está de espaldas atrás de Hayley, sacando algunas cosas de su casillero.

La chica se voltea y se acerca a él decidida a que aclaren las cosas.

—Chris...—toca su hombro.

Él sólo toma un libro de su casillero, para luego azotar la puerta de éste. Quita su mano de mala gana y se voltea para empezar a caminar a su clase.

—¡CHRISTOPHER ALEXANDER BECKE...! —grita Hayley y éste voltea.

—¡YA HAYLEY! ¡SÓLO DÉJAME! —le grita interrumpiéndola.

"Con que a esas vamos... pues ya llegamos hasta tu calle, y creo que muy bien sabes cómo llegar, sino háblale a Dylan. Adiós"

"¡YA HAYLEY! ¡SÓLO DÉJAME!"

Recordaba Christopher lo que le había dicho a Hayley...
No le gustaba estar así con ella, extrañaba tanto hacerla reír, salir con ella por las tardes al parque y que ella le sacara la lengua de una manera tan cómica.
Le dio tantas vueltas innecesarias al asunto, para así darse cuenta que lo mejor era pedirle perdón por la forma estúpida en que la había tratado e ignorado.
"Iré a su casa saliendo de la escuela... Si eso haré" pensó.


Cuando tocaron el timbre de salida, Hayley se fue directo a su casa.
Llegando subió a su habitación a dejar su mochila y bajó de nuevo a tomar agua, cuando subió nuevamente, abrió su laptop y se conectó a Facebook... "¿De qué tanto me habré perdido?" pensó... Revisó y vió que tenía una solicitud de amistad de "Dylan Anderson"

—¿Dylan Anderson?

Dijo en voz alta, en la soledad de su habitación. "¿Será aquel que conocí hace una semana?" Pensó
Entró al perfil de aquel chico para ver sus fotos... Y sí, en efecto era Dylan, el que "atropelló" aquel día. Esbozó una pequeña sonrisa y aceptó su solicitud. Después de unos minutos le llegó un mensaje de él.

"Hola Hayley😛❤️"

Al momento le respondió, y así comenzaron una pequeña conversación.


Mientras tanto, Christopher se quedó hasta tarde en el colegio, aún pensaba que le diría a Hayley cuando fuese a verla.

Después de varios minutos rondando en los pasillos, decidió finalmente ir a verla.
Camino a la salida, Bridget se atravesó en su camino, extendió su mano izquierda y la recargo en la pared, la otra mano la puso en la cintura, aquella era una pose algo insinuante, ante aquella intervención Christopher se detuvo, la miró de pies a cabeza. Llevaba una mini falda color turquesa, una blusa blanca con un chaleco de mezclilla encima, su cabello lacio caía en sus hombros y sus ojos verdes lo analizaban de arriba abajo. Tenía una mirada seductora... "Vaya aquella chica era realmente preciosa... Tal vez la más guapa de toda la escuela" Pensaba.


Le lanzó una mirada coqueta y se acercó más a él, Chris no entendía lo que estaba pasando, casi nunca hablaba con aquella chica. Ella lo tomó de los hombros y por fin hablo

—Chris... ¿por qué estás aquí a estas horas? —dijo con voz melosa, mientras acariciaba su brazo.
—Pues... Me quedé con los chicos jugando un partido —mintió. Desviando su mirada de sus impotentes ojos—. ¿Y tú?
—Ah... Vaya que bien, bueno tú sabes, soy porrista... —sonrió—. Por cierto, ¿y tú amiga Hayley?

"¿A ti que mierda te importa?" Dijo para sus adentros Christopher.
Además, esta rubia jamás me había dado buena espina... Lo que tiene de guapa lo tiene de odiosa.

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