Los hermanos Blake

Reencuentros

Pov. Cass

Se abrió la puerta de la habitación y pude ver a Isaac entrar. Nunca lo había visto con un gesto más preocupado de con el cual se le había formado en la cara al entrar y verme en la camilla rodeada de máquinas y con vendas alrededor de la mayoría de mi abdomen y torso.

Rápidamente Isaac se acercó al lado izquierdo de la cama y yo trate de incorporarme un poco pero se me hizo imposible cuando me empezaron a doler las costillas.

-tranquila, no hagas eso- me dijo Isaac mientras que con su mano derecha me empujaba levemente el hombro para que me recostara. Lo notaba muy nervioso e incómodo.

-nunca vuelvas a asustarme así- me dijo con un tono de voz calmado mientras que con su mano izquierda buscaba la mía, como si fuera el gesto más natural instintivamente entrelace mis dedos con los de él.

-gracias por llegar a tiempo- le dije lo primer que se me cruzo por la mente.

-bueno, creo que esto se pondrá más incómodo de lo que ya es para mí así que mejor me salgo- me saco de mis pensamientos la voz de mi hermano. Me había olvidado completamente de que estaba en la habitación, al parecer Isaac también ya que se sorprendió al escuchar a Luca el cual rápidamente se paró de su lugar y salió tratando de hacer el menor ruido posible.

-cómo te sientes?- me pregunto mientras me quitaba un poco de pelo que tenía en mi cara y lo acomodaba suavemente detrás de mi oreja.

-si no me incorporo no me duele pero aunque sea siento una puntada de dolor cuando hago profundas inhalaciones.

-debí de estar allí contigo desde un principio protegiéndote de los rouges- le pude notar un ligero tono de preocupación pero sobre todo culpa en su voz.

-hey no te culpes por esto- le dije tratando de tranquilizarlo mientras que con mi mano libre le acariciaba ligeramente la mejilla notando el vello facial que le estaba empezando a salir.

-ya no te será tan fácil separarte de mí, no permitiría que te vuelva a pasar algo como esto- me dijo mientras se inclinaba un poco para depositarme un cálido y tierno beso en la frente.

-no pretenderé alejarme de ti- le respondí mientras se me formaba una media sonrisa en los labios a lo que él solo respondió con una ligera carcajada antes de depositarme suavemente un beso en los labios.

-me parece perfecto- dijo antes de depositarme un beso en la punta de la nariz y alejarse un poco para poder verme desde una mejor distancia.

Su mirada bajo lentamente de mis ojos a hasta mis costillas en las cuales se quedó viendo dudativamente, se notaba que quería preguntar algo pero no lo haría. Después de la cirugía el doctor me había vendado desde el abdomen hasta arriba de mis pechos, solo me había cubierto con una cobija y me habían puesto no sé cómo unos pants de Sarah. Sabía que Isaac quería saber cómo había quedado después de la operación pero no se atrevería a preguntar.

-si quieres puedes ver- le dije aclarando rápidamente. Se me quedo mirando sin reaccionar. Después de unos segundos entendí que no se atrevería mover la cobija que me estaba cubriendo por lo que yo lo tuve que hacer. Lentamente empecé a bajar la cobija ya que con el mínimo movimiento me dolía, fue un poco difícil pero logre quitarme la cobija hasta la cintura.

Por lo visto Isaac se sorprendió al verme solo con las vendas y sin nada que me cubriera, yo no sé si el esperaba que tuviera una playera puesta o algo más que las vendas para cubrirme.

-el doctor dijo que tardaría como cinco días en curarme, independientemente de que tenga sangre de alpha al parecer también mi atacante la tenía ya que no me estoy curando tan rápido como debería- le dije por que de seguro el no iba a hablar, al parecer se estaba debatiendo si poner su mano sobre el vendaje o no ya que su ano estaba a medio camino.

-no pasa nada- le dije agarrando su mano y poniéndola al inicio de mis costillas las cuales habían sido las más afectadas.

-no sé cómo pude permitir esto- me dijo mientras me miraba a los ojos con una mirada penetrante llena de impotencia y rencor.

-no fue tu culpa- le dije mientras alcanzaba su cara y la acercaba a la mi lentamente para darle un beso sobre sus carnosos labios.

-quédate conmigo- le dije separándonos del beso.

-no planeo separarme de ti- me respondió a lo que yo me hice a un lado en la cama para que él se pudiera acostar conmigo.

Isaac se sentó en el borde de la cama para quitarse los zapatos y luego la camisa para después acostarse a un lado mío. Me moví un poco mientras me acurrucaba contra el terminando poner mi cabeza sobre su pecho. Isaac me rodeo con sus brazos para acercarme más hacia él y me dio un beso en la frente.

-descansa- me dijo mientras nos mirábamos fijamente a los ojos. No me pude resistir y me acerque poco hacia el para darle un beso en la boca.

- tú también- le dije mientras me volvía a acomodar y cerraba mis ojos para dormirme. Había sido un día muy largo y estresante, al fin pude descansar sin tener que preocuparme que pasaría después.

Pov. Alec

Después de que Isaac se dirigiera hacia la habitación en la que se encontraba mi hermanita y Luca me quede solo en la sala unto a Byron. Necesitaba atender unos asuntos personales urgentemente, no tenía ni la menor idea de cómo excusarme sin verme un poco sospechoso pero para mí surte yo no fui el que se tuvo que excusar.

-yo ya me iré a dormir, no creo que tu tengas sueño así que si quieres te puedes quedar aquí o hacer lo que quieras- me dijo mientras se paraba y se dirigía las escaleras. No me había dado cuenta que era tan tarde, para ser sincero el primo de Isaac no me caía mal como me lo esperaba. Por lo visto iba a empezar a convivir más con la familia de Isaac por lo que tenía que tratar de llevarme un poco mejor con él. Tal vez después de lo que pase en un momento le agradare menos a los Stark y Buckley.

Para lo que tenia que hacer necesitaba hablar con alguien que se encontraba en el segundo piso de la casa pero en estos momentos era muy arriesgado para mí subir y deambular por los pasillos ya que alguien me podría descubrir. Lo mejor sería entrar por la ventana de su cuarto ya que todos los cuartos deberían de tener mínimo una ventana, para mí no era un problema la distancia la cual tendría que saltar por lo que me decidí por salir de la casa. Una vez afuera seguí su olor para ubicar su habitación. Fue una tarea demasiado fácil, la primera vez que capte su olor fue lo mejor con lo cual me podría haber encontrado. No creo ser capaz de alguna vez olvidar su olor, aunque fuera como una aguja en un pajar lo captaría su esencia en menos de un segundo.

Para mi suerte al encontrar su ventana vi que estaba abierta por lo que proseguí a saltar hacia la habitación.

Había pensado muchos escenarios de lo que podría pasar cuando hablara por primera vez a solas con esta persona pero nunca aso algún escenario por mi cabeza el cual se pareciera a este. Al aterrizar adentro de la habitación sentí como alguien me daba una fuerte cachetada la cual me hizo perder el equilibrio y caer al piso. Eso no fue lo que más me sorprendió, lo más raro fue que después de eso se subió encima de mí y me beso. Este beso es el mejor de mi vida, nunca seré capaz de olvidarlo. Al parecer ella también pensaba lo mismo ya que ninguno de los dos había roto el beso.

-Liv- dije con un tono de voz alegre mientras me separaba un poco de ella pegando nuestras frentes.

-Alec- me respondió antes de volver a besarme.

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