Te sigo queriendo. ( Segunda parte Te quiero sin querer, profesor.)

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No puedo creerme lo que acaba de pasar... bueno, en realidad si, estaba en perfectas condiciones para saber lo que estaba haciendo y lo he hecho, pero ahora, pensando en frío, no sé si ha sido o no lo mejor para ambos.

Quizá haya creado falsas esperanzas tanto para él como para mí, reencontrándonos para volver a alejarnos, pero siento que ahora es justo lo que necesito, aclarar mis ideas hasta que Fede se decida y me cuente todo lo que está pasando, para que pueda ayudarle de una manera o de otra.

Siento que es demasiado, los ataques no paran de suceder a pesar de que estamos separados, ¿eso no le sirve a Fede para sincerarse? Alguien va contra nosotros, y algo me dice que Eva, esa chica que en dos encuentros me ha parecido una completa lunática, tiene algo que ver, pero entonces, ¿qué hace Fede quedando con ella? Eso me desvía las sospechas, si fuera ella, Fede la mantendría lo más lejos posible o al menos, haría algo para que parara de hacer lo que está haciendo.

Creo que tengo que empezar a coger el toro por los cuernos e intentar saber cosas por mí misma, sin pedir ayuda a Fede, ya que me ha quedado claro que quiere protegerme y mantenerme apartada, incluso ha puesto pausa a la relación por este motivo, sea cual sea.

- No quiero que nos separemos de nuevo, pequeña- Una vez fuera de la moto, Fede me agarra ambas manos, mirándome con tristeza.

- Yo tampoco, Fede - Me ablanda su expresión entristecida, pero tengo que mantenerme firme- Pero necesito que si continuamos juntos, sea con total sinceridad...

- Lo sé, por eso te pido que...

- No, por favor... - Lo interrumpo en un susurro- No me pidas de nuevo que confíe en ti, por que sigo luchando contra cada cosa que ha pasado desde que estamos distanciados para seguir haciéndolo, a pesar de que tú con tu silencio solo haces que mi desconfianza aumente.

- Pero si lo hicieras, las cosas entre nosotros seguirían como siempre, ¿entiendes?- Me mira a los ojos, desesperado - La decisión de que estemos separados es la peor que he podido tomar, pues nada se ha solucionado, por eso sé que debemos estar más juntos que nunca, que no tenemos que distanciarnos.

- Solo tienes que decirme toda la verdad desde que empezaron a suceder las cosas, desde los cristales a los frenos de mi coche y tu puerta, todo, necesito saberlo todo. - No quiero agobiarle, pero siento que tengo que insistir.

- Princesa...- Se pasa ambas manos por el pelo, sé que está en una lucha interna entre contármelo o no y yo espero paciente, sin parar de mirarlo - No puedo, no todavía.

- Entonces... creo que me voy. - Me resigno a decir - Cuando quieras explicarme quien es el o la responsable de todo esto, qué hacías quedando con esa chica y el porqué de esos hirientes mensajes, ya sabes donde estoy.

Frunce el ceño y se queda mirándome, pero sin abrir la boca, sin pronunciar una sola palabra, lo que hace que la situación se vuelva incómoda por momentos y me apresure para irme.

- Espera - Oigo a mi espalda. Mis ojos se abren como platos, ¿lo hará, me confesará todo? Me voy la vuelta para encontrarlo con las manos en los bolsillos - Yo también necesito que me digas algo.

- ¿El qué? - Me cruzo de brazos, sus ojos coinciden con los míos y se enternecen.

- Es sobre Oliver- Arruga la nariz al decirlo - ¿Debo preocuparme, pequeña? ¿Sientes algo por él? No quiero perderte.

- Yo te quiero a ti...- Susurro. ¿Siento algo por Oliver? Eso no sé contestarlo ahora mismo, no después de todo lo que ha pasado últimamente. - De eso estoy y estaré segura siempre, Fede.

- ¿Pero? - Tuerce la boca, echando el aire por la nariz. Me conoce demasiado bien.

- Pero Oliver es una de esa clase de personas que aparecen de repente en tu vida y... no te voy a decir que me ha hecho replantearme las cosas, por que en ningún momento he dudado en lo que siento por ti...

- ¿Tienes dudas? - Me interrumpe, moviendo la cabeza ligeramente a los lados, incrédulo - No entiendo, ¿cómo puedes tenerlas después de lo que tú y yo hemos vivido?

- ¿Cómo puedo tenerlas después de que me ocultes cosas?- Exploto - ¿Cómo puedo tenerlas después de que me hayas alejado de ti, después de que haya encontrado a una chica en tu casa y después de que me hayas mandado mensajes como estos? - Saco el móvil todavía apagado de mi bolso, encendiéndolo para abrir el buzón y dárselo.

Lo coge con desconfianza, mirándome con el ceño fruncido. Su cara va cambiando según va leyendo, hasta ponerse completamente blanco.

- Yo no he mandado esto, princesa- Se justifica, devolviéndome el móvil apresuradamente, con asco - Sería incapaz de decirte cualquiera de esas cosas...

- En el fondo, nunca había creído que lo hubieras hecho, pero entonces, ¿quién? Nos conoce, Fede. Quien haya escrito estas palabras sabe lo nuestro, sabe quien eres tú y quien soy yo.

- Me robaron el móvil - Dice entre dientes, apretando la mandíbula.

Chasqueo la lengua, eso es todo lo que va a decirme, que le robaron el móvil. Sabe perfectamente quien se lo robó y quien ha hecho que hayamos estado a punto de separarnos para siempre.

- ¿Sabes qué, Fede? - Grito indignada, con las primera lágrimas saliendo sin remedio - Anoche tuve la peor pesadilla de toda mi vida, en ella soñé que te perdía, que te ibas de mi vida y yo no podía hacer nada para evitarlo. Entonces supe que lo quería todo contigo, absolutamente todo. Que eras el hombre con el que compartiría cada cosa de mi vida, con el que quiero formar una familia y... casarme. Que seamos una de esas parejas que mueren juntas tras una vida llena de recuerdos y momentos inolvidables. - Abre la boca y vuelve a cerrarla, sin pronunciar palabra. Espero paciente a que aclare sus ideas y pueda decir algo.

- Y entonces, ¿cuál es el problema? - Sonríe de oreja a oreja, acercándose a mí para tomarme la cara con ambas manos - Hagámoslo, compartamos toda la vida que nos queda.

- No se puede estar con alguien que te daña, ¿no lo entiendes? No soy la alumna que conociste hace años, Fede. Soy una chica de veinte años que está decidiendo su futuro, y quiere que ese futuro sea contigo, pero esa protección de la que tanto hablas, solo va a conseguir separarnos. No podemos compartir todo si a la primera dificultad que hay decides apartarme para que no sufra, ¿y si yo quiero sufrir contigo?

- No quiero que sufras... - Traga saliva, cogiendo aire - Haría cualquier cosa en la vida para ver tu sonrisa alegre cada mañana, para que al despertarme tenga seguro que vas a estar ahí a mi lado llamándome amor, cualquier cosa. Y si en ese cualquier cosa se incluye perderte y que seas feliz al lado de otro, lo haría, ¿sabes? Porque yo prefiero que tú seas feliz. Porque si ahora mismo me dicen que salte al vacío para que tú estés a salvo... lo haría, pequeña. No dudaría un momento en saltar, ni un momento.

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¡¡Hola!!

Bueno, aquí os dejo un nuevo capítulo. Quiero deciros que no queda mucho para el final (aunque todavía no sé exáctamente cuanto) pero bueno, de momento, sigamos :)

Capítulo para:

Lovero13

JohannaViteriAntn

¡¡Espero que os guste, a vosotras y a todos los demás!!

Y bueno, enseguida empezaré a subir alguna frase de mis libros a instagram, si alguno está interesado, solo tiene que buscarme aquí: @miriampareja019

¡¡Como siempre, os leo!!