Grafito

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La exclusiva solución que encontré para quitarme las esposas fue tomar una camioneta de pasajeros.

Para llegar prácticamente nadando por las calles adyacentes a mí casa.

Que estaban inundadas por culpa del aguacero.

Con el agua por las rodillas.

El bolso empapado.

Mis zapatos rebosantes de barro.

Escupida por el automóvil lleno de gente donde dure dos horas sintiéndome como sardina en lata.

Golpeada sin querer.

Con personas recostadas en todos los ángulos de mi cuerpo.

Aguantando la música estridente y horrenda que escuchaba el conductor.

Eso me hizo recordar la razón del por qué había optado por viajar en moto a todo lugar y no en esa porquería llamada transporte público.

Cuando llegué a mi preciado hogar.

Entre con cuidado.

El carro de mi padre no estaba y mi madre no daba señales de vida por ningún lado.

Extraordinario.

Por fin la suerte me sonreía.

Busque rápido la caja de herramientas.

Sin siquiera sacarme la ropa mojada.

Primero rompí la cadena con una pinza.

Dejando medio abierto uno de los tres eslabones.

Que gracias a mi gran fuerza pude terminar de romper.

Liberando la distancia corta.

Sin embargo la pulsera proyectaba ser complicada.

Por eso busque un Dremel multiuso.

Arriesgando a cercenar mis muñecas si no tenía cuidado.

Al tener el aparato en mi mano me acerque a una toma de agua.

Bañando el material cuando este se calentaba.

Tapando lo que podía de las chispas.

No paso mucho tiempo en ceder.

Permitiendo serenar mi mente.

Exhalando calma.

Escuche una puerta abrirse a lo lejos.

Deduje que se trataba de mi madre.

Por eso guarde todo con rapidez.

Tirando las esposas por una ventana al no hallar donde esconderlas.

Camine a la sala.

Con semblante tranquilo.

Senna se sorprendió al verme.

Preguntando cómo había llegado a casa si la moto no estaba afuera.

La razón de mi ropa sucia y mojada.

En su rostro se reflejó preocupación.

La calme de inmediato.

Mintiendo con cara de tragedia para disfrazar los hechos.

Parloteando que debido a la lluvia incesante se desbordo un rio aledaño a la Universidad.

Por eso no quise sacar la motocicleta del estacionamiento seguro hasta que bajara el cauce.

Pero como mi ropa quedo tan deshecha luego de resbalar y caer en un charco.

Tomé la opción de venir a casa en transporte para cambiarme.

EnséñameDonde viven las historias. Descúbrelo ahora