ARIES Y TAURO

Capítulo 2

Cuando llegué a clases, mi salón ya estaba lleno, tomé un asiento en la parte de atrás, saqué mi cuaderno había una foto pegada de Alan y de mi, estábamos en una fiesta. El me besaba en la frente y yo sonreía a la cámara. Como? Como pudo cambiar todo tan derrepente, recuerdo todavía cuando me pedía que no me vaya, que no lo deje. Cuando me abrazaba muy fuerte y me decia Te amo.
Mis lágrimas estaban a punto de caer, había algo que podía hacer todavía?

Te extraño
Enviar.
Miré el mensaje una parte de mi corazón fueron enviadas con esas palabras. Él sentía lo mismo?

Yo tambien te extraño.

Su respuesta me sobresalto, mis manos estaban temblando, no lo podía creer, estaba tan feliz; me sentía llena de electricidad y algo mareada, estaba a nada de salir corriendo de la clase e ir a buscarlo.

Como estas?
Enviar. Visto.

Yo bien y tu?

Como? Como!! El podía decir que el estaba bien y yo me estuviera muriendo de dolor, fue como un pinchazo en mi estómago.

Algo bien
Enviar.
Visto.

Estas enferma? Que es eso de Algo?

No, te extraño. Que pasó?
Enviar. Visto.

Yo queria un tiempo a solas para entender lo que siento.

Mi corazon latía a mil por hora. Estabamos a punto de arreglarlo todo y volver. Sería como antes?. Yo solo quería arreglar esto.

Necesitas mas tiempo??.
Enviar. Visto.

No se dime tú. Yo estoy enamorado de ti. Pero no se lo que piensas tú.

Yo te extraño, Alan. Te amo. Quiero volver a verte. Cuando te veo se siente bien.
Enviar. Visto.

No me respondió, pase horas mirando si me llegaba su respuesta con un nudo en mi garganta, pero no respondió. Que había dicho mal? Que!.

No eres la persona que yo esperaba.

Tome las cosas de mi asiento, se cayeron mis lapiceros, seguro medio curso me estaba mirando, pero mis lagrimas no me dejaban ver nada, salí corriendo de mi clase, me metí en el baño y me encerré en un cubículo. Así? O más miserable? No podía con esto, no podía. Empecé a llorar, mi corazón habia sido aplastado, mi corazón estaba roto, roto por donde se escapaba mi alma. No podía.
No me arrepentía de nada, había sido felíz, había amado a Alan, pero no fue suficiente. Deseaba que hubiera sido diferente, quería gritar y romper algo.
Tenía que superar esto, podía superarlo. Yo tendría que poder.