Mi Princesa... Todo Fue Una Apuesta

Capitulo 24

-¿Y si es verdad? ¿Qué pasaría?

Intenté alejarme un poco de él pero fue en vano.

-Ian...me amas?

Sonrió tiernamente y luego se acercó más a mi.

-¿aún tienes dudas de si yo te amo o no?

-y si, ¿no? Por eso te pregunto...-dije segura- si no quieres no me digas-dije luego con temor

-¿estás nerviosa?-susurró en mi oido

Y claro que si, pedaso de mierda!

-¿yo? No,para nada.

Un silencio incómodo se hizo presente en la habitación. Levanté la mirada y lo encontré.
Encontré a mi chico tatuado, a mis ojitos de gato, a mi Ian.
Le dediqué una media sonrisa y él solo se limitó a ver mis labios

-Agus...

-Dime qué es lo que quieres Ian...

-te quiero besar-me miró-¿puedo?

Asentí pesadamente

Me miró con ternura y luego juntó sus labios con los mios. Lo tomé por el cuello mientras que sus manos descansaban en mis caderas.
Me separé de él por la falta de oxígeno y besé tiernamente su mejilla.

-Te amo, mierda-susurró.

-¿qué dijiste?-susurré.

Me miró y sonrió.

-Que te amo- y me volvió a besar.

No se cuándo es que comencé a sentirme así con solo estar a su lado, pero me gustaba.
No entiendo bien que fue lo que pasó entre nosotros,  ya no creo eso de la apuesta, ya a no se si creer en todas las cosas feas que me dijo. Él es y será siempre el dueño de mi corazón

Se separó lentamente y tomó mi muñeca para guiarme a la cama, se sentó y yo me senté sobre él.

-Agus-susurró mientras acariciaba mi pelo.

-¿qué es lo que pasa?-pregunté.

-no podemos estar juntos-dijo con una mueca.

-per...pero ¿por qué?

-porque te amo y no soportaría que algo te pasara.

-si estoy contigo nada me va a pasar, te amo.

-repítelo-rogó con una sonrisa.

-Te Amo-dije y me atrajo hacia él para besarme otra vez.

-No... no puedo-dijo y se paró.

-Ian...

-por favor, necesito pensar.

Me miró por última vez y luego desapareció.

¿Qué mierda pasa aquí?

Bajé las escaleras en el vano intento de encontrarlo pero cuando llegué al living solo estaba Rian.

-Amor-dijo al verme-¿dónde estabas?

-En el baño. Lo siento pero tengo que irme.

-¿Por qué? Es temprano-dijo coqueto.

-En serio, debo irme-dije elevando la voz.

-Bueno nena, te llevo.

-No.- dije tajante- tengo auto- y salí de allí.

Tomé mi celular y lo llamé. Nada.
Le mandé un mensaje a Fer.

Ferchuuuu

Ferchu, viste a Ian?

Entré al auto y mi celular sonó.

De Ferchuuuu

No lo he visto...
Pasó algo?

No le contesté y arranqué el auto.
Llegué a casa y lo volví a llamar.

-hola?

Esa es la voz de una chica...

-está Ian?

-si, dormido a mi lado, cuando despierte le diré que llamaste

Y cortó.
Me tiré en la cama y comencé a llorar hasta que me quedé dormida.

5:30 AM

Me desperté por un fuerte ruido. Miré hacia todos lados y nada.
Me volví a acostar y otra vez ese sonido me hizo abrir los ojos.
Me paré y me acerqué lentamente hacia la ventana.
Parecía que se iba a caer el cielo de tanto que llovía, me di la vuelta y otra vez ese ruido me asustó. Abrí la ventana y lo encontré.

-¿Ian?- grité- ¿qué haces aquí?

-Quiero hablar contigo.

-Entra, te vas a enfermar.

Se trepó a un árbol y tomando impulso saltó.
Entró y se acercó más de lo normal.

-¿Aún te importo?-susurró.

-¿Qué quieres?-dije separándome de él.

-Quiero hablar.

-Estás mojado, espera que te traeré una toalla.
Entré al baño y tomé una toalla blanca y azul, se la entregué y me senté en la cama.

-Quiero hablar... de lo de hoy.

-No hay nada de que hablar, te acostaste con otra, ya lo sé.

-No amor-susurró con tristeza- no fue así.

-No me digas amor, es una palabra importante, no para que idiotas como tu le digan eso a todas.

-Mi amor, solo a ti te amo-susurró agachandose y tomando mis manos entre las suyas-te amo de una manera que no puedo explicar... sin ti en mi vida, me falta algo, no estoy completo, ¿sabes?-besó mis manos-cada día que te veía con Rian... era como que si me estubieran clavando una estaca en el corazón, sentía que la vida no tenía sentido sin ti, mi amor. Me enamoré de ti sin previo aviso y eso me asustó un poco al principio... pero ahora me asustaría si al despertarme cada mañana pensara en otra persona que no seas tu, si cada segundo de mi vida no estuvieras en mis pensamientos... me asustaría ya no amarte de la forma en la que te amo... por favor-susurró- tengo miedo de haberte perdido para siempre, mi princesa.