ARIES Y TAURO

Epílogo

Entré corriendo a la  clase, ya era muy  tarde. Todos me miraron mientras cruzaba la puerta y con paso apresurado me sentaba.
- lo siento - susurré.
Me quitaron importancia y la clase prosiguió. Saque mi cuaderno y me puse a buscar un bolígrafo  para tomar apuntes pero al parecer no tenía ninguno, me apenaba pedir uno prestado y hacer un escándalo aun mayor, mientras exploraba mi bolso me tope con una bola de papel violeta. Lo desdoble.
Aries y Tauro. Tuve una lluvia de flashbacks, destellos de todo lo que había pasado hace medio año. Me estremecí.
Alan. En mucho tiempo no había pensado en el y ahora estaba de nuevo aquí ese sentimiento de que lo había perdido. Si bien era correcto el alejarnos y era lo mejor, lo extrañaba como persona, como amigo.
Aries y Tauro no estaban destinados a tener un amor que perdurara pero podrían estar destinados a apoyarse, a ser compañeros; no tenía porque terminar así. Un papel podría decir muchas cosas pero no definir mi destino.
¡Rayos era un odioso papel de astrología barata!

- Tierra a Cinthia, hola!! - me quede colgada mirando mi taza de café, Sally hablaba y ya no sabía de qué.
- Lo siento,Sally te quiero escuchar pero hoy paso algo muy raro...
-te encontraste a otro chico sexy  en tu jardín?? - lo dijo, mientras se le abrían lo ojos como platos.
- Si muy graciosa, hablo en serio Sally....
- Suéltalo
- Qué sabes de... - me puso la mano en la boca para callarme
- no lo dices en serio! Después de todo? Ci  creí que lo habías superado - me miró como si yo fuera un cachorro en la calle. Puse los ojos en blanco y aparte su mano.
- Sally solo quiero saber que esta bien, no se si lo entiendas... - la mire casi suplicando.
- Tiene un partido de fútbol hoy con Fer. A las 3. Pasó mucho tiempo Ci... - Sally tenía algo más que decir y luchaba por guárdalo.
- dilo, Sally  se que sabes algo - la mire fijamente.
- Ci! No me presiones... es Alan sale con una muchacha muy agradable y seguro estará con él... - me miró  para ver mi reacción, lo cierto es que me dio un pinchazo de envidia. Porque el había encontrado a alguien y yo no.
- No pasa nada, yo voy en paz - dije con una sonrisa  para que Sally pudiera tranquilizarse.
- Más café preciosas? - se acercó Daril con una cafetera en la mano, Sally decía que era una delicia poder observarlo solamente y una gran tristeza que sea gay. Ella solía sonreír demasiado cuando hablaba con Daril, Sally  no tenía remedio.
- Creo que solo un poco más - dijo Sally  sonriendo un poco demasiado, era gracioso ver la escena.
- No hay problema, me encanta que pasen por aqui es refrescante verlas, les traeré unas galletas - Después de la noche en la que Gabriel  y Daril abrieron  mis ojos, no pude estar más agradecida eran personas muy buenas y se habían hecho mis amigos lo que era muy valioso para mi y fue necesario que Sally conociera este lugar mágico con personas mágicas quedó tan encantada como yo, pasábamos mucho tiempo en el café de Daril era muy acogedor.
- Cinthia y Sally mis chicas  favoritas, ¿cómo estan? - era Gabriel apenas llegaba, se acercó a nosotras y nos saludo a besos era una persona muy cálida.
- Quiere ver a Alan - dijo Sally sin poder resistir, Gabriel  me miró empezó a abrir la boca pero le corte
- Si pero solo quiero ver que este bien, no es porque este cayendo  en la espiral y todo ese rollo, solo siento que es algo que debo hacer...
- Cinthia, lo sé. Bueno no lo sé, pero quizá sea una buena idea. Si sabes que sale con Jazmín verdad? - Así que era ella, una chica menuda, rubia de ojos claros  era bastante  adorable, ambos me miraron  esperando mi reacción, estaban preocupados que después de todo yo no lo había podido superar, pero lo cierto es que si lo había hecho saber de su nueva novia me ponía nerviosa por el hecho de que ella pueda odiarme a mi solo por ser la ex de Alan. Solo quería llevar las cosas en paz.
- Solo quiero llevar la cosas en paz, Si?

Apenas podía  caminar estaba muy ansiosa, no había visto  a Alan en mucho tiempo y ya no estaba segura de si debía  verlo.
- ya camina! Para empezar  fue tu idea y si lo piensas es como cerrar  el ciclo  terminar todo de forma positiva quitar todo lo negativo de tu vida - Gabriel siempre tan lógico  pero ahora me sentía muy nerviosa y el estaba apunto de jalarme  y llevarme hasta el campo de fútbol solo para que yo tenga  el cierre que debía  hacerme bien. Sentía mi respiración entrecortada.
- Cinthia mírame, inhala, exhala. Otra vez eso es.... ya esta...
- Gabriel tengo miedo, no lo he visto en mucho tiempo, si me odia? Si él no quiere verme? Si me ignora? - me ahogaba de nuevo.
- Cinthia! Basta! Respira mujer! Tu puedes hacer esto, vamos que no deje a Daril  plantado solo para verte fallar en tu propio  plan, es absurdo. Así que solo lo haremos y todos felices al final, confía en mi.

Cuando lo vi jugar en el campo sentí alivio, se veía bien y estaba aquí. Gabriel me tomaba de la mano para seguir sentada en la gradería y no salir corriendo.
- Se ve bien, ya nos podemos ir Gabriel...- dije con mi ansiedad empujandome  a huir.
- No, tu hablarás con él.
- Pero yo no sé qué decirle, no sabría por donde empezar o como decirle...
- Cinthia... - Alan tenía una toalla con la que estaba secando su sudor el partido ya había acabado.
- Alan... - fue todo lo que me salió...
- Tu novio? - dijo mirando nuestras  manos entrelazadas, Gabriel me soltó y empezó a reírse de manera exagerada...
- Iuuu, no. Claro que no, somos amigos. Soy Gabriel y apropósito muy gay, en fin iré por agua, los dejo - se fue dejándome con la boca abierta, me mando un beso con la mano como deseandome suerte.
- Que amigo tan peculiar te cargas te Ci - Alan se veía muy entretenido con la escena.
- Como has estado? - dije de repente, me miró y sonrió.
- Tenias razón  Ci, en todo. Creo que no podré querer a nadie como te quise sin embargo  fue lo mejor alejarse.... - su voz se apagó  y se me quedó viendo...
-  Cinthia, no te quiero fuera de mi vida. Te heche de menos a ti como persona, yo no se que pienses tu....- lo dijo con mucho esfuerzo se paso  la mano por el pelo, estaba nervioso, me sentía más aliviada dijo lo que yo quería decirle en esencia.
- Amigos? - dije pasándole  mi mano y él me la estrecho era un acuerdo.
Se sentía bien. Me sentía más liberada, como si al fin las cosas estuvieran en su lugar.
Alan y yo no fuimos los mejores amigos pero no nos guardabamos  ningún tipo de rencor,  siempre quedo ese cariño mutuo de lo inolvidable que vivimos, nuestro apoyo incondicional en cualquier situación, yo solo guardé todo lo bueno  igual que él y dejamos lo malo en el pasado  como debía ser.
Creo que el verdadero final feliz es vivir en paz contigo. Llenando tu vida de actos positivos. Amando y fallando, pero siempre con las ganas de seguir. De buscar oportunidades y conocer a gente maravillosa en el camino de nunca dejarte vencer por tus miedos y con valor de romper las espirales que te hacen daño.
Al final solo importa que tan feliz eres...