Enredos de una adolescente.

Capítulo 18

A las siete la gente comienza a llegar, en menos de diez minutos estamos todos, solo falta que llegue el cumpleañero junto a Rubén.

-Hola chicas, que guapas- Elisabeth y Susana acaban de llegar.

Elisabeth va vestida con un vestido rojo ceñido hasta la cintura y de ahí sale una falda pomposa de tul que llega hasta medio muslo, lleva unos tacones negros altos, cartela negra y de pendientes unas perlas, el pelo lo lleva liso.

Susana lleva un vestido como el de Cristina pero en azul marino, con unos tacones y cartera rojos, el pelo lo lleva recogido en una trenza baja de espiga.

Triana lleva un vestido ajustado hasta encima de la rodilla granate, tacones y cartena negros, y el pelo ondulado.

A las siete y media llegan Rubén y Alberto, abre la puerta enciende la luz y...

-¡Sorpresa!- gritamos.

Se puede apreciar que está realmente sorprendido, no se lo esperaba, voy a saludar.

-¡Felicidades!

-Gracias, no me lo esperaba.

Río- que disfrutes.

Empieza la fiesta, nos echamos un cubata y nos sentamos en uno de los sillones. Rubén y Alberto se sientan con nosotras Rubén a mi lado y Alberto al lado de Triana.

Alberto le da las gracias a su hermana por la fiesta como unas mil veces y todos reimos. Me termino mi copa y me levanto para ir a por otra, Rubén viene conmigo, me recorre con la mirada.

-Qué guapa- me agarra por la cintura.

-Gracias, lo mismo digo.

Rellenamos nuestros vasos y vamos al mogollón a bailar. Las chicas se suman a nosotros, Edu se acerca a hablar con Triana. Están a mi lado por lo que escucho perfectamente lo que dicen.

-Hola, que guapa ¿no?

-Gracias, tú tampoco estás mal-ríen.

La agarra de la cintura y bailan. Rubén me agarra a mi y bailamos la bachata que suena.

-No bailas mal-le digo.

-Tú tampoco- me guiña un ojo y me gira.

Pasadas dos horas y cinco o seis cubatas nos sumamos al grupo que está sentado en el suelo formando un círculo, juegan a desafío o verdad.

Le toca a Edu, elige desafío.

-Le tienes que dar un beso de diez segundos a Triana- le reta una pelirroja de su clase.

Se acerca, le coge la cara y cumple su desafío y con lengua.

A la siguiente ronda le toca a Alberto darle un beso de diez segundos a Susana. 

Después le toca a un chico moreno que elige verdad, luego a la pelirroja que se tiene  que beber un baso de chupito de ron de un trago. 

Ahora le toca a Rubén, elige desafío y Alberto le desafía darme un beso con lengua de veinte segundos. Lo fulmino con la mirada. Vamos por el segundo veintidos y Rubén no me suelta.

-Ui, se os ve con ganas.

Consigo apartarme y seguimos jugando, me toca besar al moreno pero solo un pico, luego me toca un beso de diez segundo con Nate, el rubio guaperas. Después las chicas y yo dejamos de jugar, vamos a por otra copa y bailamos.