La Venganza Del Orgullo Rey [Frostcup]

3. Un Modelo al descubierto y Un Rey sorprendido

Era apenas las 8:20 de la mañana. Hiccup... No, mejor dicho, Hipo posaba provocadoramente hacia la cámara, pensando en cuando se iba a terminar esta tortura.
Como si el camarógrafo hubiera leído su mente, dio por finalizada la sección de fotos.

-Muy bien Hipo, tan perfecto como siempre- Decía guiñándole el ojo y haciendo que Hipo se sonrojara.

-EH, gracias? Supongo- Dijo tratando de no sonar nervioso. De repente el oji-verde sintió unos brazos alrededor de su cintura, para despues ser levantado como si fuera un niño. Hipo sonrió, ya que sabia perfectamente quien era él único que hacia eso con él.

-Guy, ¿Que haces acá?- Dijo entre risas, Guy sonrió y bajo al modelo.

-Hola, vengo a buscar a mi mejor amigo. ¿Acaso lo viste?- Decía fingiendo estar confundido, Hipo se río y le siguió la corriente.

-¿Tu amigo? No se de quién hablas- Dijo haciéndose el pensativo.

-Estoy mas que seguro que lo viste, es un castaño de ojos verdes, plagado de pecas y de la estatura de un enano- Dijo, recibiendo un manotazo de parte del modelo.

-Ei, mi estatura es común- dijo molesto cruzándose de brazos pero sin borrar la sonrisa de sus labios.

-Claro, común .... Como un hobbit- Río Guy comenzando a correr seguido del modelo indignado. Corrieron hasta el camerino de Hipo, Guy intento abrir la puerta pero no lo logro a tiempo, haciendo que Hipo chocara con él y los dos cayeran al piso, quedando hipo arriba de Guy.

-Mierda, pequitas afloja a los postres. Pesas mucho- decía Guy sonriente, Hipo lo miro desafiante y se levantó haciendo una pose de diva.

-No se de que hablas, yo de lo único que estoy lleno es de pura sensualidad- Dijo moviendo sus caderas de un lado a otro. Para después reírse, lo que el infantil modelo no se dio cuenta era de la mirada de lujuria de su amigo.

-¿Acaso me estas provocando, pequeño?- Dijo Guy levantándose del piso, Hipo lo miro confundido sin entender lo que su amigo le quería decir.
Sin darle tiempo a responder Guy tomo a Hipo y lo empujo hacia el sillón que se encontraba ahí.

-G-Guy ¿Q-ué haces?- Tartamudeo el pobre modelo, asustado por el extraño comportamiento de su amigo. Guy intentaba controlarse, pero solo con ver el tierno rostro de Hipo toda las ganas de comerse al pequeño castaño nublaron sus pensamientos, ahora lo único que deseaba era probar esos deliciosos labios.

-Perdón pequitas, pero ya no me puedo controlar- Susurro sobre los labios de Hipo, el modelo estaba demasiado sorprendido como para moverse.
Guy se acercó peligrosamente y cuando estaba apunto de juntar sus labios con los del pequeño oji-verde, sintió como lo mojaban completamente con agua fría.

-¡Qué Demon...!- Guy molestó por la interrupción se dio vuelta, encontrándose con la mirada enojada de Astrid.

-Espero que con esto se halla pasado la calentura, cavernícola- dijo enojada, tirando el balde que sostenía en sus manos hacia un costado.
Guy se quitó de encima del pobre oji-verde que todavía estaba aturdido por todo lo que había pasado.

-Oh, pero miren a quien tenemos aquí. A la mariamacho de todo el estudio. La panqueque Hofferson- Dijo Guy sonriendo engreidamente.

-Jo! Parece que el marica intenta hacerse el hombre. Cómico ¿no hipo?- La rubia soltó una risita que molesto demasiado a Guy.

-Mira, Rubia estúpida. Es mejor que no te metas conmigo porque sino- el castaño amenazó a la oji-azul la cual ni se inmutó.

-¿Sino qué?- dijo desafiante.