Are the Scömìchers crazy?

Semana 10

~ Scott~

Entramos a la habitación del hotel con un suspiro, mientras dejábamos las maletas y nos tirábamos en la cama, acurrucándonos uno contra el otro, cansados por el viaje.

-¿ Podemos quedarnos un rato aquí? Tenemos tiempo antes de ir a la prueba de espacio y sonido, quiero dormir bien un rato - murmuró Mitch por lo bajo, mientras se acostaba sobre su abdomen, ocultando su cara en mi hombro.

Me reí suavemente. Acaricié su espalda con dulzura.

- Tranquilo, te despierto cuando nos tengamos que ir - le susurré, mientras plantaba un suave beso en su rubia cabeza.

Y no pasó mucho tiempo cuando su respiración era suave y constante.

Sonreí mientras lo abrazaba.

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- Bienvenidos todos, espero que hayan podido descansar un poco del viaje, pero ahora necesito que se concentren, ya vienen a terminar de montar el escenario, las luces y la decoración, por ahora pueden conocer el lugar antes de la prueba de sonido- dijo Esther, amarrando su cabello en un moño sobre su cabeza.

Suspiré, mientras caminaba por el lugar hasta encontrar con mi mirada lo que quería: los chicos junto al escenario, hablando tranquilamente.

- Buenos días, tórtolos - dijeron Avi y Kirstie, muy sonrientes.

Sonreí, aunque los miré extrañado, han estado muy felices desde que nos fuimos de St. Louis.

- Hola a todos - dijimos nosotros, sonriendo también, aunque creo que es más por la felicidad del barbudo y la rubia. Como que se contagia.

- Me muero, me muero, me muero - escuchamos a alguien decir entre dientes, y nos giramos para encontrarnos con Sara, tachando algo de su libreta mientras caminaba apurada.

- Hey, chiquilla - dije, sonriendo a su cara ofuscada.

- Uy sí, mido menos de 1.50 m y tú mides 1.91 m, ay sí - dijo rodando los ojos.

Todos reímos a su enojo. Se veía graciosa.

-¿ Y las chicas?- preguntó Kevin.

- En la sala de descanso, trabajando - dijo riendo, mientras escribía algo rápido en su libreta. Sus lentes se resbalaban por su nariz. Mitch sonrió.

- Iré con ellas - dijo Kevin sonriendo, y caminó al lugar. Sarai rió por lo bajo.

-¿ Qué haces?- le preguntó Mitch, viendo lo que escribía.

- Tachando las cosas que ya están presentes en caso de un accidente, tengo la mayoría del equipo completo, pero me faltan algunas cosas y nos las traen hasta mañana - dijo suspirando.

Alcé una ceja a su uniforme, no era el que siempre usaba.

-¿ Paramédico?- pregunté.

Ella sonrió.

- No siempre fui médico - dijo, mientras caminaba hacia donde armaban el escenario - . Por cierto - se giró, sus ojos brillando mientras veía a Mitch - lindo collar.

Le guiñó un ojo, y yo sonreí al rostro sonrojado de Mitch.

Sí... Hermoso collar.

-¿ Qué pasa? - preguntó Mitch, evitando mi mirada.

Me reí.

- Vamos con los chicos - le dije, mientras enredaba mi mano en la suya y caminábamos hacia la sala de descanso.