La Venganza Del Orgullo Rey [Frostcup]

8. Nerd, Modelo y ¿Ahora Rey?

El día pasaba lento, como si nunca fuese a querer terminar. Las cosas habían dado un giro de 360 grados, el tan ansiado resultado de la lista Playboy había sido la chispa que encendió la bomba del caos en todo el instituto, algo que todos los alumnos no creían que ocurriría o que al menos no vivirían para presenciarlo, había sucedido ¡El Rey había sido destronado! Así es señores, ese ególatra albino, amante de los espejos y profesional en las artes de la seducción, había sido destronado de una patada en el trasero en tan solo unas cuantas semanas, por un simple plebeyo sin experiencia alguna sobre el tema y lo mas humillante de todo es que había sido un Nerd, Hiccup Harddock, la persona que de ser un simple fantasma, un don nadie paso a ser el centro de atención de todo el instituto por un accidente donde sus pequeñas gafas rojas se alejaron de su rostro mostrando al verdadero príncipe detrás de ellas, al modelo Hipo. Un rey enojado y un Nerd desorientado, todo por una simple lista.

La horda de adolescentes hormonadas hasta la medula, corrían de un lado a otro por los pasillos del instituto. Hiccup, desde su escondite escuchaba los pasos acelerados de todas esas féminas que deseaban poder saborear al nuevo Rey.

-Encuentren al Inocente y sumiso Rey- Gritaban como si fueran guerreras en busca del enemigo infiltrado en su base para poder castigarlo de las peores formas, ese pensamiento hacia que el pobre castaño temblara de miedo.
Luego de un rato tanto los pasos como los gritos se fueron alejando, y por fin el pequeño Hiccup podía respirar aliviado.

Estaba dispuesto a salir de su escondite, pero unos nuevos pasos se hicieron presentes, estos no eran acelerados como los otros pero aun así hicieron pensar a Hiccup que todavía no era momento de salir.
El castaño se ponía cada vez mas y mas nervioso, ya que los pasos se acercaban con pereza hacia su ubicación.
El corazón se le paralizo cuando sintió los pasos detenerse al frente de la puerta, para luego escuchar la perilla de la puerta abrirse. Este era su fin, nada ni nadie lo iba a poder salvar, cerro los ojos esperando lo peor.

-Hasta que al fin te encuentro- hiccup abrió los ojos, al escuchar esa voz tan familiar para él.

-¿Acaso te estabas escondiendo?- Sonrió Rapunzel, riéndose de la actitud de su amigo.

-Jajajaaj ¿yo? ¿Esconderme? Nooo- río nervioso y se paro de golpe.

-Ajam, entonces me podes decir ¿que haces metido en el cuarto del conserje?- Dijo la joven cruzándose de brazos y mirando acusadoramente al pequeño castaño.

-Pff pues yo, estaba .... Estaba contando las escobas-Dijo agarrando la escoba que se encontraba descansando contra la pared.

-¿contando escobas?-

-Así es contando escobas-

-¿Con la luz apagada?-

-Es que así es más divertido-

-Ajam, ¿y cuantas escobas hay para contar?-

-Y hay 1 .... Y esta em esa emm más la que tengo en la mano son en total erm 1 escoba-

-Sabes que no vas a engañarme con una excusa tan boba ¿No?- Río Rapunzel.

-Al menos lo intente-Suspiro derrotado Hiccup, Punzel lo tomo del brazo y lo saco a empujones de el pequeño cuarto.

-No te preocupes Hic, Anna se aseguro de que el ejercito de desquiciadas no nos siguiera. Así que si quieres salir de acá en una sola pieza es mejor que nos larguemos ahora- Hiccup se tranquilizo al escuchar eso, pero se detuvo de repente al recordar algo, o mejor dicho alguien.

-Hic ¿Que pasa? Vamos-Dijo Punzel sin entender porque Hiccup había detenido la marcha.

-No podemos dejar a Guy. Tenemos que ir a buscarlo- le dijo el castaño con cierta desesperación, no importaba que, no abandonaría a su mejor amigo.