"Los Caminos de la Vida"

Capitulo 14: "El regreso de Turles"

A paso lento Gokú entro al edificio, subió por el ascensor y toco la puerta del departamento de Raditz.

Hola, vaya, veo que el ser puntual es un hábito que te caracteriza, dijo riendo su doble. Pasa, ¿tienes que rendirme informes y no pensaras dármelos en la puerta?, dijo irónico el moreno.

Ambos jóvenes pasaron y tomaron asiento, haber cuéntame, que hay de nuevo en mi vida, ¿pudiste satisfacer a todas mis chicas?, decía riendo el moreno.

Toma dijo Gokú entregándole un maletín con algunas cosas que Turles le había dado (llaves de la casa, auto, celular, etc), no hay mucha novedad, ya estas comprometido, cerré hace poco un gran negocio de tus padres y a tus chicas las mantuve lo más lejos posible para que no alteren tu relación con tu prometida, dijo en tono melancólico.

Por como lo dices cualquiera diría ¿que no hubieses querido que vuelva?, bueno al menos nadie sospecho. Toma dijo el moreno dándole un sobre, lo restante del acuerdo.

No lo quiero, dijo Gokú.

¿Cómo, pero si es lo que te debo?, dijo Turles.

No, no lo quiero, yo acepte por necesidad, por mi abuelo con lo que me diste cubrí los gastos de su exámenes médicos y ya no necesito más de tu mugroso dinero, con lo que vivi en tu vida me doy por bien pagado. Te doy un consejo Turles, valora lo que tienes y cuídalo, tienes unos padres muy buenos, Vegueta no es tan malo como dices y tu novia es el ángel más maravilloso que conocí, cuídala, valora y respétala o te juro que te la verás conmigo, dijo Gokú.

¿Qué te pasa idiota, no me digas que te enamoraste de ella?, dijo burlonamente Turles.

No tengo que responderte nada, dijo Gokú saliendo apresurado del departamento, mientras ingresaba Raditz.

¿Y a este que le pasa?, dijo el de cabello largo.

Nada, que es un idiota, dijo riendo el joven moreno.

Minutos después:

Gokú iba por las calles triste, pensando en cómo afrontaría su vida ahora sin su ángel, cuando de repente alguien le tomo del brazo y le metió tremendo golpe en el rostro.

¿Qué pensaste Turles que las cosas se quedarían sí después de cómo dejaste mi rostro?, no vayas a creer que eres mejor que yo solo me tomaste desprevenido en esa ocasión, dijo furioso un joven delgado, cabello negro largo y lacio hasta los hombros, muy apuesto.

¿Quién eres tú?, dijo Gokú, quién se encontraba intrigado por aquel joven tan parecido a la novia de su amigo Krilin.

-.Recuerdo.-

Dieciocho, ahora va a vivir en esta ciudad amigo y estoy ayudándole a conseguir casa para ella y su gemelo, decía el calvo.

¿Tienes un hermano gemelo?, pregunto un sorprendido Gokú.

Eh¡ sí, pero el ahora se encuentra viajando por el mundo, es un inmaduro, se fue de viaje por una tonta apuesta, decía una linda rubia.

-.Fin del recuerdo: Tiempo actual.-

Ahora dirás que perdiste la memoria, no me hagas reír imbécil, dijo el joven dejándolo en el piso, ahora estamos iguales, y prepárate porque este año pienso presentarme en esa farsa de torneo que organiza tu familia y voy a humillarlos a tu primo y a ti, decía el joven.

Minutos después:

Gokú llego a su casa con una herida sangrante en el rostro muy cerca de su boca, intento entrar a su dormitorio sin que su abuelo lo viera, pero antes de que abriera la puerta de su dormitorio su abuelo noto su presencia.