Dramione
OoOoOoOoOoOoOoOoOoOoOoOoOoOAquella tarde veraniega, la castaña estaba sentada frente a los lagos de Hogwarts, como de costumbre, leyendo.
Un rubio que pasaba por allí clavo su vista en ella.
¿Que diablos es lo que le pasaba? Es sólo una sangre sucia inmunda para el, pero en cualquier momento podría convertirse en algo más. Cada día, Draco la observaba con otros ojos. Podía notar sus lindas pecas, podía ver aquel brillo en sus ojos cuando leía, podía descifrar esa sonrisa de suficiencia cuando respondía bien en clase. Su sonrisa le fascinaba. Draco estaba confundido. Claro que lo estaba.
Meses atrás sólo era para el una sangre sucia, pero aquel día le dió un giro a la historia, aquella vez que ellos se encontraron luego de la batalla de Hogwarts.
Draco caminaba por los pasillos de Hogwarts. Se sentía nervioso. Su entrenamiento como mortífago lo ponía nervioso. Odiaba ser lo que era. Lo odiaba. Odiaba aquella asquerosa marca en su brazo. Extrañaba ser sólo un estudiante común. Una silenciosa lágrima cayó por su mejilla. Hermione pasó por su lado sin mirarlo. Apenas levantó la vista, pudo divisar aquella pequeña lágrima y se detuvo.
-¿Malfoy?- susurro de una forma bastante dulce lo cual sorprendió al rubio.
-¿Que quieres, Sangre sucia?
-¿Draco, estas bien?- a Hermione le daba pena. Draco podía ser un asqueroso con ella, pero nadie merecía sufrir.
-No es de tu incumbencia. Ahora solo vete a tragar libros, Granger.
-Pero sólo quise saber...- Draco la apresó contra la pared y le puso la varita en el cuello. Hermione soltó su mochila del impacto.
-Mira, vuelves a meterte en mis asuntos y te lanzaré un Crucio- la soltó en el suelo. Hizo un ademán con la mano, como si fuera a golpearla. Pero no lo hizo. Hermione no bajaba la cabeza. Cuando se estaba llendo, Hermione lo tomo del brazo.
-No. Se cual es tu problema- Le levantó la manga dejando ver la marca tenebrosa y la acarició con la yema de sus dedos.
-No me toques!- grito el rubio forcejeando pero el tacto de Hermione de alguna manera lo debilitaba. Y se relajó. Pudo admirarla mejor. Su tacto lo calmaba. Draco sintió un perfume. Un perfume femenino. Lo aspiro por unos segundos con los ojos cerrados y sintiendo el taco de Hermione. Se sentía tan bien. Luego reaccionó.
-SUELTAME. No vuelvas a tocarme, asquerosa sang...- se calló al ver la cara de Hermione. Estaba derramando lágrimas.
Ella se levanto también su manga dejando ver las palabras sangre sucia. A Draco le dolió, el sabía que su tía le había hecho mucho daño, por dentro le dolía. En un arrebato de locura y valentía, los brazos de Draco rodearon la cintura de Hermione, abrazándola. Ella abrió los ojos como platos, pero correspondió.
Los pensamientos de el rubio se interrumpieron al ver a un pelirrojo llegar junto a la castaña, dándole unas flores y besándola. Ella sonrió y se subió sobre el riendo. El corazón de Draco se estrujó pero aún así seguía mirando. No podia asimilar como una chica tan linda podía estar con una comadreja tan bruta como Weasley. Apretó los puños pero luego se relajó y se dirigió al castillo.
Horas después Draco se fue a la biblioteca. ¿Porque? Hermione siempre iba allí después de cenar.
Draco vio la puerta abriéndose arrebatadamente. Hermione entró hecha una furia y se mezcló entre más bibliotecas. Ron entró también hecho una furia y fue por donde Hermione se había metido. Draco observaba todo. Se acercó más a la escena y vio a Hermione tomándose la frente y a Ron caminando de un lado a otro.
-¡¿Como es que eres tan imbecil?!- "grito" ella en un susurro.
-¡¿Imbecil?! ¡¡Tu eres una zorra, no puedo creer que estés durmiendo con otro!!
-No es otro!! Es Alexander y sólo estoy en su habitación porque como es Navidad sólo estamos el, Ginny, Dennis y yo!!! Deja de ser tan celoso y ni me llames zor...- Ron le tapó la boca y la estampó contra la pared. Draco se levantó y se acercó a ellos.
-¡¡NO LA TOQUES!!- dijo agarrando a Ron de la camiseta y pegando su puño a su mandíbula. Madame Pince llegó hecha furia y hecho a ambos chicos. En el pasillo Ron casi descabeza a Draco pero Hermione lo alejó.
-Ron... Porfavor ve a la enfermería.
-Pero ese imbécil...
-¡¡Ve a la enfermería!!- gritó furiosa y al borde del llanto. Ron le hecho una última mirada de odio a Draco para luego irse furioso. Hermione se tomó la frente con una mano y con la otra se agarró la cintura.
No sabía porque se sentía tan incómoda. Draco la había defendido. Débiles lágrimas surgían de sus ojos. El instinto de Draco hizo que suavemente la rodeara con sus brazos. Hermione se sobresalto pero aún así correspondió al abrazo.
-No dejes que ese imbécil te haga daño. ¿Si?- dijo Draco tomando a Hermione de los hombros y mirándola. Ella asintió limpiándose las lágrimas.
Ambos iban caminando sin rumbo.
-¿Porque, Draco?- dijo la castaña de repente.-¿Porque lo golpee?- Hermione asintió- pues porque estaba siendo brusco contigo. Además no voy a negar que siento algo por ti- soltó sin pensar haciendo que Hermione lo mire con las cejas alzadas.
Draco no dijo nada más, se había sonrojado. Cuando llegaron a la puerta de la sala común de Gryffindor Hermione le tomo la mano suavemente. Beso su mejilla.
-Gracias. Nos vemos mañana.
-No hay de que. Adiós- Hermione dijo la contraseña y Draco, abobado, sonrió y se fue rumbo a su cuarto. Esa castaña si que lo volvía loco.
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One-Shots Potterheads
Fiksi PenggemarOne shots Hanny, Romione Dramione, Unicoldemort (se que les gusta) etc