Tinta Roja

XI

Dejé el sobre en uno de los bancos cercanos a la fuente. Me alejé muy rápido, corrí hacia la bicicleta de Alisson y nos fuimos del parque como un rayo.
Cuando ya estábamos a una cuadra del lugar nos relajamos y empezamos a ir más lento.
-Tienes alguna idea de quién puede ser?-dije.
-No. Pero supongo que es un chico-contestó mi amiga.
-Y no sospechas de nadie?
-No, Candice. Los únicos que lo sabemos somos Lewis y yo.
Hice una pausa para pensar, nadie más sabía, sólo ellos... Entonces ¿quién era el que escribía las notas?
-Estoy preocupada, Alisson.-dije.
-Yo también. No sabemos de que son capaces.
-Tampoco sabemos con que fin hacen los sobres.
-Puede ser Clara...
-Clara?
-Si, ella te odia. Seguro que hizo lo posible para descubrir algo malo de ti para hacerte la vida imposible.
-Podría ser ella... Tienes razón. Mañana hablaré con Clara.

***

-Clara... Debo hablar contigo.
-Conmigo?-dijo confundida.
-Si. Tú sabes algo de mí?
-Algo de ti? Cómo qué?
-Algo relacionado a mi familia...
-Se que tienes a tu madre, una hermana y un hermanito.
-Si. Pero no sabes nada más?
-No. Por qué preguntas esto, Candice?
-No importa.
-Ahora debes decírmelo.
-Y si no quiero?
-Echaré a correr un rumor sobre ti.
-Bueno... Te cuento, me han llegado notas extrañas últimamente y quería saber si fuiste tú.
-Ahora entiendo... Y no, no fui yo.
-Entonces me voy, no quiero que me vean hablando contigo-dije alejándome de Clara.
-Nunca hablé contigo si alguien pregunta-dijo ella.