Esclava de un vampiro

E N - V E R D A D

*Narra Dylan*

Sus ojos eran hermosos eran de un color miel pardos y grandes, en verdad eran hermosos, no podía dejar de verla en verdad era bella, tenía que dejar de decir "en verdad", pero no podía negarlo, no sé si era por que era mi esclava y sentía esa sensación de querer tenerla siempre a mi lado, no había pasado en estos dos años y me era muy raro que ahora sí.

Cuando la vi la primera ves que vine de las vacaciones que tuve, choque con ella y la reconocí por la pulsera que llevaba aunque no me miro supe que era la chica que había visto hace dos años en esa casa vieja, ella tenia algo que me volvía loco y que no podría olvidarme de ella, cuando la vi en esa ocasión me pareció uno de los seres más hermosos que había visto, aún lo sigo creyendo, cuando la mordí fue para ningún otro vampiro me la quitase, su sangre en verdad era deliciosa y todo en ella deslumbraba, pero había tristeza en sus ojos.

Aunque estuviera con Eleonor, con ella no había pasado todo esto, ella era linda y todo eso, sentía algo por ella pero no tan fuerte por el gusto que tengo por Layla, no podía cambiar a Leonor por Layla tenía que amarla, yo la amaba y ella me amaba, tenía que afirmármelo a mi mismo, Eleonor era muy especial, aunque era todo lo contrario que Layla, entre ellas daría mi vida por Eleonor.

Oh bueno eso creo, tenía que estar cerca de Eleonor ya que eso me ayudaría con mi padre y con los otros jefes de los diferentes clanes, pero es imposible olvidar a Layla, era tan fascinante, que me desesperaba, me atormentaba cuando no estaba cerca, no podía mostrarme descontrolado, no a mí no por una mortal.

*Narra Layla*

Ya había pasado 3 meses, cuando Dylan quería sangre venia hacia mi, a veces me sentía mal por ser solo un objeto que generaba sangre y que Dylan no sepa los sentimientos que habían renacido en mi interior, aunque el podía leer la mente, bueno eso creía, por que hasta ahorita no pasaba nada.

Me hacía sentir tan mal, mis padres no estaban en casa y cuando trataba de hablar con ellos, solo me ignoraban o hacían que hable de nuevo por que no me escucharon, me había cansado esforzarme mucho para que me noten, cuando jamás había pasado, ahora Dylan era muy indiferente conmigo pero a la hora de la hora para venir a consumir su dosis de sangre era amoroso, me había cansado de que vengan a mi solo para su beneficio propio, no quería a Dylan, no quería más de esto y aunque Alice era buena conmigo no podía seguir con esto, quería irme de este pueblo.

Alice me había echo ocultar mis pensamientos y sementinos ya que ella se había dado cuanta que Dylan aprovechaba esto para usarlo a su favor, aunque era su familia, no le parecía justo lo que hacía, ella decía que tener una esclava no estaba mal, pero enamorarla o seducirla y que esta tenga sentimientos por él, era cruel,  me ayudo a ocultar todo, era demasiado difícil, era como un conjuro que me había echo decir casi por 3 días, veía como los hermanos de Alice me miraban no se si era una mirada de amistad o de indiferencia, pero me incomodaba, estaba recostada en mi casillero mirando a un punto invisible, cuando siento que me tocan el hombro, me sobresalto, volteo a ver dos caras conocidas, les sonrío.

Layla-me saludaron los hermanos de Dylan con un tono alegre.

Hola, ¿nos conocemos?- dije cerrando mi casillero, los conocía pero actué como si no supiera quienes eran.

En verdad eres hermosa- dijo Fox, sabía quien era por Alice, me sonroje y el sonrío, no sé si era un cumplido o me querían tomar el pelo.

Gracias- dije sonriéndole, veo que pasan unas chicas y me miran recelosas - ¿ Y como se llaman?

Yo soy Fox.

Y yo Estheban - los dos eran muy diferentes, mientras Fox tenía el cabello negro y ojos verdes Estheban tenía la melena de color marrón claro y ojos casi azules.

¿Qué clase te toca pequeña?- dijo Estheban.

Pues literatura, ¿y ustedes?.

Pues a mi también me toca- dijo Esteban, sus ojos brillaron, me miraba muy intimidante, pero se veía muy sexy, el sonrío.

Oh no, a mi álgebra- reí - lo detesto.

Es fácil de aprender - dice Estheban - eres un cabeza dura, nunca prestas atención.

No hay necesidad, pero no lo explican bien.

Miles de años como un vampiro y no puedes aprender una materia tan simple-sonreí, Estheban soltó una carcajada.

Esta chica tiene agallas Fox- él me fulmina con la mirada - 

Chica arriesgada, me gusta, al menos Dylan escogió algo bien en toda su vida -dice Fox, los mire, me miraban demasiado, ahora eran los dos no sé si era buena pero era como si trataran de descubrir que tenía - eres muy valiente para enfrentarte a mí.

Vamos Fox no estés así, es una broma- dijo su hermano, el me sonrío, también hice lo mismo, creo que por mecanismo de defensa.

Esta bien , creo que nos llevaremos muy bien- dijo Fox, el nos da la espalda y se va a sus clases.

¿Nos vamos pequeña? - dice Esteban, asiento.

¿Porqué pequeña? - le digo.

Tenemos cientos de años más que tu, además me gusta decirlo, eres más pequeña que yo - era cierto el me llevaba por unas dos cabezas mas o menos.

Es verdad, ¿porqué Dylan puede tener esclava? , ¿ustedes también pueden?.

No, Dylan es el que se convertirá en líder, de todos los vampiros de nuestra.. como podría decirlo, ¿tribu? - se ríe.

¿Enserio? - asiente - ¿no sería clan? - el asiente.

Es como un príncipe, el será el heredero al trono, por ser el hijo de sangre.

No entiendo, ¿hijo de sangre?

Me caes bien pequeña, pero ya llegamos a clases y esto quedará para una conversación en otra oportunidad - no era justo, quería saber - nada es justo en la vida y a veces las cosas debes saberlas en su preciso momento - mierda tenía que seguir practicando para que no puedan leer mi mente, solo sonrío.

Vale, esperare - entramos a clase de Literatura y a veces Estefan me miraba, me daba miedo, por que me miraba y sonreía como sabiendo que pasaría algo.

¿No les aburré? - pregunto.

¿Qué cosa pequeña?

Pues esto - señalo alrededor - llevar cientos de años escuchando clases

Pues si, pero debemos adaptarnos, no somos bienvenidos en tu mundo.

Pero no son malos, ¿por qué no salir a la luz?

Uno pequeña la luz nos delataría, dos no todo el mundo piensa como tú y tres - sus ojos brillan y sonríen - ¿crees que no somos malos? - me lo quedo mirando, algo en el me hacía sentir segura, algo en mí latió, parpadee varias veces por que me quede mirándolo fijamente -  tu no  - el me sonríe, voltea a ver a la clase y hago lo mismo, toco mi corazón, no era posible.