Capitulo 7.

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Llegando a su casa, Hayley subió a su habitación en la que encontró una caja morada algo mediana en su cama.
Se acercó a ella y tenía una nota pegada;

Hayley.
Hoy iremos a cenar todos en familia, quiero que uses esto.
Es un vestido, ojalá y te guste. Llegaremos a casa a las siete

Besos, Mamá.

Abrió la caja y sacó el vestido.
Era algo sencillo, pero a Hayley le había encantado.

  Era algo sencillo, pero a Hayley le había encantado

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Bajó a la cocina para prepararse algo de comer. Encontré en el refrigerador lo ideal para prepararse espagueti, así que sacó todo y lo asentó en la mesa y se dispuso a cocinar, mientras trataba de idear un plan para cuando fuera a ver a Dylan y Christopher en la tarde.

Literalmente, se rompió la cabeza pensando que haría para que ambos chicos se llevarán mejor.
Subió a su habitación y se echó boca arriba en se cama.
"¿qué haré?" era lo único que seguía pensando.
Luego que vio la hora en su celular, se dispuso a darse un baño y cambiarse porque ya eran las 4;30 p.m. faltaba media hora para que se encontrara con los chicos.
Y no se le ocurría absolutamente nada.

Cuando llegó al parque, cerca de las cinco en punto, no vio señal de ninguno de ellos.
Los espere unos minutos más hasta que se fastidió.
Dio un pequeño paseo hasta que divisó un árbol y decidió subirse a él, lo cual le fue sencillo. La rama en la que se sentó no estaba muy alta, era como 1.5 mts del suelo.
Era algo inclinada, pues más arriba como ya a 5 mts, quedaba el resto del árbol.


En otras cosas, Christopher no se había dado cuenta de la hora y llegó casi a las 5;30 al parque.
Caminaba por la acera, pero no veía a Hayley. De repente apareció aquel chico.
Siguió caminando sin darle importancia, hizo como que no lo vio, pero no pudo evitarlo pues al acercarse, él fue quien le habló.
—Christopher, ¿qué haces aquí?
—Vine a ver a Hayley —dijo algo engreído.
—¿Enserio? —preguntó confundido—. Yo igual, ¿a qué hora te cito aquí?
—A las cinco...
—A mí igual
—¿Qué es lo que pretende esta chica? —preguntó confundido Chris.
—No sé, pero debemos buscarla
—Pienso igual

Caminaron por el parque, hasta que vieron a alguien sentada arriba de un árbol, aunque estaba de espaldas, de inmediato ambos se dieron cuenta que era Hayley.

—Ahí está —le dijo a Dylan, señalando a la chica trepada en el árbol.
—Ya la vi.

Dylan le dijo algo al oído, lo cual a Christopher le pareció buena idea. Así que se acercaron al árbol donde estaba Hayley.

—¡HAYLEY! —gritó Chris.

Aquel grito hizo que ella se asustara y al intentar voltear su mano resbaló de la rama del árbol al que se agarraba y perdió el equilibrio cayendo de frente del árbol.


Por suerte alcanzó a meter sus manos para que su cara no se estrellara en el césped.
El pasto estaba aún húmedo, pues hace poco lo habían regado con los aspersores, por lo que se embarró de lodo las rodillas y sus manos.

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